martes, 10 de agosto de 2010

LOS CAMALEONES, NOVELA DEL PROF. VICTOR ARIAS

Tribuna del Bajabonico.
Viernes 9 de julio de 2010

LOS CAMALEONES.


Dedicatoria.
A mi muy apreciada y valorada madre y bien recordado padre… como recompensa por la siembra de honor y respeto que ambos juntos a sus hermanas, y hermanos, mis tías y tíos, pusieron en los surcos de mi niñez
a mis hermanas y hermanos sobrinas sobrinos cuñada por la ayuda moral que siempre pusieron a mi favor.
A mi difunta esposa y a mis hijos y a mis nietas, nietos, pero especial dedicatoria para mi única hija Yumidla, por toda la fuerza moral y respaldo suyo y de su marido, para que los Camaleones tengan una anatomía realmente contable en término matemático. A mi profesores Bruno Rosario Candelier, Amarilis Pérez, Socorro Collado y Rafael Holguín, Ivelísse Prat de Pérez, Jesús de la Rosa… Marino Henríquez, José Contreras. A doña Herminia A los que como yo han puestos la mirada en el horizonte social y han cruzado las alambradas sin herir la blancura de su frágil camisa al natural, sin ambages ni circunloquios porque de ellos he aprendido….A los que han transitado sobre las movedizas arenas del poder sin salpicarse la solapa, enfangarse, ni empuercarse los cristales del edificio privado de su vida familiar…a los que estuvieron sofriendo el sazón del poder municipal en los crepúsculos del siglo veinte y en las alburinias del veintiuno (1998-2000)… para Milvio Simón Morales, presidente político y municipal en ese primer año, para los otros Presidentes, especial para Victoria Pichardo regidora presidenta, para su honrado esposo Daniel. Para Blas Ulloa, Manuel Antonio Victoria, José Luis Carvajal, secretario municipal, para Modesto Medina Francisco, para Zunilda Pérez de Medina.
A los Tony Bissón, y Tony Amada y para Nicolás Henríquez, Yolanda Cruz, Ismael Cruz Bonilla, Julito Bonilla, Chiche y Alfredo. A Miguel, Juan de Mata Núñez, Dileccio Peralta, Cesar Peralta, Alejandro Aguirre, Josefina Rodríguez, Dámaso, Mayra, para los hermanos Reyes Henríquez. Agradezco a las señoras Antonia Bonilla, Maria Luisa Tineo, Margarita Disla, Cristina Clase, Amarilis y Melvin, Porfirio Luna, Neftalí, Osiris Guzmán, Aristarco y familia; para Macorís, y… en las páginas de esta Opusgrafía, ojala sea posible colocar el nombre que en los Camaleones que no aparecieron, De todos lados Gracia Plena.
Agradecemos en sus inolvidables recuerdos a José Antonio Hurtado el viejo amigo Cheo, así mismo a Diego González, ido sin ver la cosecha que ellos sembraron.
Chiche y Alfredo. A Miguel, Juan de Mata Núñez, Dileccio Peralta, Cesar Peralta, Alejandro Aguirre, Josefina Rodríguez, Dámaso, Mayra, para los hermanos Reyes Henríquez. Agradezco a las señoras Antonia Bonilla, Maria Luisa Tineo, Margarita Disla, Cristina Clase, Amarilis y Melvin, Porfirio Luna, Neftalí, Osiris Guzmán, Aristarco y familia; para Macorís, y…en las páginas de esta Opusgrafía, ojala sea posible colocar los nombres que en los Camaleones no aparecieron,
De todos lados Gracia Plena. Agradecemos en sus inolvidables recuerdos a José Antonio Hurtado el viejo amigo Cheo, así mismo a Diego González, ido sin ver la cosecha que ellos sembraron.


PUERTO PLATA,
R. D. BAJABONICO ARRIBA

PARA Domingo García,

Para Humberto Francisco,

Para mí distinguido ex alumno Julio Cesar Vargas

y Julio Cesar Diaz y los otros distinguidos que en los

Medios de difusión defienden el derecho a la comunicación.


A ellos entrego estos Camaleones.

TITUTO
LOS CAMALEONES
AUTOR

PROF. VICTOR ARIAS

ABRIL 24 2007

EDICIONES BAJABONICO

DIAGRAMACION

CONSTANTINO CRUZ ARIAS

IMPRESIÓN

BAJABONICO DE LAS GARZAS

Si existió entre El Técnico Industral Angel Francisco y el ingeniero Milcíades Lemos, secretario general y presidente del partido del buey que más jala... algunas contradicciones, se disolvieron cuando al primero le entregaron la certificación de Alcalde electo, elegido por el voto directo del pueblo imbertolino el 16 de mayo de final de siglo 20, y inicio del 21… Juh, Angel Francisco Medina, es el primer síndico del siglo 21.
Milcíades es un hombre joven de una codificación intelectiva en el mundo de los cálculos y de lo humanístico, caso raro, si se toma en cuenta que es de honda extracción pedagógica y socioagricola. Esto lo coloca en el pabellón de la realidad regional como a un personaje interesante más que importante. Y eso él lo conoce. Fue por eso que sin ser un salta-montones, un brinca kioscos, y derrumba empalizadas lo hallamos bailando en las fiesta de Manuelico Martinez Morrobel y en la de Florentino Flores. Era el presidente de la institución que en esas elecciones recibió la mayoría de votos, del pueblo sin esperanzas en el último crepúsculo milenario.
Ahí van cambiando de camisa según la brisa y el relámpago y o el color de los rayos de la luna sobre la raya de una visible sonrisa marcada en un gesto, en una seña blanca, morada o colorada. Lo he visto en esa olimpíada desde que las pieles de los hombres y las mujeres, padecieran frío y hambre. Así desde que el cuerpo surcó los montes, los caminos, los triíllos y las calles. Desde que naciera la traición yo los gobernantes abrieron los brazos a los inversionistas interventores, Cambiando de Swesters y de franelas, como de chancletas los buscavidas y los proxenetas haciéndose imbéciles escondiendo los colmillos tartufianos en faldiqueras salpicadas de oropeles ensangrentados, mostrando un perfil multifacético y policromático…
Estaba encima de una roca a orilla del Bajabonico, río de corrida rápida aunque de corta extensión, y de escaso caudal, con los pies en la chorrera y luego pasar a cortarme las uñas. Como aún no era adulto, no veía las cosas de mi entorno. Ahí como la piedras como las gramas estaban quizá burlándose de los que no las diferenciaban, las gotas del rocío que como chicharras muchos no las pudimos ver, pero estaban ahí, como una realidad.
El cuartel no pudo cambiar los hábitos de truhán, de fullero, los vicios, las costumbres negativas, siguió con los vuelos de cimarrón y troglodita fanfarrón. Recordemos que no conocía las letras, pero sí los números. Firmaba para retiras su cheque con dos SS que parecían dos 55. Los compañeros de fortunios y de parranda lo bautizaron como Dobleese. Un día hacía bastante frío en una loma Jobillos en la cercanía de Villa Altagracia, al recibir los aparejos y vituallas dijo- Yo soy montadoi- Yo conozco ei secreto de la esterilla y de las jáquimas. Muhacho,-- dijo Jacinto Puente y Puente de apodo doble P -eso no es un panó…es una frazada para el frío de la mañana cuando se acerquen las lluvias y estemos en el pico Duarte en las huellas de los Guerrilleros de Manaclas. Dobleese que era un joven alto al reconocer su error se encogió como un perezoso y cerró los ojos amarillos.Otro día hicieron requisa porque se había perdido un juego de cubierto de plata y platino. Dobleese estaba muy –mejicano, se creía cultivador del buen gusto… pero cuando finalizó de cantar fue llamado para ser detenido por habérsele –técnicas aritméticas, sin embargo hizo pacto de aberración por no aprender la lectura: sumaba multiplicaba y dividía, en la mente nunca pudo sacar una pequeña cuenta en los cuadernos con lápices.
En los Juegos de Manigua armaba contiendas que siempre ganaba, por ser un individuo de grandes trucos. Conocía los parajes de los dos municipios y en cualesquiera se internaba llenaba los bolsillos de frutas a su pasos y de huevos, preciaba los de garzas creyéndolos de guinea. Censemayá le llamaba como apodo”Arrasa con to” 12 cheles que tenía para la compra de los condimentos y sazones se los llevó en las uñas --eso fue arrasa con to --dijo, en voz alta. Apolinar Silvano Silva era su nombre entró a la fila del ejército de la tiranía dos años antes de la llegada de los guerrilleros del 14 de junio del año 1959. Desde entonces fue nombrado como Dobleese, al llegar al rango de cabo comenzaron a llamarle cabo dientes por los poderosos que los tenía levantaba hasta cientos cincuenta libras con las mandíbulas y los colmillos rompiendo el viejo record de 132 libras de arena seca diferenciaban. La gota del rocío, el grillo que como la chicharra, moría de placer. Muchos no pudimos nunca ver pero era una verdad real.
Luego pude ver que descuartizaba a una chivita de la recua de María de los Burros. Era Apolinar Silvano Silva, quien echaba en un saco las bandas de carne para ponérsela en la espalda. Virginidad Silvano que era su padre buscó al alcalde y sometió a su hijo por haberse robado un animal que no le pertenecía fue sancionado a pagar 5.75 más el pago del valor del animal. La persona que se quejo contra la persona de Apolinar, era María de los burros, quien recibió 9 pesos con 50 centavos. Don Virginidad se avergonzaba de que dos de sus hijos fueran débiles de carácter y de personalidad. Muchas veces se le escuchó reclamar a Celso y a Dobleese alejarse de los juegos de
azares y dedicarse con mayor energía a las tareas de la estancia y cortijo que habían heredado de sus abuelos, pero tanto uno como el otro no tenían oído para oír, ni vista para ver. Dobleese seguía siendo fullero, completaba el círculo de jugador, cuatrero, proxeneta y Celestino. El juego desarrolló, su capacidad para los números, hallaron en su mochila, lista de lotería Batistiana y la caraquita venezolana. Dobleese fue a reclusorio por 12 días a pan y mantequilla.
En Bajabonico de las Garzas paraje de Imbert de los Cañafístolas, vivía Toñita la colorá, a pesar de tener piel morena, de las mejillas salían los reflejos de dos rosas rojas. La colorá era muy baja, sus cabellos eran muy cortos y los trataba con químicas animal y vegetal que llamaba lejía. Las manos eran de muñeca de plástico parecían de un pianista, contaban que eran expertas en caricias capaces de enderezar las torceduras, especialmente las miradas y que de su cadera había mucho que referir. Siendo morena poseía una circunvolaturas noble contaban que amplificaba su forma para aumentar las apariencias. Era conocida además como Toñita patica de chivo por lo rápido que se desplazaba y movía sus piernas en el tablero de las emociones. Contaron que era bisnieta de Juana Trinidad la saltitopa… La coronela. Patica de chivo era amiga de Dobleese, que a los 11 años la hizo suya Luego que esta saliera de un reinado de la coronación de la virgen en la iglesia San Antonio… durante las flores de mayo…cara de fuego natural del verano. A muchos los pantalones los han abandonados pareciendo pequeños silos por los ventanales, por un remiendo mal cosido retrato de miseria y de persecución laboral imposición escolástica del imperio tiránico. Volvía a la peña donde estuve en el río y fue cuando columbré la presencia de un hombre de baja estatura que conducía una retahíla de burras venia en la más vieja atada con una soga de cabuya. El señor llevaba en la mano derecha un garrote de naranjo que empleaba además de defensa de apoyo en los barrancos del subir y bajar de Naranjo de las Chinas donde vivía. La burra llevaba corotos y añafiles, que usaba como despensa portátil. Entre los trastos llevaba dos calabazos de boca a la medida de su puño izquierdo el derecho no cabía para sacar los azúcares, las sales y otras especias que necesitase. En un tercer calabazo pero con el orificio del tamaño de su boca tenía el agua para beber y para cocinar, sin embargo Ireno era un individuo de comportamiento raro en caso que cupiera así decir, bastante difícil lo consideraban los vecinos un pájaro de plumas zaramgullonas, pero no se mojaba los pies cuando cruzaba …!aguas de arroyo o chorrera!
Ireno Danielo Bonilla, es un zaramagullón de arroyo -dijo Justino la “Comadre,”no se mojaba los pies en poca corriente por temor a convertirse a pez, o jaiba La camisa le pesaba mucho y en ocasiones pensó que las mangas se les convertían en alas, que batían los vientos y llegaba a lugares ni imaginados por eso ponía nudos en las puntas y la amarraba al ombligo y a las trabillas de los pantalones. Como correa empleaba un cáñamo sostenedor del Machete con la punta recortada. Este cáñamo tenía 9 nudos que lo fortalecía en el contenido anatómico y atómico. Minutos después de haberme bañado encontré a Ireno sentado en la haragana que había sido de nuestros abuelos Gregorio primero y segundo de Juan de la Paz. Bebía café de aroma embriagante y desee ser adulto para adquirir esos beneficios saborear el llamado café fuerte. Danielo era muy cariñoso con los miembros de la familia, hacía creer que era hijo del padre de mi abuelo Juan de la Paz. Por lo visto y lo oído nunca había ido a la puerta de un hospital ni para curarse las mazamorras que muchas tenía don Ireno Bonilla en los dedos del pie derecho.
Era dueño de una salud de acero poseía una larga estancia de buena salud espiritual, pero había perdido parte de los dientes ya que los usaba en la pelada de cocos. Llegó a ser campeón en pelar frutas y semillas con los colmillos La noche llegó con sus pies livianos y se quedó en los matorrales haciéndola más oscuros que otras La crecidas del príncipe fluvial llegaba a los vecinos con el hedor a
tierra mojada y a fangosidad .En los cortes de leñas, esa misma noche se guarecían de la lluvia, en los aleros de -- bohíos de los obreros y tiendas de campañas de los propietarios en la mañana los muchachos recogían frutas atoradas en los troncos de la playa. Muchas veces oía las embarcaciones cuando se marchaban cardadas de azúcar, maíz y melaza desde el puerto. Los carretilleros guardaban las herramientas alejándose de la montaña de sal en grano lista para ser molida, y del atibe de maíz. Me entristecía con el sonido de la sirena del central amistad al imaginar a los obreros almorzando con guarapo de cañas y pedacitos de bombones de harina de trigo o un guayado de frambuesa y una empanadas endeble y anémica. Ireno salía, de la residencia de doña Daniela Arias, se alejaba con la cuerda que conducía sus leales asnas en la derecha el madero de limón. En la galería lo imaginé sentado en la sombra de los anones cerca de la señora Flora García, al comprobar que habría mal tiempo llegó al medio del salón rió al escuchar galimatías del juego de dado –Parada pintas, topadas, topo y topo todos. Dejó el salón cuando escuchó decir “llanimetia”, no podía comprender las galimáticas expresiones, al no mirar nubes preñadas volvió al centro de los jugadores por la fuerza del azar ocupó sillas de las alejadas saludó a Ramiro Crisostomo y al señor Valentín Ventura —Me va bien contestaron, me va bien! Intercambiaron roce de dedos y se separaron del salón donde los protagonistas se molestaban de los mirones. En la Damajagua, las muchachas buscaban los trajes de baño, se acercaba a todo galope un tropel de lluvia, el ingenio anunciaba las cuatro de la tarde con su sirena ronca. La fabrica de queso GEO abría las puertas a las obreras los jugadores tienen en su mente la luz de la ganancia..
En Hacienda La estrella, al norte de La penitenciaría nacional de La victoria un descendiente de Victoriana Arias, soñaba ir con su esposa de las manos hacia la ciudad urbana pero ella caminaba en la acera izquierda y el entre los zarzales rozándose con los matorrales. Los separaba una líneas de alambre de púas, inopinadamente él cae en un profundo hoyo negro. La esposa luchaba para rescatar a su marido. Como parecía imposible ---una señora de aspecto mandinga le plantea que para poder salir del profundo precipicio del marido debía comprar de los dulces de coco de los que ella –la abuela- vendía –si compra de estos dulces y comen de ellos de inmediato saldrá, del fango donde está metido. -
Así lo hizo, y ocurrió como había propuesto la abuela. ---desapareciendo por igual, 15 después llegaba la noticia de la muerte de Victoriana Arias, su otra abuela. Me acosté temprano quedándome dormido y las imágenes que llegaban como un frágil película, volaba sobre los cañaverales del central ozama y los bajos de Haina y de los Jobillos de Villa Altagracia. Veía cuerpos doblados en los arrozales en las piernas encima del machete, como viejos aradores cortándoles los yugos a los bueyes que hombres parecían, sembraban penas y quejas en tierra de cristal mirando las heridas en los rostros en llantos, yo volaba con las palomas y los cuervos con los petigrís y con las lechuzas, con la cigua y las cuyayas y desperté en las pencas de las palmeras cansado con las piernas y las manos arañadas escuché el canto de un gallo de otros. Volví y me quedé dormido viendo que los caballos, se convertían en camiones y en camionetas llevando racimos encima de racimos vaciándolos en los hospitales donde tractores y palas mecánicas apilaban la osamenta de Yolanda y de Tingó. De las heroínas de Ojo de Agua, empujadas por la brisa en espirales, esparciendo en polvo levantando vuelos de papilones y crisálidas blancas. Continuaba la ruta viendo cinturones sin cinturas, y ojos sin quijadas, alas voladoras, ante el imperio de lodazales salados podridos nauseabundos saliendo de los pechos de oficiales en humo de fantasía como ríos arrastrando lama y maleza, desperdicios y asquerosidades de empresas extranjeras y en mimetismo bandadas de cuervos cerraban con sus picos las factorías y a los ingenios, mientras tropeles de asnos cargados arrastraban los hierros en cópulas de becerros y jorras hembras bípedas y cuadrumanos de camastros y carreteros en carretas viejas desperté con la letanía que al revés decía don Ireno mientras tractores araban los arrozales y me tenían presto para comenzar el degustamiento de un plato de exquisitas lombrices en escabeches de bacterias inocentes. Al abrir los parpados vi que un gallito Kiquiriqui buscaba placer en los manjares de una gallinita japonesa. Era las 10 de la mañana el perfume culinario llegaba por las puertas y ventanas de los ranchos y bohíos de Bajabonico de las Garzas. Ireno dejó lo que hacía para regresar hasta la carnicería mas, ya los chicharrones que iba a comprar llegaban a la ferretería de La Mella en Imbert de Los Cañafístolas, se dio cuenta que el dueño de la carnicería era el mismo que la iglesia y de la escuela. Eran suyas como los reiles las carretas y los bueyes eran del ingenio.. ¡Ah! olvidé a los obreros. Como los dueños del mar crecían con las riquezas de los medios de los pescadores. Ireno se internó en Naranjo Chino o mejor dicho en Bajabonico de los Naranjos, lugar encima de las copas del sombrero de la loma dicen que Ireno recordaba siempre las imágenes de un sueño de su adolescencia donde hacía el amor con una señora octogenaria que se mantenía con las energías de una pre- adolescente. -enramadas de los bejucales, que para el eran marquesinas de baldosas finas rodeadas de jardines de orquídeas caras como fragantes y lozanas . Luego de entregar a sus hembras buscó en las árganas los corotos para sacar la caja de los fósforos de Marca Estrella fabricados en San Felipe de Puerto Plata, rió de orgullo al recordar que Imbert de los Cañafístoles, era el rey del queso GEO, y del Azúcar más dulce y que San Felipe del Ron más suave y de los fósforos de mayor lumbre, los guardó en el soberado. Envió a su hijo Jacinto por agua y dijo a Juan el Mayor—Vete donde la prima Colasina Medina, que saque yuca en la quebradita de paso coita tres manos de rulos cuatro filos y de reculada tráigase Juan, una yaida de caña cristalina para entretenei las tripas en lo que ei supión se aproxima a la gaiganta de los platos.
Con el calor del supión, comida preparada, con arroz en poca cantidad, víveres cortados en pequeñas lonjas, carnes cangrejos, jaiba, mariscos de cualquier agua , hojas nuevas de oréganos poleos, de yuca, de culantro, de cilantro, mostaza todo tipo de condimentación para comida amarga o salada con influjos Mandingas, llegó al compás la lluvia y a pesar del perfume de la carnicería pasaba como súcubo las moléculas de las gotas de lluvia, y saludaba a los bohíos de yagua y ramas secas .
Los que fueron a llevar los Chicharrones a la ferretería de - La Mella, con el rebuzno de un asno que traía varias libras hielo, protegidas con virutas de madera aserrada. El dueño ordenó que otros burros rebuznaran mientras ocurriera el enterramiento de los bloques del hielo. La lluvia seguía peinando los cerros y los peñaderos, el ruido de río Damajagua movía las hojas de las matas de guineos, desde los fondos de los quebraderos y de las hondonadas. Con la ida de la caída de la lluvia renacen los vuelos de mariposa la libertad, y los voladores surcan los espacios haciendo piruetas en los aires construyendo avenidas sin vayas ni bulevares antagónicos en las oscuridad resucitan las luciernagas melancólicas y los rápidos cocuyos agoreros de sensores lapidarios y de azules luces Jacinto recibía el olor a yuca hervida, y producía en los túneles de sus interiores ingratas sensaciones de temor, cuando tenía ocho años escuchó que Basilio Silverio decía sobre el asunto. --es señai de que porai jandan las sánimas dei purgatorio. Parece que las dejaron salir-- murmuró, nueva vez ---¡Ay Chilo!-- dijo el señor Saturnino Cruz y Cruz, que lo oía,--déjese de dici pendejadas como esas bien sabe usted que culebra no come gallina con ei seco tampoco come mangú de ahuñama… si señoi.! En la casa de Higinia Bonilla, cambiaban los muebles de lugar, habían oído la cábala de que de esa forma una mujer estéril quedaba fertilizada. Llevaban ya 34 veces, cuatro veces más que lo registrado en los almacenes de la cábala. Doña Higinia puso mayor atención a una voz que no pudo nunca descifrar. Pero que cada vez que salía el marido para donde la querida la voz le decía-- dile a Gabino- que haga el Hoyo del sanitario, que limpie el de la casa grande. Muéstrale la ceniza y el pote de creolina y no deje de pasarle los cigarros Tamborileños .dígale por demás que tumbe 123 racimos de palmera porque los puercos están despiertos a las tres de la mañana y no dejan dormir a los nietos.
El señor Angel López entraba a los almacenes con la carreta repleta de alimentos para una jornada trimestral, en la casa de Ireno Jacinto entregaba una caña pelada a su padre que guardó el cachimbo humeando todavía, en el pantalón de color azul con el dorso de la manos zurda secaba un hilo de saliva enroscada entre los brotes del bigote Papá gritó Juan, --¿cuántos años tiene de mueita nutra abuela? Ireno no le contestó y acarició la espalda con el índice de la mano derecha.
La noche cambiaba de color como los funcionarios en tiempo de elecciones esa tenía un turbante negro como la consciencia de un soldado imperialista. Juan Cambero miro afuera sus hojas interiores se llenaron de la pena quien invadió la toga de su vida juvenil, creyó que unas manos lo abrazaban y un calambre se aposesionó de su continente humano. El olor a yuca continuaba crecía desde los matojos y guayabales. Aumentó el estado anímico del joven Juan Cambero, como las haces del jacho viajero y volador que los ordeñadores en los potreros de los Hainsenbert y los cortadores de caña y carreteros del central amistad usaban como señal de que el alba se acercaba a pesar de sentir la misma sensación horrorosa y de temor que los otros hijos de Ireno que como Jacinto no podía conseguir saborear el placer del sueño prematinal.
Jacinto estaba muy consternado al oír decir de voces de su padre, que en el paso del río debajo de la mata del aroma
secular salía la imagen de una mujer parida de dos, allá en la cruz con clavos de acero, sentada en una piedra y que los pies les colgaban hasta el río, dándoles de mamar a las gemelas, y que pasa horas entera llorando, por no poder pasar al otro lado, por el peso de las niñas. Antes de difluirse las tres imágenes desde el fondo del río se escuchaba la voz de Justiniano Aníbal el ahorcado, quien lamentaba haberse quitado la vida luego de golpear a su mujer y creerla muerta, por celos la había garroteado –Tengo miedo a las Mellizas decía come huevo, el cuartero -- ¿de qué Mellizas ni que trillizas es que este
come suela habla? Comentó Julio Silverio atascado en medio del charco de la peña. Qué le pasa a este pendejo necio? Nadie le respondió. En la noche el nieto de Juan de la Paz, volaba encima de los cañaverales veía a los militares que cortaban las espigas que sobresalían de las cosechas del sur y de los frutos del este cuando se lo hizo saber esta lloró copiosamente por los muertos incinerados en vez de enterrar con la tijeras. Otros días vio que llevaban las espigas a los farallones de los pueblos marinos del norte y del sur. Esas mimas escenas mostraban que desde las paredes del baúl, salían unas gallinas en cuerpos de mujer por piernas tenían alas, y plumas en vez de cabellos piernas desnudas pero sin piel cruzaba las palmeras, cocotales yucales y maizales, luego la ciudad vislumbré que un hombre lanzaba sal con la mano izquierda sobre la sombra del fenómeno demoníaco con la figura de gallina cayó en un bosque, siendo degustada por esbirros voluptuosos Entre ellos el cura leía el salmo 23, y cada palabra abría un frente de donde emanaban dulces lágrimas que al contacto con el polvo, se convertían en terrones de sal. Ireno Bonilla, amarró como de costumbres las burras, en cadenas y ya en Bajabonico de los Bonilla, engarfó en un pote del corral del cementerio pasó a la fábrica de dulces y de bombones, para comprar fundas de pan amargo los guardó en los calabazos de bocas anchas, y si no era que cocinaba comía muy poco. Hacía grande supiones asopados y moros de granos verdes y maduros cocinaba hojas tiernas en abundancia al término todo lo dejaba con el sello higiénico que lo singularizaba, sobre todo era un senescal muy limpio y ordenado. Mientras se bañaba es una esquina del río halló encima de una peña donde guardaba el estropajo de breñas y hojas de palo amargo, una fundas con nueve pedazos de velas seis habían sido encendidas cuando se puso ropas limpias las guardó en las arganillas y prosiguió sus rutas imprevistas llegó a la fábrica de sombreros del señor Carlos Reyes, pero el hedor a pestilencias lo sacó de inmediato, miró que en un campo abierto un ejercito de gusanos como si libraran una épica batalla devoraban los cueros de las reses dos viejos, parecían ser los líderes hacían alardes de ser dueños de las últimas estrategias, encima del cuero ya seco un viejo gusano dirigía un espectáculo superior, cientos y cientos se descolgaban por las correas para entrar en combates a las nuevas galerías recién inauguradas. Ireno se midió cinco sombreros y al no caberle ninguno es un pequeña cabeza abandonó la empresa.. y ya en el ingenio Amistad deseó un trago de alcohol pero prefirió uno de los bombones comprados en la mañana donde Miguel Bonilla cerca del Cementerio. Ya en la carnicería de Bajabonico de las Garzas compró orejitas y hociquitos de puerco. Habiendo pagado y buscado sal en el colmado volvió y compró un par de rabo de cerda jorra, que -según los caprichos suyos abría las cuevas de la buena suerte en los juegos de azar. Al llegar al río se bañó en la charqueta donde había encontrado la funda con las velas, buscó salvia para el estregado de las rodillas y los sobacos que eran donde más se estregaba. Permanecí meses sin verlo, hacía vidas ermitañas por temporadas. Supe que estuvo en la fiesta de Santo Tomás el 20 de diciembre en Arroyo Resabio, en la comunidad de los Minaya en la casa de Eulalio Santos. Días después a la mesa donde leía mis clases llegó, el lagarto que siempre compartía conmigo el jugo de limón que para las tres de la tarde recibía de merienda en tiempo de calor. Parecía el perrito de mi primo Luís, esperaba que en el platillo unas cuantas gotas del trofeo gustativo. Este lagartito me liberaba del molestoso vuelo de las moscas mientras yo intentaba interpretar el libro Moral Social de Eugenio María de Hostos, obra que me había prestado Edgard Ericsson foco de luz en el túnel escolar del municipio El sabor a dulce atrajo varias moscas y más que cazador parecía una ranita medía la distancia, sacaba la media aritmética los movimientos del insecto hizo nuevas operaciones y cálculos pero al primer intento se desvió del objetivo y capturó las heces que según mi parecer eran las de un semejante suyo. Cuando mi lagarto saboreaba el bocadillo equivocado se mordía la lengua purpurina escupía por el asco y la nausea que le causaba la boñiga que llegó a saborear. Se pasaba las manos por la boca, le presenté mis condolencias por la muerte del anhelo de cazar, y no las aceptó, sin embargo en su mirada me enviaba agradecimientos cuando dejé de mirarle se marchó avergonzado. Nunca supe por qué le decían Justino… la comadre, me enteré que era jovial de carácter ledo, no era ni alto ni pequeño orejas abiertas, y narices congoleras y manos pequeñas de barbero era muy delgado, en la cabeza se ponía un gorro de piloto o aviador, simulaba un pequeño avión, sostenido en el sobaco llevaba un maletín con las herramientas de barbería. Los lenguas largas decían que la comadre era un Camaleón que se convertía en cualquier cosas en cualquier momento y en cualquier lugar, del cuello colgaba un crucifijo de hueso de polla tuerta, aseguraban que era boyerita y fetichista. -Proxeneta aberrado que en teoría era un moralista dogmático. Quien narra, en los juegos de pelotas, aseguraba que podía tener conversaciones con las muchachas de clase media de los tres municipios de la parte sur oeste, de Puerto Plata. Dicen que tenía un aura para convencer las flores de mayor y exquisitos perfumes de la alta sociedad.El Alcalde Municipal, se llama Angel Francisco, abre sin producir bullas, el despacho le pide al asistente suyo, que se ausente mira a la secretaria y descuelga el teléfono. La suerte de vez en cuando favorece a los desviadores y falsificadores de objetivos y desandan rutas imprevistas Comenzó a caer un sublime aguacero, nadie miraba las persianas ni la puerta del despacho del incumbente edilicio y cuando dejó de llover abandonó el cubículo, para juntarse con el asistente que le entera de la cantidad de compañeros que esperaban su presencia en la biblioteca. Volvió a ordenar el pago de varios formularios 8- 15, a Suplidores, pero las carcajadas y las risas de los militantes que les esperaban lo sacaron sus propósitos al comprender las razones de tal manifestación. Pensó que era cierto, que ella, su mujer habia hecho de tripas corazones, para que ahora el actuara como un príncipe manejando los intereses de la municipalidad imbertolina…
Manuel Victoria—encargado de Catastro. Estaba studiando la manera de llegar a la secretaria general del cuerpo edilicio.
Aquira, la secretaria, lo miraba con la magia de sus deseos infinitos, dejaba ver los pétalos de su lascivia con la fragancia de los cálices de sus labios, en cambio El dejaba que los suyos humedecieran haciendo gestos voluptuosos aumentaba la alquimia pasional. Entre juegos primaverales, y respiraciones de ozono crepusculares en flor, ella huía del embarazo biológico al compás de besos y caricias convertidas en gotas cigoteras con la mirada, con sólo eso, tenía para ir al baño a secarse y complacer el deseo de orinar.
Justino, La comadre, se movía entre las faldas de las parajes como guineas entre los bejucales y en los hierbajos dejando sus mañas y muchas veces los sentimientos desagradables, en las raíces maizal donde acarició las piernas de la hija del sepulturero en Angostura, en Boca de Cabía, en
boca de Caonao, en Rió Grande, en La llanada, en Bajabonico de los Morones, retornando por los Charcos de La damajagua. Un día en la velación de Catrina Polanco le dijo a Cándido –La mujer que usted quiere está en el salón verde. En la habitación verde. Era Narcisa Lengua Suave, hermana de Isabel dueña del Burdel Habitación Verde. En los contornos pueblerinos no había muchas mujeres con el brillo festivo que Narcisa Lengua Suave, era boyerita, era exhibicionista necesitaba tener un acto erótico de previa observación, de esa manera su excitación superaba todo las normas y la estabilidad --Me excito con ver a un gallo carreteando a una gallina pero tiene que ser de plumas blancas, sino no, para que lo sepa—manifestaba con tranquilidad.
Justino bebía café mientras contaba—Pues si esa muchacha con el simple roce se ponía en optimas y adecuadas condiciones, pero es como te dije- apuntalaba nueva vez, --tiene que vei, para ella ei seixo entra poi lo sojos , su deseo flota entre espermas y espumas , es puro cachondé y pasión es mitad barraco y mitad gallina de corral. Cándido escuchaba con suma atención las orientaciones de la comadre .Inició el arte de amar con su abuela en los corrales mirando a las chivas y a los canes al natural sin tropiezos Justino terminó de saborear el último traguito de café entregó la silla donde estuvo sentado por más de una hora el señor Ireno, que traía humeante un jarro de tisana de jengibre y de manzanillas antes de sentarse, sumó los asistentes, y consigo había 14 en banquetas de costaneras, preparadas para la ocasión. De repente exclamó --Señores! Los que los vieron que aún no se sentaba los miraron con atención y simpatía—me gustaría continuó—que alguien se animara a contestaime ei poi qué de las guerras? ¿Qué buscan los fabricadores de esta? ¿Cuái es ei Dios que lo estimula a moveise? ¿Será ei Oro? ¿Podría sei ei Petrolio! ¡Estoi seguro que nuejei agua, tuavia no! Ei fuego, señores fue meicancía que produjo muchas mueite, y muchas guerra Ireno bebió el segundo trago del te que aún humeaba más que la pipa de Marcelo de las Calabazas que acababa de llegar a un rincón de la velación, hizo unos tragos más y como si lo hubiesen hecho para limpiarse la garganta cual místico demagogo agregó—Lo que no saben las grandes Naciones es que las estamos obseivando desde las confines dei univeiso desde lo más oscuro y escondido dei planeta. Sabemos que las poderosas naciones, evitan los nacimientos de niñas ahora están asustadas las naciones temen que el mecía que se acerca para época sea una niña.
Evitan el nacimiento de mujeres Cuando dijo que sólo el 23% de las mujeres eran sacrificadas en laboratorios como conejillas de indias. La gente se acercó para escucharle sin
obstáculos.-- Crearan nuevos caballos de aceros? Se preguntó, con aliento de académico. ¿Resucitaran a Hiroshima? ¿Clonarán a Nagashaki? ¿Poi qué no fabrican un cerebro maestro que haga cambios en la naturaleza alimenticia dei hombre y la mujer de hoy? Los anteriores han matados millones de inocentes niñas y niños. ¿Cambiaremos los días de semana? Y convertiremos en escuelas los centros que hasta ahora la oligarquía ha estado empleando para realizar sus vicios? De los 14 se quedaron 9 pero al final los despidieron con aplausos de la concurrencia entera Cuarenta y seis manos aplaudieron al señor de las burras.
En la misma velación, un señor de cabellos canos explicaba sobre las miradas creadoras, del bien y del mal las que crearon el verde y el rojo, el azul y el negro .Multiplicaron el deseo partieron la misión en gargajos y residuos abrieron las grietas y se multiplicó la herida haciendo mayor la suya, y las líneas parieron túneles, y cráteres. De repente ese mismo individuo hablaba de las vacas flacas y de Concho primo, de flor higüero y de caña de vuelos de mariposa y garzas blancas concluyó hablando de sancocho Prieto de las tres piedras del fogón y de Justino Aníbal el ahorcado, de las tres comidas calientes. Recordaba los cortes de leña que llevaba la miseria a cuesta a su casa desde la yuquera desde los aserraderos en las barcarolas pesqueras, en los potreros y en las caballerizas. Recogiendo café tumbando
cacao huyendo de la guardia de la tiranía, sus antecesores los habían hecho de los de Ulises Heureaux y de Ramón Caceres, en callejones y caminos medio siglo después los azules de Trujillo y los colorados de Balaguer. Los incontrolables de las calles Moca y de la María Montés, del Club Fabio Fiallo, y de la José Contreras.
Isabel era una tipa acre avinagrada, áspera, salvajemente erótica. A marraba sus cabellos con trenzas de colas de mulas prieta, según su abuela Mariquita, el contacto de los cabellos del animal con el cuero cabelludo de la hembra humana alejaba el embarazo, pero la nieta tenía las dudas, había oído al abuelo hablarle a la señora, que dejara de hablar tontería. Se desenvolvió entre el dilema, en ese vaivén de su dos horcones de engendro –tengo mayor creencia y fe en la ciencia del viejo. -Mabuela es muy fanática, decía—Me prohibía comer guanábana, piña, sapotes tamarindo y lechosa, pero me comía racimos de uvas sureñas en casa de la madrina o cuando el abuelo me guardaba escondido de la vieja claro está, para evitar discusión . Lo que no cuenta ISABEL a nadie, es el embarazo metamórfico que tuvo, cuando era mujer Apolinar Dobleese, permaneció 13 meses y esperando desenlace vio como resultado el nacimiento de una bolsa gelatinosa de sangre con grandes ojos cubiertos de vellosidades amarillas, con garfios como dedos, dicen que el abuelo lo enterró a las tres horas de haber nacido.
Era zafra de recogida de café, pero Isabel iba a la de Maní, en Julio y agosto. Los olores traían quejas y con estas llegaban los recuerdos de cada noche buena, triste en verdad ahora, que estaba embarazada no tenía, certeza de la paternidad entonces dijo:--a este o a esta le pondré tres papás pero si es varón tendrá sólo dos… los varones son conflictivos aguantan menos. Isabel, como Dobleese, no aprendió a leer, no aprendió a escribir, pero multiplicaba, sumaba, cuando pasaba por los centros escolares, se santiguaba y rezaba los cinco misterios sentía una amargura mezclada con dolencias espirituales.
Ella tenía muchos amigos y amigas habitaba en ella, el raport entre grandes y chicos, por tener un alma positiva era escasamente rechazada. Muchas abuelas las llegaron a admirar porque era dulce amable y muy bondadosa lo mismo que generosa. En Bajabonico de los guanábanos escaseaba la lealtad y la bondad, pero ella entregaba su cantera en total a los senescales. A las parturienta pedía los pañales para lavar cargaba agua potables y frescas a los enfermos. Muchas veces hallándose triste se volvía anacoreta y se iba para los montes para volver cargada de ramos y raíces medicinales para desembarazar el entorno al terminar recordaba la abuela Mariquita, con imágenes de colores y de sabores veía un enorme hueco por donde pasaba la tarde con galopes de nostalgias infantiles en mochilas de pensamientos colorados y amarillos corroyendo las nubes. La noche, que el poeta había construido en una preñez plateada, para soñar también para amar la vida de forma diferente que la abuela Mariquita. Pero hombre --¿Qué paite dei credo es que Isabei se cree que es?--manifestó Dobleese, en qué es qui priva esta mujercita? Dígame usted? Podrá sei un encanto, pero quien no la conoce, Isabei jun, es muy peliaguda es una pobre diabla, de cientos dos tropezones ha estado 23 embarazos y no es madre tuavia
Ireno Bonilla dormía en una cama hecha con pencas secas de rulos y de guineos cuatro filos con pedazos de cajas de cartón, el hacía una encuesta entre los difuntos que después del ajusticiamiento de Trujillo, se habían envenenado, o ahorcados, al escribir 1212, sintió que una fuerza hercúlea lo apretaba en el cuello y llegó a mirarlo en una bandeja negra como el del Bautista, soñaba que su lengua lamía la sangre que salía por los ojos, despertó cansado y muy asustado.
--¡Unjú, claro que es verdad! –Dijo el viejo- convicto por prácticas de incesto, aquel día de los aguaceros que los ríos no daban pasos. El olía las prendas íntimas, de las nietas y de las ahijadas, le agradaba auto complacerse iba a los lavaderos a buscar placer en los tendederos
--Yo lo vi respirar con gritos y ayees de placer al respirar extasiado teniendo los ojos bien, bien cerrados
-Ese día estuvo en el arroyo. Le vi cansado y parece que el azúcar le fallaba porque permaneció, mucho rato escupiendo y garrapelando--¿Cómo puede ser? --Claro que se asustó al ver llegar a una de las dueñas de los medios fondos, pero cuando menos esperaba la otra le cayó a escobazo entonces Ireno, emprendió carrera entre las furnias de las playas de la quebrada. Aquera de las Máquinas, llevó a Angel Francisco los formularios 8-15, para la firma, -ELLA lo miró y se alejó del despacho, tenía mucho deseo de mantenerse aislada de los intereses de la sindicatura. Estaba segura que la gente lo sabia y le convenía disimular --debo aparentar que Rojo y yo, no hemos arreglados-Estaba segura de que encarnaba muy bien el papel de los camaleones. Muchos la ubican como una mujer arrogante, arpía, ambiciosa, necia, apática, altanera y, ambivalente. Pero nadie niega que sea espléndidamente provocadora y en sentido general inteligente. Tampoco la belleza de sus labios ajamonados, voluptuosos y hedonísticos Cazadores de pasiones y acciones eróticas Aquira de las Máquinas tenia sólo 19 años, distraída, piel caobina, ojos pequeños y claros las orejas pegadas a los occipitales con prensiles fantasiosos, olvidaba decir que sus labios dejaban lo normal y buscaban uno el sur y otro el norte.-- Cuando Rojito los besa cree estar comiendo bombón de fresa. –decía vanagloriándose.
. Del carácter suyo le diré que es explosivo y si me hubiese tocado evaluarla para ser secretaria de un funcionario político, la hubiese mandado a fabricar andullos en la fábrica de cigarros o a envolver Queso GEO. No calificaba para la secretaria de un político populista como era Chilimó Medina Francisco. Escuchó que jóvenes que se quedaron a medio camino en los estudios, son dueños hoy, de Agencias económicas, renombradas—se enquistan como impávidas garrapatas, como abejorros del gandul social o cual oruga del tejido político del Estado creen que es cuero de toro en la intemperie para secarse expuesto para que las tránsfugas avionetas aterricen en la pista incolora del liberalismo cargado de zánganos y de pólenes encintando a los nenúfares a los corchos a los trepadores y cazadores de fortunas de escaños comedores de los mangos bajitos del Estado. Son microbios creados por las clases dominantes, individuos del imperio creado para aplastar a los fundadores sacrificados ortodoxos enfrentadores de la casta trepadora, chupadora forjadora de tirano y de tiranía, de esbirros y de caudillos. Cuando Aquira de las Máquinas miraba por la persiana mientras atendía tareas del pequeño colmado veía pasar en filas apiñadas a los militantes del Partido Revolucionario Dominicano-experimentaba comezón en las plantas del pie izquierdo recibía la fuerza de la energía de esa organización que se movía hacia las alturas del poder por eso fue que su madre llegó a creer que su hija hablaba sola cuando le escuchó cuando dijo—esa es la mantequilla para mi pan, esas son-- repetía la suelas que les faltan a mi chanchos.
Kanilda Crisal Pérez observaba desde el primer día que recomendara a Aquira de las Máquinas como secretaria ejecutiva de su marido que teñía adecuadamente a su entorno y eso le molestaba. Pero para que conozca algunos atributos suyos le diré que Kanilda Crisal, puso su mirada suave y humana en ella porque la creyó como su hija, pero el azul de esas miradas se tornan glauco llegando a una melancolía lastimera. Fue una exhibición de parte suya, por lealtad y actitud de buena vecindad, a sabiendas que no era una militante partidaria. Pudo que lo hiciera por estima y amistad más que por otras inexplicables relaciones. A pesar de emanar de esta un aire aristócrata, Kanilda Crisal, no puede esconder las muestras mandingas heredadas por líneas maternales, muy antillanas y muy espontáneas, sin caer en camaleonearse como la recomendada. Hay momento que sus amigas piensan que ella mira sobre los hombros de las demás, con todo y tener una estatura moderada, se agiganta en las personas de las que la antagonizan. Muchas veces al mostrarnos el cabello mandingüelo contrastando con las narices pirineas con disipadores muy pequeños. Hagamos una curva y vamos al párrafo donde referíamos las atribuciones de Kanilda y decimos que sus labios son delgados y en términos físicos débiles pero delicados y aristocráticos, permiten que el lápiz los acaricien y los exciten, estando purpurados es cuando agigantan la pequeña estatura de la Mecenas de Alicia de los azahares Y en a mis gustos es la envidia de actoras y espectadoras del entorno Puerto platéense Era madre de Leury Davidurgo, para ella un botón de clavel marrón como las raíces ebaniles como una caoba en flor, como una fruta de caoba, era su jardín el único con una flor tropical, mas, Imbertolino enclavado encima de cordillera de sus entrañas románticas amorosas de madre casada en los…
aleros de una jovial Adolescencia. Leury tenia 14 años y hacia el tercer teórico en el Liceo Enrique Enmanuel Asthon en Bajabonico de los Cañafístoles no era súper, pero lo que le tocaba hacer lo hacia y lo hacia rápido y decían los maestros que casi perfecto. Todo esto para el agrado de Angel Francisco, su Padrastro como para su mamá. Angel Francisco, no era individuo de periplos ni bullanguería, era un viajero en el entorno donde creció donde hizo sus estudios primario y secundarios, pero volaba en los anhelos y en las alas de sus sueños. Era padre de Griselda y de la Flor de Lirio la cual mostraba un extraño lunar en unas de sus mejillas exaltando su juvenil encanto de un lago de tranquilas aguas románticas, haciendo un rostro descomunal. Angel Francisco es alto, moreno con bigotes negros grandes ojos y enormes orejas como la boca y los dientes que emanan humedad en todos casos.
Alicia de los azahares, ilusionada, deseó estar una noche invernal en curruca de calor, envuelta en los bejucales; del pecho moreno del Alcalde Municipal, sin embargo era Kanilda la que saboreaba los calores emanados de las calderas del cuerpo de Angel Francisco.
Era 1993, juntos llegaron al Cortijo de la señora Daniela Arias, madre del Profesor Arias Cruz a quien solicitó colaboración para su proyecto político, llegar a ser nominado candidato a la sindicatura del Municipio Imbert de los Cañafístoles. Cuando Arias Cruz se enteró de que el padre de Angel Francisco, era Gregorio Medina, pariente cercano del suyo, no esperó mucho espacio para darle la bienvenida a su casa sintió que seria bueno compartir experiencias políticas con el visitante miró a Kanilda y asimiló las vibracidad energéticas de sus emociones que salían con esplendida placidez –Pienso le dijo- que debo estudiar las propuestas, las que entiendo me las han hecho de buenas ganas y voluntades ,aunque no me guío por instinto, no veo aire sinuoso en los entornos ,sin embargo siento un toque de cuerdas positivas en sus manifestaciones. Es muy rápido para armar conjeturas desde aquí aseguro las probabilidades son abundantes para el inicio de una amistad que todos oblacionamos para que además de buenas sean duraderas.
Kanilda Pérez, sonrió les parecieron atinadas las palabras de profesor, mientras tanto su marido iba a la cocina donde la señora Daniela preparaba la cena de esa prima noche. Meses después el señor Pepe Cruz Henríquez, asistió a donde el profesor Arias Cruz, que también es pariente cercano de la familia por líneas de la madre Evaristo Cruz Medina padre del Profesor. Pepe Cruz se marchó cuando saludó a los miembros de la familia presentes. –Voy a una reunión en casa de mi padre, allí me esperan, había dicho al profesor. . Pepe desde muy joven milita en el Partido de las libertades populares de la república dominicana y de los contornos latinos, el Revolucionario Dominicano, reside en Los Llanos de Pérez, de méritos está colmada su vida social y política. Luchador incansable por los humildes de su Partido y de los centros populares no importa donde estén, es un individuo de alta calidad moral y nobles acciones públicas. Anda con el Hacho encendido para quemar las basuras y virutas Trujillismo y de Balaguerismo. Al entrar a la casa de su… padre Katalino Cruz encontró que sus hermanos Yuya y Andrés les esperaban para almorzar.
En la comunidad de Saballo a escasos kilómetros del casco urbano de Imbert de los Cañafístoles vivía el Ing. Milcíades Moral Lemon presidente del comité municipal del Partido Revolucionario Dominicano,.De contextura noble, color oscuro, alto y fuerte...De personalidad recia con formación cósmica y académica, sus primeros estudios los hizo en la escuela Ravelo y Chamberlaint de Altamira esta última, es Moral Lemon dueño de una marcada inteligencia mas que social, humanista y humanizante. Posee actitudes pedagógicas. Compartía la máxima dirección de la organización política con Angel Francisco De quien se aleja y pacta con el compañero Dr. Florentino Flores para aspirar a la pre-candidatura a diputados de la republica por la provincia Puerto Plata. La brisa del angosto valle del bajabonico, favorecieron al dr. Florentino Flores por tener una aceptación muy elevada en los municipios del occidente provincial. En las elecciones de 1994 habiendo sido el candidato del PRD para “la Sindicatura” del entorno urbano, fue derrotado por Norberto Batista y el Partido .Reformista. Danielo Ventura y el Prof. Vittor Arias Cruz. Con ese asesoramiento Angel Francisco peinaba le geografía municipal llevando un saludo del líder perredeista que se sentía aquejado de grandes y molestosos dolores y escuchaba.
El señor Francisco Angel, asesorado por Antonio García, ex diputado, por Margaret Disla, experta y militante dirigente del PRD. Y anti- Trujillista, por un grupo numeroso y muy laboriosos dirigentes donde estaban Deodoro Ferreira, esposo de la señora Disla, Papi Cruz Bonilla, Diego González, Heronildo Santos, ex Secretario general del partido en los atardeceres de la tiranía, y de albura política. Pepe Cruz Henríquez, compartió ese honor con Margaret y Demetrio Henríquez, padre de Francis Henríquez Disla. Entre otros permítome señalar los nombres de Ana Victoria Pichardo y las quejas de los dirigentes y militantes de la zona rural. La fama de este joven dirigente imbertolino llegaba hasta los sillones de los despachos de La “Internacional Socialista” pero especialmente al del doctor José Francisco Peña Gómez.
Muchos dirigentes envidiaban el calor humano que habitaba en su hogar, en su destartalada residencia de madera construida en las primeras décadas del siglo en las alas del cementerio municipal y en los aleros del río Bajabonico. Ruta a baraguana y al central Amistad. Su mujer, la señora Kanilda lustraba el piso y con todo parecer un mapa hidrográfico deseos daba de acostarse en el por la muestra de una sagrada higiene El profesor Arias visitaba la residencia de la señora Margaret, la conocía desde los tiempos del golpe de Estado del 25 de septiembre del 1963. Entre don Evaristo Cruz el padre del profesor Arias, y el esposo de doña Margaret Disla había un cordón familiar que los unía para algunos, inexplicable para muchos condiciones de elementos de fidelidad familiar. Así manejaban los padres del profesor esos asuntos.
La señora Madre del señor Heronildo Anibaldo Santos, con afectos doña Lala era muy gentil y considerada con Arias Cruz, por ser comadre de su generosa madre doña Daniela. Más, lo que deseamos narrar es que, en cada vivienda de esos perredeistas del sector Angel Francisco había aire terapéutico que magnetizaba quizá por la limpieza y falta de egoísmo que abunda en ese sector en cuanto habitan las aceras de la oposición. Lo puedo comparar con algunos obreros de los ingenios que en tiempo de zafra y molienda cambian el estilo de caminar intolerable por ser manifestación de altanería y vanaglorias mientras que en tiempo muerto el estilo llano fraterno y humilde llena la sicología del trabajador con mentalidad seudo proletaria. De esa manera nos mostramos los dirigentes del Partido Revolucionario Dominicano, con un porcentaje pequeño de excepción. Es por eso que los enemigos del partido dondequiera que se hallen han señalados que los Perredeistas son buenos en la oposición y gobernando son odiosos y muy malos. Probable que no, probable que sí. La casa de la señora Disla estuvo vigilada por largos tiempos, desde los albores de los planes para asesinar a las heroínas de Ojo de Agua. La presencia de los vehículos del SIM, en los entorno de la vivienda era frecuente. Hasta el propio Victor Alicinio Peña Rivera, hizo ronda en el Barrio Caliente. Para aquellos días los esbirros de la Tiranía gestaban la muerte de mujeres enemigas del régimen en las provincias Puerto Plata, Montecristi, Moca y Salcedo, entre dos más de región sur. Disla fue perseguida en Noviembre, en los previos a la matanza de las Mirabal Reyes. La salvó su gran corazón más los mecanismos de protección con que disponía… alguien se acercó y advirtió de los peligros que estaban en su favor. Era vista como enemiga de la tiranía por manifestar simpatía con los jóvenes del catorce de junio, hubo quien no faltó para asegurar que ella protegía a los sublevados en loma Limón después del Golpe de Estado. Margaret sufrió los dolores de ese aborto; ensayo democrático que el pueblo se había dado en las urnas el 20 de diciembre de 1962. La casa de Heronildo Anibaldo como la de ella era allanada por antojo de cualquier alcalde o policía rural. Uno y otro levantaban blasones a favor de los desvalidos, de los desventurados excluidos y excluidas. Heronildo Santos abandonó la ciudad y se internó en los cañaverales del Batey La Grúa, permaneciendo allí por varios días alimentándose con caña PEOJOTA Papilio Lendof Matasagas sufrió hambre más que los demás , por haber tenido que alojarse en un campo de caña de La COIMBATORA siendo una variedad de caña muy dulce mas, demasiado dura como los dientes de acero del molino; mientras que José Luna huyó para los potreros de los Heisembert, podía columbrar lo que sucedía en los entornos del Play y en el ingenio. Contemplaba las comparsas de las garzas en vuelo blanco encima de los cañaverales del central Amistad. Luna visualizaba los movimientos de la fiscalía y de la policía nacional.
Matasagas para 1961, participa en el derribo de las estatuas del Tirano .La policía del consejo de Estado lo buscaba para cobrarle el atrevimiento de haber embarrado la cara del Busto del Generalísimo en el Parque Municipal con mierdas de animales y humana. Matasagas Lendof combatió a los monstruos y paleros de Balá siendo un jovenzuelo aún. --Estamos a favor de todo lo que liberalice el sufrimiento el hambre del hombre y de la mujer, estamos y estaremos opuesto al negocio que hace ricos a pequeños grupos, y empobrece a millones de humildes trabajadoras y trabajadores. Había dicho,-Lendof Matasagas. Cuando cortaron su persecución regresaron a los hogares. Horas después fueron visitados uno por uno por el señor Carlos Maximiliano Reyes, que era el filántropo protector de los jóvenes de ideas transparentes y liberales a los soles del medio día. Reyes era el dueño de la única Curtiduría y Sombrerería del pueblo 83 kilómetros a la redonda, comerciante próspero de la región, dueño de tiendas en la calle Duarte del Municipio, hizo vida a favor de la limpieza física, moral y ética de la comunidad Fue en esa fábrica de sombreros donde el señor Ireno se midió media docenas sin comprar ningunos alegando que no les quedaban bien. Este empresario es ascendiente de emigrantes canarios establecidos en la parte norte en tiempos pos colonial es padre de varios profesionales considerado como uno de los Imbertolitanos favorecidos con los vientos de su inteligencia política.
Era febrero 27 de 1966 , tres años después de la toma del poder político por el Partido Revolucionario Dominicano y de el indiscutido líder Prof. Juan Bosch había más de dos motivos para celebrar ante las cordilleras nacionales, sea por el verdor de los cerros y de las hermosas colinas, el sostén de nuestro clima fresco, de nuestros aire cargado de pureza o fuera por la gesta de independencia en 1844, o por la batalla de sentimientos libradas el 20 de diciembre y la toma y jura de ese 27 de febrero. En 1963. En esa el pueblo cerró la puerta del palenque del oprobio retardatario conservador y del licor corruptor que embriagaba las esencias de la sociedad pulcra y sana, para ello necesitaron un cuerpo de esbirros, alguaciles de la sombra y jueces de la muerte. Apolinar Dobleese era uno de esos agentes, militares marionetas de cartones, eran bocinas pagadas para injuriar, escupían y humillaban con palabras y hechos al pueblo opositor. Dobleese lo sabía estaba libre esa mañana, tomaba en la barra del Barrio Cliente, en la cercanía a la residencia de doña Margaret Disla. La multitud llegó y estaba alrededor de la galería, el bebía y no mostraba interés por los movimientos de las gentes, El mesero envió por toronjas al mercado, que bien cerca quedaba, para el militar que con aire de beodo las requerías. Se sirvió en otro vaso pidió un poco de tabasco y lo mezclo con el ron Brugal , lo movió se lo llevó a los labios entonces dijo—Juh, al tiempo que se limpiaba los labios, con el dorso de la mano derecha, esto si está bueno, el vendedor creyó- que Dobleese se refería a la bulla que ahora hacían los militantes Perredeistas.. Pero era por la combinación que había hecho con la fruta y con el licor. Ahora es, ahora sí—decían los manifestantes, el pueblo unido jamás será vencido, ¡Peña timón de la revolución! ¡Peña timón de la revolución! ¡Peña timón de la revolución! Así se manifestaban los militantes del partido de Jacho prendío, frente a la casa de Deodoro Ferreira y de Margaret Disla Frías, Los tragos con la sustancia enjaulada en los vasos, y las voces de los manifestantes ponían a Dobleese de vuelta y tres cuarta , de vuelta y un tercio en término de negativas emociones. Las papilas gustativas hallaban amargos y de mal gusto los gritos llevándole al borde de la desesperación se pararon y miró por la ventana los grupos moviéndose. Cuando vio que las calles estaban repletas de jinetes en briosos caballos blancos se mordió los labios. Eran los Jinetes de Don Carlos Emiliano Reyes, todos, los 46, llevaban un Jacho apagado aún, pero que en el parque encenderían cuando la noche se haya tragado la luz del día. Volvió a la mesa secándose la frente con pañuelo colorado y inopinadamente manifestó – con suma tranquilidad Póngame señor si no es molestia para usted, un pote Carta Dorada, con toronja la más verde señor,¡ah dijo el soldado, cámbieme el mantel y que sea colorado si es que para usted, señor, no le produce contradicción alguna --Contradicción y porque podré tener yo contradicción –dijo el mesero sin reírse. Tenemos que estar más unidos que nunca el respeto a los derechos humanos que los imperialistas y sus representantes en el país nos han quitados; unidos para la defensa de esos derechos, al pie del cañón en los lugares que nos toque levantares en los cañaverales el cabo del machete y del martillo, de la coa y de la pala los tendremos entre los puños levantados como los heroicos Cimarrones, y Mambises. Dobleese respiró profundamente y volvió el sosiego al esqueleto militar. El militar oprobioso al ver que los manifestantes y seguidores del Doctor Peña Gómez, seguían los caballos hacia el parque por la calle Mella, miraba que Carlos Emiliano Reyes, dirigí a la cabalgata con la elegancia de un jinete Caballero hijodalgo… de la antigua Cruzadas cristianas sonrió cuando pudo darse cuenta que el corcel de Carlos Emiliano era el más alto, el más noble y el que mejor se movía. Pero la pequeña sonrisa indiferente de “sabueso” del ejercito tomó personalidad y creció de placer, al comprobar que el uniformado que entraba y se acercaba a su mesa no era otro que Porfirilio Bonilla Santos, policía rural de las orden de los Legionarios de Petán que en muchos puntos del país había surrapas de esa paila de la tiranía.
Apolinar Dobleese fue a su encuentro y lo llevó a la mesa donde el mesero ponía un nuevo vaso y la limpiaba --¿Desde cuándo está por aquí Polín? -- Desde anoche ---
ando poi estos lugares –dijo, sonriendo y de seivicio toi en Maimón no me sentía bien con esos indeseables perredeistas, comunistas enemigos dei gobieino! Ya en el parque los seguidores del partido Blanco, levantaban los Jachos encendidos, el entorno y el perímetro del Ayuntamiento, con las luces de los jinetes se convertía en medio tarde. En la glorieta Margaret decía-- no toleraremos de las actuales autoridades, imperialistas anárquicas, que impidan compañeros y compañeras, el uso del espacio que como hijo de este universo nos hemos ganados como hijos e hijas de esta sociedad golpeada maltratada por los sostenedores de la tiranía habiendo caído ya la cabeza y la corona, del Tirano de la tiranía,-- ¡Peña Timón de la revolución! ¡Peña timón de la revolución! Aplaudían y repetían Peña… La señora Disla proseguía diciendo—Seremos el partido ganador como lo fue en 1962, Mantendremos las libertades, económicas y las sociales , las masas volvieron a aplaudir , facilitaremos la creación de huertos socialistas para cosechar asociaciones cooperativas agrícolas, activaremos las iniciativas en las juntas femeninas las amas de casas, las bibliotecas comunitarias, desarrollaremos las actividades humanísticas las obras teatrales en los clubes juveniles que abriremos en este como en otros municipios centros para compartir con los que entren a la cuarta edad y de esa forma armonizaremos con su amplia soledad. La oscuridad se comenzaba a sentir con la presencia de un pequeño remolino que de los 46 jachos apagó 30 de los sostenidos por los jinetes de Carlos Emiliano Reyes Dobleese y Porfirio dejaron la barra y se instalaron en la Tango en el ingenio Amistad. Eran las 11 p m todavía de aquel 27 de febrero, en las mentes de los dos militares hacían tumbas las palabras de los discursos de la señora Disla mientras en el país gobernaba el doctor Héctor García Godoy.
El hedor a cachazas emocionó a Dobleese regurgitó todo el licor con toronjas que había ingerido en la tarde de ese día llenándose los zapatos y la guerrera, como si su vientre libraba una batalla entre miembros de los universos de bien y del mal.. La ausencia de alto voltaje estaba bajo la bruma amarilla casi imposibilitando a que Porfirio limpiara los ajuares del compañero vomitado. En una de las calles que dan al Parque San Antonio pero en La Victoria, en el Distrito Nacional, del antiguo edificio del viejo Partido Dominicano, salía un enmascarado que queriendo apagar el Jacho a un militante perredeista, nieto del restaurador Marcos Evangelista Adón quemó la camisa de otros ,la multitud se enfureció y consideró la actitud como una agresión de los cívicos, y como un mar de fuego pasaban las haces de los jachos por encima del agresor quedando asado como un pan y por la intervención del sacerdote de la iglesia. San Antonio, los manifestantes abandonaron la actitud, luego de enterase El cuerpo de Castillito era un pequeño pan negro quemado por la intolerancia de las partes, quemado por la cizañas por la malquerencias que nacen en el cerebro de las masas cuando la fuerza del fanatismo rompe los hímenes de la razón cegándose para no ver la verdad, empujado por la ignorancia, poderosa y mala. Ese día en cientos de comunidades en todo el territorio nacional, a la misma hora los organismos de partido del Jacho se movilizaban. Lo mismo que en Bajabonico de los Cañafístoles, deseó antes de regurgitar el teniente Dobleese, y en Hato Mayor el teniente Doblepe, intentó regar gasolina a la caravana del Jacho encendido.
Dobleese despertó asustado oía la perorata de Margaret, como una ventana abrió sus ojos creyendo que una culebrita sabanera había cruzado la sucia habitación, entró al baño se dio cuenta que las piernas les dolían poco menos que la cabeza, tosió hizo pantallas con las manos y en las palmas aparecieron gotitas de sangres en medio de salivas amarillas miró sobre sus hombros y a el le pareció que la ofidio lo miraba como hurón en la pradera. El reptil levantaba la parte delantera de su cuerpo mucho más alto que la ventana de la casa donde el se hallaba, como el susto continuó… salió en carrera de canguro sólo en pantaloncillos, al estar sudoroso comprendió que dormía con lengua Suave, en el piso de la casa. Julianillo Leoncio Vásquez, pariente del expresidente Vásquez, fue uno de los 30 jóvenes que dejaron el municipio, buscando venturas y prosperidad, buscando otros soles de seguridad y de respeto, los hijos de Juana y Sebastian subieron, subieron, y desde las nubes aterrizaban en los charcos del Misisipí Danny Henríquez, Santo Ventura Brito, VICTOR ARIAS, Frank Sosa, acuestizaban en el Ozama tierra de MANDINGAS de los Negros Mina y Mezo Mónica algo después del doloroso parto del 28 de abril del 1965.
La seguridad con que cada uno interpretaba la realidad no era la suya simple ilusión, mimetismo, finura camaleónica aunque en la Persona de Danny Narciso Henríquez la disipación de la realidad, la ocultación de su realidad dio paso a un sol luminoso, con su luz estratégica sin calor, que no sean para quemar las viejas y amargas lagunas de la pobreza. Ventura Brito afortunado como brillante en su matemáticas 4 años más tarde era superior a los Dobleese y Doblepe, como académico iba sobre las aceras, de la calle Duarte y de la Mella, con orgullo sin ocultar la sonrisa, tampoco la pena, pero recordando las risas que de gentiles bocas cuanto lo veían llegar al aula con la camisa sudorosa. Volvamos donde Emiliano cariñosamente Liano, asistía a las aulas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo en tiempo difíciles, los pájaros repetían sus vuelos, los pobres seguían más pobres y los ricos muchos más ricos. Las enfermedades continuaban enfermando al pueblo trabajador seguían bostezando los hijos de Machepa el mundo decía que era época de reelección. Los hijos de campesinos sin tierra de los obreros, viudas y del proletariado cortaban los móldenes podían ir a las aulas universitarias en mangas de humildes camisas y sencillos zapatos. Los campus Universitarios de la vieja Santo Tomás de Aquino ahora eran territorios libres en un territorio esclavo. Julianillo en el dormitorio se ponía en comunión con los contornos territoriales de su patria chica, abría ventanas para monologar, en vez alta y muchas veces que ni el mismo se escuchaba.
--Estoy en el borde de mi catre, en la cuna de la desesperación deseando estar en la rama de la mata de mango “gustoabajo,” tan frondosa como la cabellera de la mujer del paisano Joaquín. –estoy conforme pero así triste como me pongo a rumiar en los anillos de los recuerdos.
Apolinar seguía tosiendo estuvo bañándose en el rió con ligeros pasos por encima de las candentes piedras hacía enorme calor, se quitó todo y metió la cabeza en la chorrera de fresca caída se creyó en la mata de mango se quedó dormido encima de las raíces. Vásquez, avanzaba en su circunloquio solitario pero para su orgullo y consumo reservado mientras Sensemaya, la madre de Dobleese señalaba que en mil novecientos treinta y nueve, había ocurrido su sexto parto, el 4 de agosto nació su hijo Apolinar a quien llaman Polincito –ese muchachito Compay José, pesaba once libras, “oncicuaita”, ¡Jesús! Muchachito que pesaba ese! Bajabonico de las Aromas y de los Anonales, seguía como un adolescente en la sombra de los peñascos y breñales del más viejo río americano, antillano y caribeño. Por el sur separa sus piernas en las viejas cañadas de los arroyos Mamey y don Martín Diego rumbo a las lomas de Quebradas Honda y al este los cerros de Palmar Grande. Los parajes del continente de los aromales de las garzas de llanos de Pérez y sus contornos poseen las mismas características que los demás. Con el central azucarero en el medio, los hombres y mujeres los jornaleros, empleados guardaban las miserias que recogían en una sociedad de conciencia esclavista con deseo de volar como mariposa sobre el humo de la chimenea de las naciones capitalistas princesas aliadas a los jardines del norte donde fabricaban los hechizos que utilizaban para señalar como a señuelos a los que algún día podrían ser sus víctimas. Esos hombres recogedores de arganrios de miserias y cerones de dolencias en los baches y muladares de una época tiránica bajaban y subían o creían subir creían bajar perdían la orientación. Creció así Dobleese entre esa situación entre esos bejucales de escasez poniendo las manos donde no debía poner, metiendo el hocico en sopa del vecino afectando el crecimiento en todas las direcciones. No aprendió con claridad el alfabeto hacía juegos sangrientos a los maestros y a los compañeros y compañeras alejados de bien, era campeón en ausencias. De adulto recordaba brumas vacuas pocas veces llegaban vagas hilachas de piernas sin medias y bocas desdentadas y pies sin zapatillas. A su borrosa pantalla aparecían imágenes monstruosas defectuosas las que más lo perseguían era unas manos, que se les parecían las suyas, estrangulaban el cuello alargado de la maestra Josefina Pascual. El dueño de la Escuela la había mandado techar de hojas de zinc y cambiar el piso de tierra por concreto, en los alrededores había instalado una trilladora y una despulpadora en las proximidades, no podía recordar el funcionamiento de las máquinas porque nunca las vio accionar cuando los demás niños participaban de esas actividades pedagógicas el—Dobleese-- emprendía el vuelo en fugas No estuvo en contacto con esa realidad; esas limitaciones muchas creadas y oras propias de la época de las grandes dictaduras que abrazaban los mundos caribeños como eran: La Bastitiana, la Gomecista, la trujillista y la somocista que influenciaban en la vida económica de los hogares de los más bajos sectores de una sociedad clasista. Sin embargo el señor F. Henríquez era sino el más poderoso del ámbito rural de la Provincia era el más de los municipios. Y Dobleese era sobrino nieto de la madre del terrateniente, pero que por envidia o sentimientos no entendidos lo rechazaba, y según este por eso nunca quiso pernotar ni en los secadero de su primo
Virginidad Silvano era carretero en el central amistad, y en tiempo muerto recogía leña para los vapores del ingenio. Rara vez se vio con una azada en los desyerbos de las plantillas de caña o en los retoños de Saballo en parcela del central o de los colonos. Mucho menos en los Cortijos de su primo hermano, el señor Henríquez,
Sensemaya Silverio, envió una vez a Dobleese a buscar carne para hacer una gran cena el día que Virginidad cumplía 63 años, el muchacho salió corriendo pero no volvió hasta las cuatro y media de la tarde cuando el hambre lo atosigaba. Como para la una de esa tarde no llegaba el muchacho Sensemaya mató el gallo semental del corral y pudo cumplir con su marido. Le preparó el Supión acostumbrado a su marido. Hemos dicho que es gemelo con el sancocho o por lo menos son parientes. Entre las diferencia citamos el empleo de arroz en este manjar y en preparamiento de sancocho no. Como Dobleese era un fanático jugador ella pensó que había perdido el dinero del mandado, entonces tuvo temor por regresar. Cuando el hijo llegó sobre la tarde, a unas preguntas El, respondió—Usted sabe mamá, que cuando en el camino veo jugando cartas o recoqueos, con dinero una voz entra a mi cabeza, y me dice ven, ven Polín, ven a jugar, olvido el mandado rara veces gano, para perjuicio de todos, - ella no decía nada, se levantó entró los largos brazos a la alcayata y le trajo una chirola repleta de comida, que degustó sin resquemores, ni culpa. Dobleese interpretó que lo había hecho bien, y que la madre lo premiaba con la palangana timbona de supia, que le entregaba.
Al otro día en la cercanía de la escuela escuchó que le dijeron— ¿Polín cómo te fue con Doña Sensé?, -- me fue bien poique la vieja, me guaidó más comía, quitó lo día mientras conversaba miraba la blusa de taguito Patica de Chivo, con ojos de velón lujurioso, sostenía los pantalones, creyó que se le iban a caer. Sensé era alta, delgada, cabello largo cara ovalada, ojos papujazos labios flácidos con características para la chismología, la mitofilia, era trabajadora hasta el cansancio vendía hojaldres en horas vesperales hechas en la madrugadas. En Bajabonico en cualquiera de sus parajes generalmente, había una bulla, una fiesta, un pasa ratos, pasa tiempos, ganando perdiendo semillas de cajuil, recoqueos, la rayita, la tablita, juegos de “velludas” abejones, trompos corridas de sacos, de perros de vagos, velorios, velas ofrecidas al barón del cementerio. Sensemaya se dispuso conseguir dinero al compás de los movimientos del ecúmeno donde se desenvolvía con su familia .Señalan que era tartamuda por los sueños perdidos esperando a Dobleese y a Celso cuando se quedaban jugando en los canes de los contornos, pero lo que en verdad le mortificaba era que Dobleese con sólo 11 años, sabía ya perder los dineros de los mandados. En la recogida de cacao de café y de maní llegaba con funda llena que escondía en lugares que nadie sabía, un día su hermana le preguntó --¿Qué eso Polín?-- Mierda de gata! Respondió sin preocuparse. A lo que Herminia, le dijo – sigue, que por ahí se llega al hospital y al cementerio o la cárcel. Celso Dobleese era miembro del ejercito Nacional, estaba de paseo en Bajabonico donde había nacido y crecido y lo hallaba bueno para sacar un dinerito valiéndose de algún truco y artimañas, y miles de acciones lejos de la buena costumbre y los usos de la moralidad, y la ética cuando saludó a la madre le dijo-- Búsqueme los pesos que tenga que tengo problemas con mis superiores - ¿Qué clases de problemas hijos? ¿Cómo le diré? Estaba pegado en la pared, rascándose la oreja izquierda mientras se preparaba para decir – usted sabe vieja me jallaron en la cama abrazando la cocinera, y me dijeron que si no le llevaba 55 pesos me iba a repoitai como mañoso! . Cuando su padre que acaba de llegar del central se sentó y lo escuchó decir a Polín su hermano -- si me da tres pesos todos los meses cuando tengas 19 años te haré saigento Te engancharé a la marina de Guerra, --Claro, Claro, contestó Dobleese estando de espalda a Celso, vestido de blanco con un gorrito como una higuera redondito.. Blanco como los zapatos negros de charois – Claro, claro! ¡Quiáis vas entrai o no vas entrai? ¿Dónde tiene los cuaitos? ¡Eh, eh? Completo pero yo quiero para guaidaila…– Yo no te entiendo, estas loco! ¡Claro. Claro! Toma esos dos pesos nomás, si no veo señales no hai mas ya sabe! Cuando vuelva con señai te doi lo jotros
Agora no puedo daite mas, pero me gusta la guaidia, la guaidia de linia, no me gusta ei blanco, prefiero ei colorao. En Altamira se juntó con su superior que le esperaba en el entorno de la piedra, sendero hacia la Lomota,--oiga jefe la familia buena si es faci de engañai sabe usted cuando le arranque 33 pesos le dije que tenía problemas con usted - poi eso jefe. Ahí tienes la paite suya, Tuve, ya le explique, que mentil. En el secadero estaba Virginidad, que terminaba de llegar del ingenio Amistad, hablando con su hija de las afrentas de su hijo Celso de lo mentiroso que se había puesto, --dice más mentiras que un Cura, misa. Tuve que entregaile los ahorritos que pa emeigencia de salud teniamos. A pesai de sei mentiroso, estoisionadoi y embustero lo quiero – Ya está bien papá –agregaba Herminia su hija mayor que le entregaba una toalla para secarle el sudor que le mojaba el cuello y la espalda --no siga usted sacrificándose tanto por individuos sinvergüenzas recuerde lo que mandó a Julio La Paz a vender el cacao ajeno…eso no tiene limite, papá, dejándonos deshonrados y luego lo que en la chocolatera con los animales de los camiones, también allí nos deshonró. Hacía los cuentos como méritos y glorias para celebrar. - Papá, continuaba Herminia, venga vamos para la galería donde Mamá fuma alejada de las preocupaciones y golpes bajos de los hijos. Esos son papá los que se prestan para dar golpes de Estado y hacer allanamiento fuera de la ley, son esos los que empeñan el alma al diablo y venden su corazón al imperialismo por una visa de paseo.. Y para no convertirme también en espinas de su molestia le diré finalmente que son ese tipo de personero los arrodillado ante las aureola de la descomposición familiar en el tejido social. Dobleese no tuvo cuando civil novia ni amigas con quien compartir las emociones eróticas que todo joven normal. Ya en el ejército buscó los caminos de la lujuria. Estando en el Bolsillo Rojo, uno de los Lugares de mala muerte de Provincia Valverde, saboreó la carne de una adolescente y creyó que el placer recibido era superior al experimentado en los triunfos obtenidos en los juegos de azar. A pesar de esas valoraciones continuó siendo tabernero, no siendo un truhán, caminaba sobre esos pasos, no fumaba pero pagaba por sentir el placer que sentía viendo a otro sentirlo, En Bajabonico de los Morones vivía Rufo, de apodo Matacueros, este joven padecía de Paramnesia y de desdoblamiento de la personalidad y deforme conductual, experimentaba recios cambios en sus emociones hedonísticas con frecuencias y facilidad.
Tocaba acordeón fingiendo los tonos usando peines de plástico y de madera acompañados de papel de estraza Rufo Minaya, daba ritmos pentagrama tico y guitarriles empleando las cuerdas bucales y guturales, empleaba los cuellos largos de botellas de vidrios de cerveza o de vino tinto. Y papel para regalos. Para muchos esa actitud simplona, para El era enorme y valiosa. Porque de esa manera desarrollaba sus estímulos e instintos y su sicología.
Matacueros era Cuco o Susto para los muchachos y muchachas del vecindario y contornos donde el se movía. Estos les vociabann Matacueros, richichí, la burra, la perra. Estando de buen humor era irónico y no le ponía caso y al contrario, respondía-- déjenlo para otro día, Rufo reía y si era en el río zabullía dejando el trasero fuera del, otras subía las piernas cual montador de bicicletas cuando se enojaba enviaba retahílas de piedras que recogía en segundo como una gallina recogiendo granos de maíz. Pero los Chicuelos, volvían a cantar Richichí, la perra, la burra, ¡Ovejo!, avispero, matacueros, richichí,.. En las velaciones de San Roque, llegó con nueve calabazos de agua del arroyo Los Morones, cuando guardó aparejos y esterillas, lo pusieron a tostar 20 libras de café,
y al terminar le sirvieron tres libras de batata caco de paloma acompañadas una botella de un brevaje hecho con maní, cacao, y leche. Minutos después se quedó dormido –Claro que tenía que desmayarse, con un desayuno tan fuerte y el un rebajío mal comido desnutrido. Cuando Justiniano La Comadre habló de esa manera en profesor Minaya dijo—La batata es el víveres mas completo de nuestra cocina nacional. Cuando despertó era hora de comer y comió, pero no con gula ni avaricia, en la noche se acurrucó detrás de las sábanas para ir columbrando la llegada de las muchachas. Quinceañeras o de más edad que iban a sentarse a orilla del altar. Vestía de blanco con filos delante y detrás camisa abotonada hasta el cuello escondía la cara debajo del altar, en ocasiones, excitado summa cum laude, sufría viendo que nada mas EL no estaba emparejado, pero al ver llegar a Minga tía de Patica de Chivo, se disparó como un circuito electrónico digital. Parecía una hoja de emoción, una tarjeta satelital, había en apariencia despertado en otra dimensión porque gritó sobre decibeles normales –¡Mamacita! Mamazuana, mamazota! Se dio en el pecho como un mono enamorado, repitió, richichí, richichí, ven para acá pa que reciba tu democracia y tu guineo, acaba de cantai poi ti y seguiré cantando –dijo rascándose las narices. Se empinó y cantó otra vez Richichí los del patio entraban a ver el teatro que había montado en escena Rufo Minaya, y los aplaudían complacidos. Días después tuvo que ir a la recogida de café al Cortijo Josefino Sención en el paraje Jengibre, en Nava, el Mamey de Marmolejos, Contó uno de los que con EL anduvo que fue ultrajado por un grupo de malandrines proxenetas pornográficos que lo vendieron como mancebo que nunca había obtenido un placer erótico pero que además le robaron. Meses después lo veíamos como que no le había sucedido nada pero esa tarde había ido al juego de pelota para saludar a su compadre Marcelo a quien como a EL, llamaban loco -- ¿Cómo está compadre Marcelo, preguntó, levantándose una cachucha de fuerte azul que había sido lo único que le dejaron los Malandrines del Cortijo del Mamey..—Mejoriuted -- respondía Marcelo Calabazas, y retiraba de su cabeza de cabellos ralos, el sombrero panza de mula del 1809. En el atardecer de su vida sin saber que muchas cosas buenas y bellas de su entorno eran suya de hecho y de derecho por pertenecer a la galaxia donde unos pocos almacenan y consumen propiedades son dueño de las aguas y siempre han sido del aire de las mejores tierras del sol del aire y de las lluvia… aun con los rayos de la tercera edad muere Rufo en acción muy extraña unos aseguran que fue después de haber apostado beberse 4 galones de agua de una sentada, anuncian otros que fue cierto que se tomó tres botellas de agua sucias, pero todo el mundo sabe que a Rufo lo empujaron de un tractor y después le pasaron el vehículo por encima como a una vulgar rana. ¿Dónde está la verdad? Dobleese levantaba el ataud llevándolo hasta el túmbalo donde harían las horas fúnebre del que fuera su amigo. Dicen que era falsa esa amistad pero eran simplemente primos hermanos. La muerte de Matacueros era hasta entonces un misterio, porque se atrevieron a decir que lo habían matado con las esteras de un tractor, que lo empujaron para quitarle 21 pesos que se había ganado limpiando el infiadero del Ingenio Amistad. El mismo día del sepelio del difunto Rufo Minaya, Valentino Sabelotodo de apodo Chepilino, de un brinco se alejó de la cama donde tenía varias semanas en convalecencia , cuando se percató que era a su ahijado el hijo de Alejandrina Minaya, el que iban a enterrar a esa hora no acostumbrada.. Todavía llevaba el la cabeza 9 hojas de higuereta de la morada, las que tiró al suelo del dormitorio, ya no tenía por qué llevarla, la fiebre y los dolores de cabezas se fueron con el paso del sepelio de su ahijado.
Sabelotodo también había bebido un brevaje de rosa de Perú y de flor de Campanas …no se explicaba por qué a el, a Valentino Sabelotodo, la tisana no le causó ningún efecto y el conocía que los resultados de esas plantas eran para matar un niño y dormir tres tiburones y a tres ballenas por más de 36 horas, aunque se sentía en la nubes, llamó a su mujer y le manifestó--¡Caramba Tinita,¡caramba Tinita! lo que usted me sirvió como tisana fue pa mataime, pero estoi bien, me sané, sanaititico. ¡Estoi curao, como un sementai, ¡no es poi na ni na! Ese rimedio era para matai a un baicino a un cabalio. ¡Ya usted va veilo! Doña Salustriana no dijo nada y le sirvió el desayuno Luego de tirar en cruz dos jarros llenos de agua al difunto cuando atinó a pasar en dirección de la puerta de su casa…Salió tan contento que no se quitaba la idea de ir a la capital y lo iba diciendo por el camino. Llegó al central y conversó con Alcántara el jefe de campo que le entregó un ajustico para que consiguiera el dinero de ir a ver a su hijo que estaba preso por haber matado una vecina que era su concubina. -- estoi muy contento lo jaré con Cantalí. Sabelotodo llamaba Cantalí un carretero de nombre Cantalicio o tres C como le decían los colegas.
Para los meses del 1954, comenzó los viajes a las cabeceras de provincia, lo hacía complacido, de que según su abuelo, era descendiente de Toussaint y de Henri Petión, Pero esa clara contradicción lo hacía con entusiasmo y mucha gallardía, Se paseaba por las glorietas de los parques simulando ser un Marques.… el Marqués de Bajabonico de Los Morones. Llevando en el hombro izquierdo su machete marca Collins, en bandolera pensando que era el sable de acero, del Emperador Petión, considerado por El, el Luperón de los Haitianos en esos menesteres, Sabelotodo era un Anarquista. Por fuera y por dentro seco y sacudido era socialista... tenía dominio del contenido de las realidades, en que vivían los ajusteros de los cañaverales. En la fiesta de San Antonio, hubo quien dijera que saliera para los grupos juveniles, que era su deleite, en vez de oír misa. Llegó donde se hallaba Dobleese, y su hijo Raymundo. La alegría que ese día en El habitaba, era incontrolable ya que se sentía bien porque las tisanas que había bebido no le hizo ningún efecto. Esa alegría lo hizo manifestar-- cuando estuve en la Capitai, me quedé en la calle en la San Martín con la Barahona, al ver un letrero que vendían comida prendí el Cachimbito plástico, entré y de inmediato la vellonera comenzó a dicí: ahí llegó Chepino, con su machete en bandolera, comencé a bailaile y tuei vivo se levantó de las mesa para veime bailai
un trompo palomita y mi influencia era tan poderosa que tuei vivo bailó también ei merengue la tinajita. Eran trompos currucutacos, io, lo bailaba como palomita. Era una plumita sentaita y en los ojos de los que rodeaban se le notaba ei deseo de pareceise a mi manera gallaida de dai ei trapie al compás dei tamboi. Ei aparato jamás dejó de cantai, otro dijo quien usted, mira ahí bailando es ei jijo de Tata y Valentín, que visita la capitai. Ese era José Valentino mostrando su recia contextura física y Quijotesca.
Con el machete en el hombro izquierdo con una vaina de cuero de culebra, y para emparejar una lima de acero pero con cavo de tusa de maíz, se dirigió al penal de la Victoria para ver a su hijo Felo, que cumplía condena por homicidio
Ya en el salón de visita el prisionero salió para abrazarse con su padre , pero fue rechazado por Sabelotodo; como a un desconocido, al considerar que su hijo estaba sucio de sangre de inocente, por ser Valentino un señor de seis pies seis pulgadas, sobresalía en el salón destinado para los domingos Felo se aisló para el alero izquierdo del penal, al sentirse rechazado por su padre que le dijo: --Quiero que sepas jijo, que mientras no limpie la mancha que es nuestra, tu vergüenza estaré sin darte mis bendiciones, pero desde lejos enviaré ruegos y loa para que tus caigas no sean tan pesadas. Con el espanto de un caballo dando la espalda al viejo que le dijo en tonos angustiantes pero paternal, ¡Caramba…! ¡Caramba Felo! No cogiste los consejos que con amor te dábamos. Las palabras de Chepilo, salían lastimosas, haladas llenas de lamentos y suplicas congojiles, con lloriscos infantiles, desde lo más profundo de un corazón herido viendo ahogar a uno de sus retoños. Lo creía marchitar en el fango y fuego de una prisión llena de inmundicias. Mia nomás mía nomás se ja conveitío en una cucaracha voladora, pero en un gallinero. Está cojío poi bruuto, poi sei bruto está cojío Míalo tuo sucio poi bruto. Io te lo dije, pero ei bruto no aceita consejo agora ta cojío poi brutalidad. El corazón que quería abrazar al hijo no pudo superar a la razón que era poderosa, La voluntad acompañó la razón. Salió despacito diciendo:--cojío poi bruto Lo decía poniendo tres vocales, en algunas palabras, enfatizando el sentimiento que acogotaba sus controles, que sujetaba como un adolescente. Caminaba sin mirar hacia atrás pero diciendo cojiiío poi bruuuto! Dejaba que sus lágrimas lavaran su dolor bañaban la falda de la camisa deteniéndose en la cintura al borde de la correa como si fuera de un precipicio. Marcelo Mandingas por raíces...oriundo de las calabazas en la cordillera septentrional, comunidad vecina del Limón, de Santiago y de Navarrete.. Llegó a Bajabonico llevando una santularia barba, en 1963, precisamente el 22 de diciembre, huyendo de las tropas del ejército que perseguían a los guerrilleros del 14 de junio que dirigía Manuel Aurelio Taváres Justo, en varios frentes en el territorio nacional. Marcelo desconocía que esos jóvenes era revolucionarios luchadores sociales que reclamaban respeto por la constitucionalidad conculcada en último 25 de septiembre desconocía también que el consejo de Estado había ordenado el fusilamiento de todos los que se rindieran fuera en combates en las lomas o caminos de o hacia esta.
Mal vestido, barbudo moreno, fuerte descalzo llevando en el brazo izquierdo un reloj dañado y en la boca de labios gruesos cenizos quizá por la escasa humedad que proporciona la tardanza en el comer; desdentada sosteniendo un cachimbo de barro haciendo un mapa de esperanza con el humo peregrino que de este salía. Con sus ojos rojos pero tranquilo miraba la paila de batata que mi mamá hervía esa tarde para comer con chicharrones en la víspera del día del niño Jesús .Me alegré cuando vi que infló los tambores de nariz cuadrada cuando le llevé tres batatas polinas con la cabeza hervida del lechón que asarían en la madrugada del 23. Cuando terminó de comer encendió una flor de cayuco y en una boquilla comenzó a fumar. Pasaron los días y ya Marcelo además de conocido era querido no molestaba porque hablaba muy poco nada más comía podía buscar un paquete de leña, un bidón de agua o limpiar café... o recoger antes que la llovizna cayera frutas de los secaderos. En fin era sino anormal, sino Idiota, o imbécil no era morón. En la fiesta de la Altagracia, el 21 de enero de 1964, estuvo en la velación donde la señora Severiana Silverio, era una bulla de poca monta, es decir no había grande rebotas y selectos potajes como en San Antonio y en San Pedro, donde Benito García, que sacrificaban animales que seleccionaban para la ocasión. De manera que esa tarde Marcelo comió auyama con zurrapa de carnicería pero en la noche después que comió del sancocho que le prepararon a los músicos se quedó inopinadamente dormido. Momento después despertó y se puso a fumar picadura que guardaba en el bolsillo grande de un chaleco de fuerte azul, pero cuando haló el tercer copazo cayo en medió de la enramada donde estaban los vendedores, al ver lo sucedido la gente creyendo que este infeliz se había muerto se alborotó y los que no les molestaban hacían algo para reanimarlo pero el seguía echando baba por la boca como un berraco excitado.. – Está vivo-- aclaró José, hijo de la dueña de la vela. Luego que vieron que estaba recuperando el color de la ceniza piel, los que le cambiaron el tabaco por Campanulácea y hojas de salvia regresaron a la fiesta sin dar indicios de justificación a su acto inhumano. Marcelo ni se dio cuenta por ser transparente como un manantial, inofensivo --es una burbuja de rocío -- había dicho de El -uno de sus tíos de la Calabaza. Generalmente se encaminaba para la tostadera de café, o freidera de chicharrones… Marcelo era mandadero de la sombra despreciaba el sol, porque lo hacía sudar y el sudor le provocaba mareos. En los velatorios desconconaba los carderos y lo hacia para el, nunca se lavaba las manos ni se cortaba las uñas de las manos ni las de los pies…Permanecía acodado en el horcón de la leña en espera que alguien le entregara una bandeja llena de alimentos crudos para limpiarlo o desgranar gandules maíz o guayar yuca amarga para quemar y sacar almidón para planchar los pantalones de los varones. Permanecía en la enramada de los bidones y de los aparejos, masticando su vieja angustia, y triste soledad, ahí esperaba el locrio de harina de maíz , ahí esperaba el jarro de suero de calotre… de la vaca que había parido en la madrugada la misma que había corneado a uno de los que cambiaron el tabaco que intoxicó a Marcelo. Pasaban las horas y el continuaba moviendo la puntas de los zapatos que dejaban salir las puntas de los dedos, al compás del canto de la cocaleca, que era su canción preferida, escupía débilmente, su corazón golpeaba, al saber que le entregarían una palangana conteniendo mucho de todo, pero un dia como un niño regó su lágrima bañó en el mantel de su pena y de su hambre ancestral como el que riega un jardín o una hortaliza cuando estando en un matrimonio por casualidad, servían platillo de carne horneada ,ensalada mixta rusa y valenciana y a el solo lo miraban y lo miraban con desprecio.
Por ser inofensivo cerró las puertas del sufrimiento y se marchó, sintiendo quizá por vez primera, un ser de verdad, dio muestra de ser un universo, a pesar de haber perdido el equilibrio emocional, y las acciones conductuales, por un instante fue galaxia con su unicidad que lo convocaba a observar su realidad pero ignoraba el valor de espacio i de tiempo, siempre para El eran las tres y media… y cuando les contestaba a los que le preguntaban la hora sin mirar su vieja alhaja decía, dejando un fino hilillo de saliva, con palabras quejosas—son las tres y media! Para la nochebuena del 1965, el río, no daba paso las aguas embravecidas llegaban a los ruedos de la casa de Flora García, ponía las marcas en los troncos del entorno de las casas. Ese día ahogó en pre regocijo de nochebuena, al señor Cándido Silverio, Ajeno de todo, esa tarde Marcelo llegó al Cortijo de José Pancha, sudaba mucho y tenía una presencia sepulcral. Lo que deseo contar de este es que comió tanto esa noche, que hubo que pasarle las herramientas contra la apoplejía, le pasaron por la panza, el filo de un hacha amolada, y después lo barrieron con una escoba de guano. Pero el día de reyes, mientras repartían la comida que no era otra cosa que un simple chambre de gandules, con mucho cilantro y muchas hojas de yuca y de mostaza cantaba la cocaleca, su preferida canción, cuando decía como cualquier Príncipe en cualquier corte cantara la poesía de Rubén Darío, “a la cocaleca a la cocaleca, vamos pa la playa que la marea ta seca” -- Así duraba 23 minutos cantando con voz cansada, a la cocale.., dame cocale vamos pala playa… como era inofensivo lo dejaban solo con las muchachas y con los animales fueran hembras o varones. Volvió a comer tanto y Luisa la esposa de José Pancha llamó a los hijos para que los santiguaran y les pasaran las herramientas, Luisa continuaba llamando a los muchachos que por estar asando semillas de cajuil no escuchaban la voz de la madre… y Pablito su segundo hijo mayor en línea de varones quien acudió cuando oyó que el declamaba ¡Ay, ay sí!, ¡que me las pasen que me las pasen!
Estaba tan desesperado por la hartura, que sus órganos de
razonamientos se activaron y pudieron detectar la cercanía de la parálisis de cualquier circuito respiratorio. Rompiendo el silencio que por muchos años había llevado a cuesta sin ser mudo. Apolinar Dobleese no se sacaba de la cabeza los nombres de Manuel Rodríguez, El Chivo, Pedro Santana, de Cirilo de los Santos, de apodo Guayubín, tampoco el de Jáquez Olivero. Era amigo de amigos de conductas confusas, oscuras, negras y ensangrentadas. Afecto de las actitudes infelices y negativas.
Amaba los negocios fuera de las reglas y de las normas porque era marrullero, troglodita, fullero, tabernero y manigero. Cuando las montañas nacionales se limpiaron o mejor dicho se iluminaron con las guerrillas del 59, cuando esas luces entraban a las cuevas de los cerros, de Maimón, de la costa de Estero Hondo, Dobleese se hallaba en los pinares de Constanza, todavía no pasaba de un KJ, asimilaba el comportamiento de los hombres que con orgullo miraba como un ejemplo de múltiples vidrios, que en buen archivo tenía frisados para sacarlos o llevarlos como un resguardo o amuleto protector. Cuando terminó de correr que hacía para coger calor para bañarse, pensó en Patica de Chivo, a quien le inaugurara las avenidas de sus virginidad, como esa muchacha era nieta del dolor y de la miseria, la recordaba bien, la llevaba en medio de su ansiedad y roncaba en la memoria, como un tormentoso pesar agradable. La patica de Chivo fue ultrajada y por él abusada como una vieja yagua. Porque era como la mayoría hija de la llanura, de la pradera y nieta del demonial proceso histórico de conquista y reconquista neoimperialista, hija de la sabana de la llanura continental, de las alturas insulares y de las americanas del sur.
Ahora ella conocía que su infancia había sido robada, con su leche y con su asiento escolar. Conocía que les habían robado al cura y a su maestro con su pizarra y su butaca. Se sintió empujada al barranco y cayó en una parcela de cadillos, en un Ariel en una carnicería venal compra y venta y destrucción total, pero no murió se mueve en un cosmo de sufrimientos y de engañifas .La muerte física no había entrado a la vida suya, los gernemes descompuestos y corrompidos activaron el desorden conductual, igual que Dobleese jugaba los dineros de los mandados, ella corría para la cama de hojas que tenía en los bosquecitos cerca del río para sus brincos sexuales atrapando muchachos, cercanos a su edad, que iban y venían, por los mandados a cambio de caricias pagando desde cinco centavos por cariño erótico. Taguito tenía las piernas cortas, con muchas energías para satisfacer a las clientelas y compradores que hacían filas en los guayabales; para complacerse entraban al centro de las oblaciones sexuales, La tarde para Patica de Chivo habían sido muy blancas, había vendido mucho placer. Vendió más que las verduleras en los juegos de pelota. Esa hermosa tarde perdió la fragancia y fue oscureciéndose con la presencia de Dobleese. Taguito le sirvió caricias desde los meñiques, hasta el último cuero de la cabeza, pero este le robó hasta las ropas interiores en un descuido suyo. También le robó 28 pesos con 28 centavos,.. Envueltos en una actitud fetichista, en los panties azules como su color favorito para las acciones sexuales. Pasó la tarde y parte de la noche lamentando lo sucedido, y secándose las lágrimas y pensando que sería burla hasta por los clientes. Cerró las puertas a los que la buscaban para solicitarles sus servicios fingiendo estar embarazada. No terminaba de restablecerse, de los ultrajes recibidos de parte de Dobleese, y al vivir sola, pensó que no tenía que dar explicación, ni a vecino ni a compadres, de lo sucedido en la tarde del despojo. Dejó la cueva y marchó a bañarse al arroyo los Morones, pero iba mirando los cuatro montes, sentía que unos ojos la acechaban, continuó en sosiego, no tenía nada que perder, sólo le quedaba la vida y según su criterio a nadie le interesaba quitársela.
Los meses se habían ido y el día que bajaron al play de pelota en Bajabonico de las Garzas, al último de los Guerrilleros, del 1959, su corazón tremuló y el resto su continente humano sufría movimientos profundos, mas no la confundieron limpiaron el camino que cerrase.
Estuvo otra tarde blanca aunque parecía a la que Dobleese le robara los recursos, porque el soldado que había ultimado al guerrillero después de haber degustado sus servicios eróticos, se marchó con un palillo en los labios como el comensal principal en la que había sido invitado. Ella otra vez se molestó, pero ya era tarde para abandonar el único oficio que quizá en forma mediocre hacía, por eso manifestó—este se creyó que era superior que los demás y a El había que premiarlo. Como se creía héroe no tenía que pagar lo que consumía! También se builó como Dobleese, de mi honradez. Me he convertido en una lata desfondada.
Taguito no tenía compromiso con el pasado, sufría en su carne el influjo de la tiranía, sintiendo la falta de caminos vecinales, nuevos niveles didáctico- pedagógicos y talleres, y centros de recreo, y centro de madres solteras, centros para jóvenes y para envejecientes en el universo de individuos sensibles al dolor de los pueblos ultrajados, en Bajabonico de los Morones, y el los otros Bajabonicos, aspirando a un mundo mejor. Sufría que los puercos y los niños bebían de la misma fuente, y dormían en la misma cama de los cabritos, No existía diferencia, entre polcilga y dormitorio y comedor, de letrina y comedor... El corral y el bohío era una misma flor escatológica, .Era muy humana, dentro de sí se animaba muchas veces a reír o a llorar más de la veces amargamente, especialmente en el día del entierro de las heroínas y mártires de Ojo de Agua.
Días después, compraba zapatos y vestidos que la colocaban en las alturas que las chicas del medio, podía estar en las fiestas de San Antonio, y de San Juan.
Había estado en Charamico en un hotel 5 estrellas, en Sosua, Luego buscó a Lengua Suave, a El Tamarindo, central Montellano, regresando para la fiesta del 24 de Junio en 1969. Ya no recogía frutas sentía nostalgia por no asistir a la antigua faena socialista, donde comía chocolate con leche, con maní y batata asada. O guineo verde hervido con leña mojada. Con aguacates morados tajeados con las uñas, para luego ir en retahíla a la cañada a beber en hojas ancha de grayumos o en lomo de yagua dejando el calor de las piernas en los matorrales y del dolor en las hojarascas húmedas de cacao y de café, camas de alimañas, pero fuente de vida nueva. Habíamos dicho que ella tenía las piernas cortas,, los hombres altaneros no la miraban, la ignoraban y decían—ese tipo de mujei compadre, no me gusta ni pa limpiai mis soletas. Es una guayabita no me agrada tampoco ni para pasarme el cachimbo, son curras, nombres que empleaban los compradores de frutas cuando estas eran raquíticas y débiles y las rechazaban y la bautizaron como Taguito la rolita, otros le decían tortolita, aludiendo a la avecilla del tamaño de un puñito de un recién nacido
Las tardes eran transparentes como todas las de Bajabonico el dia de San Juan , las nubes espejeaban y el crepuscular la nitidez se vistió en traje purpurino reflejado en los objetos de las casas en los árboles, a la orilla del camino La noche se había ausentado estaba en éxtasis en un recodo de la playa del Bajabonico, limpiando las cortas piernas de Taguito. Salida de éxtasis la noche llevaba a Rolita a la entrada del salón donde la gentes bailaban el merengue Compadre Pedro Juan en un ambiente que esperaba para pintar para Ella que vestía para el azul cielo, en falda de corsé y amarillo pálido subiendo el color cobre de su piel juvenil, con blusa de arandelas sin encajes
La presencia de Dobleese vestido de caqui del ejército, la puso de mal humor y por primera vez sintió la oscuridad de su tristeza se creyó una mazorca desgranándose en la esencia de mujer humillada varias veces por individuos de aquel con la suya, y aceptó pareja en medio de la turbulencia, en la cercanía del militar. Los músicos hallaron algo extraño que no habían visto a Patica sacándole ritmo al carabiné o a los palos que les llenaban de inexplicables emociones, bailó el merengue Juanita Mecho. Y fue a sentarse a la media noche cuando Dobleese dejó de sonreírle... se secó el sudor con una pañoleta reluciente cual luna de verano. Al amanecer cuando esta se marchaba fue interceptada por Dobleese quien quiso pagarle 26, con 26 centavos , pero que fue rechazado de inmediato porque había sido 30 con 30 centavos los que él le saque en víspera de la fiesta de Santa Ana previos también a que se fuera al ejército. El odio que patica sentía contra el era enorme que después de mirarlo escupió es cruz para protegerse de la influencia de las energía demoníaca que este hombre poseía. Luego de haber hecho la cruz del desprecio lo dejó con las manos extendidas.
El 29 de junio estuvo en San Pedro, bailó, llevó cliente a la cama ahora encorchada individuo que no valoraban la pequeñez de sus piernas tampoco la de sus senos de mujer que nunca había amamantado, apreciaban los vaivenes y movimientos que de esas emanaban y que se comentaba en los Bajabonicos, y sus contornos,
Buscaban en compañía de la Rolita la pasta que quitaban el calor, de los soles veraniles, entre bosques y cañadas, entre callejas y circunvalaciones entre fábricas y cañaverales.
Al cruzar el Bosquecito, donde fuera violada, por Dobleese camino al charco Charajima, lo veía en cada objeto, en cada movimiento suyo y los ojos se nublaban y en la garganta aparecía un ahogo anudando su metabolismo y aniquilando su ritmo respiratorio. No sabía como echaría al fango del olvido esos prejuicios y caprichos de complejos que la empequeñecía ahora era mariposa disipaba la negrura y como luciernagas entre bruma y súcubo traspasaba las paredes pensantes y valladares produciendo escalofrío como cuando hizo la cruz a Dobleese… Ahora era dueña de vestidos azules y amarillo, tenía comedor y limpios sanitarios ahorraba 556 pesos en la faldiquera de un camisote ahora no pasaba hambre ni calor ni frío apaciguaba el calor en las chorreras de una madurez prematura como si fuera en la del Bajabonico quejumbroso y murmurador. Pero taguito no leía ni escribía su pensamientos brincaba y controlaba los caprichos y los deseos, las emociones, en apariencia crecía educándose con las circunstancias. Muchas veces las pesadillas la turbaban y soñaba con Laula, la mujer de Rafaelo quien había sido asesinada por éste. La veía sangrar de un seno y del cuello arrancado en la madrugada, cuando Dobleese, arrancaba su inocencia. Cuando Valentino dejó la cárcel de La Victoria, al visitar a su Hijo Felo, apodo que decía a su hijo, el clan de jóvenes, identificados con su carácter los esperaban en la puerta adyacente de la principal de la Iglesia San Antonio. Fue cercado para que antes de intervenir, en los asuntos coloquiales, contara algunas anécdotas o experiencias de sus viajes o hablara de algún personaje de la historia nacional. Era 4 de la tarde, del 4 de junio, en el cielo de esa había zamarrones y borracas en los elementos siderales semejaba un mar de olas negras, y muy pocos blancos presagios de tormentas o de mal tiempo. Sostenía con ambas manos el sombrero de canas de alas anchas ajustado a las pequeñas orejas en la cabeza de no mayor tamaño. Giraba, como con una grúa de carne, el cuello de lagarto moviéndose encima de los ochenta años, manteniendo una complexión física carente de grasa. Dobleese era civil todavía, le sirvió una silla al viejo, este se lo agradeció al sentirse cómodo en el guano de la misma.-- Muchachos—dijo sin preocuparse cruzando
las piernas frotándose las manos, en el camino mientras desayunaba en Bonao, oí a un señoi bien vestío que conversaba de las boisa de Nueva Yoik me aceiqué poquitua poco y le pregunté—Óigame amigo ¿quejeso de boisa de Nueva Yoik? Ei me respondió, mirándome como a un lechoncito de teta, era un hombre bajito, pero bien vestío ya lo había dicho eso sí! Muy bien trajiao, volvió a mirarme por encima de los espejuelos con suma atención me contestó-- Boisa de Nueva Yoik señoi, se refiere ai dinero que circula en las calles de la ciudad de Nueva Yoik, es ei caudal para los negocios. --- Ah bueno, contestéle yo! Pero en los campos míos señois, boisa es un saquito o macutito, pa guaidai huevos de pavos y de gallina, hasta de ganso y de guinea señoi! Je, je, je. Me miró y yo me reí, poique ei también se riyó, ai oiyi mi explicación Voiví a la mesa donde jabia dejao ei plato de yuca con mondinga fue sorpresa para mí escuchai a un viejo, que aunque tenía yeso en la pieina izquierda, y una muleta de madera en la erecha jablaba como un saceidote dei Chivo. Dei Chivo-- dije en silencio pero soiprendío y poipoquito me jahogo con ei bocao yelao dei mondinga de chivo. Sí, sí muchachos, di tres brinquitos y se me quitó. Voiví para donde ei viejo de las muletas para escuchai más dei Chivo --Manuei Rodríguez es ei nombre oficiai dei Generai Chivo…es nativo de aquí de la Vega, como ei Santo Cerro, era un jindividuo de muchas energía y bríos demoníacos y poi ei entusiasmo que siempre tuvo le pusieron ei Chivo. Era ágil como una liebre o como un lince—decía ei de la muleta Manuei fue independentista y restauradoi, paiticipó en las cuatro jaiciones en las campañas militares dei ejeicito libeitadoi era jugadoi de gallos, empedeimío, le agradaban los mangos bajitos, la fiestas a pesai de to. Le gustaba la vida fácil muchas veces abandonaba jese, previlegio.
Pero muchas veces la dejaba para acudir a la lucha como es ei caso de Capotillo Ei -- dijo Valentino – paiticipó en la toma de la fortaleza San Luis, era un hombre de mucho valoi pero se dejaba llevai de la pasión y cometía errores como ei caso de Felo, ei jijo mío que poi sei bruto esta cojío esta cojío poi bruto era corrupto y vil mataba ja los prisioneros, intentó pasai poi la jaimas a varios prisioneros en ei templo católico pero fueron jafoitunaos que Luperón jestaba en ei entoino y los liberó y evitó ei horroroso crimen Los que oían a Valentino Sabelotodo se sentían complacidos Ei viejo de la Muleta—murmuró Sabelotodo—que con las luces de un relámpago pudo ver objetos del entorno y sintió deseo de marcharse, sin embargo continuó-- cuando lo hicieron generai se convirtió en asaitante de camino en estoisionado, atracaba a las familias serias manchando así ei unifoime de la institución militai . .
Muchachos! Debo de llegai poique me jace faita ei agua de mi Tinajita, y además tengo mucha sed, pero déjenme dicile a ustedes que se divierten con mi contada, con mi cantadita ei gobieino restauradoi oidenó prisión dei chivo pero naiden lo quiso enfrentai, no era poi miedo sino que era un tramposo y un sujeto travieso malicioso, lo jallaban pueico de Pin, una cucaracha voladora una jaiba, otros creyeron se voivía un galipote. Pero en ei túnei de nuestro ejeicito estaba la luz dei generai Luperón, que disipaba la negrura de los indisciplinaos que como chaparrones y fueites aguaceros poblaban nuestro juniveiso político.
Finaimente—dijo Sabelotodo, en 1865 cuatro años antes de morir y al deponei al generai Polanco cometió demanes yo no se que jeso di dimanes pero era aigo así como dicía ei de la muleta según mis caiculos significa errores. Este Generai se levantó desde Moca, contra ei generai José María Cabrai, y de inmediato proclamó a Gregorio Luperón jamigo suyo, pero fue convencido, a deponei esa actitud guerrerita, lo hizo poi teneile respeto y admiración a don Luperón
Ei Chivo—manifestó Valentino, cuando estalló el trueno que rompió la línea de la tarde para darle paso a la
oscuridad de la noche. Bajo los primeros goterones de una noche de granizos y de ráfagas vientos—era una tormenta, Adios muchachos!—Adios Viejo, Adios Chepilo!
Manuel Jacobo Sención, dijo a Lengua Suave, ---cuando José María Cabral visitó a Moca ordenó al General Manzueta, la prisión del General Manuel Rodríguez, y que al consumo del hecho lo ubicara en una celda en la Torre de Homenaje, El Chivo, fue capturado en Cotuí, pero el gobernador ordenó el fusilamiento. De esa forma finalizaba las malas andanzas de este bravo militar. Esa actitud oficial molestó al general Gregorio Luperón, quien protestó rabiosamente.
Isabel Lengua Suave, vestía un corto vestido negro y en sus pies una zapatilla pisafetes, en las orejas pendientes hechos con alambre de cobre, que al decir de los inocentes eran de 23 quilates. Como Manuel se quedó en los Bonilla, Isabel continuó para el Baquiní, en la casa de Altagracita Patica de Chivo, donde hacían el velorio. Había muerto un Niño de menos de un año. Los gritos de dolencia que daba la madre del pequeño difunto, se mezclaban con las canciones que ejecutaban los asistentes. Isabel entró saludando, abrazó a la madre compungida fue a la enramada donde colaban café negro bebió del menos fuerte y encendió un cigarrillo se sentó y comenzó a conversar de todo, incluso del general Manuel Rodríguez, de Gregorio Luperón luego la vivienda tembló con el dato sobre el general, Moisés Alejandro Anderson, conocido popularmente como Macabón que en su jurisdicción colonial, prohibió escupir redondo” en las plazas públicas -- Este animai, señalaba ella, estando sentado en la pueita dei cuaitei, en noche de luna, en Samaná dejó en miseria, creo que una monedita, de diez cheles, taivez de menoi, valoi, cuando creyó que la veía, se inclinó pa cogeila cuando agarro era un pedazo de catarro que le atolló los dedos, je, la mala sangre que jizo esa pueica, no se podía medil pa qui sepan. Pensó qui viá sío un dominicano qui protestaba poi la foima abusiva de los guaidia coloniales contra los cazadores de jutías y de
conejos en la zona. En la mañana siguiente, ei mismo generai, escribió prohibiendo escupil redondo en los coitijos, en las calles, en las plazas públicas etcéteras, Sabelotodos, que estaba a su lado le preguntó--, Dígame sobrina, donde escuchó, usted la historia dei generalito Macabón? --¡ Bueno tío Chepilo, dijo mirándole a los ojos, me parice que si lo oyí a usted una taide Veida Tío qui sí? –Ansina es muchacha, Dios guaide tu limpieza mentai jamí séme jabía oividao ei generalito Macabón.
El gobierno de Heureaux, había prohibido los Baquinís por considerarlo alejado de nuestros usos y costumbres fuera de nuestra realidad hispánica, esa orden cundió el territorio nacional. En Bajabonico de las aromas y de los parajes de ese Cantón en aquel momento por el coronel José Nicolás Silverio, quien se presentó a otro Jolgorio de esa naturaleza, acompañado de 4 soldados armados con bayonetas caladas en los fusiles. Entraron a la enramada de repente apagaron las lámparas en medio de gritos y disparos perforaron los instrumentos de música. Hubo quienes huyeron sólo dos parejas quedaron en medio de la enramada, al lado del cuerpo sin vida del coronel que no faltó quien dijera que había sido muerto por uno de sus propios guardias Suave continuó su mayor empeño en presencia de su Tío Sabelotodos, y dijo sería bueno jablai dei Negro Juan Vaquero, --era un precuisoi de la rebeidia poi la libeitad -- decía casi entre los diente Lengua Suave, -- aunque fue en 1546, reconocemos su entereza y su valoi. Las lomas dei Baoruco fueron sus escenarios de luchas. Se cuenta que esa taide llegó, como un relámpago encima de caballo blanco, como Napoleón en su tiempo, y venían siguiéndole mil jombres aimados hasta las muelas de atrás. Mientras tanto Rojita con su olor a limón. Suave y Selacción sometían a los oyentes al influjo de su lenguaje extraño pero que por el abuso de empleo de tonalidades puramente del clásicas se sentían atraídos.--No podrás tú mocosita Yo pienso - dijo Selacción – qui te estás voiviendo loca. qui tu cerebro di culebra explotará qui no faita mucho y es agora qui midoi cuenta poiqui ti dicen Lengua Suave. Esas difolmaciones tuyas son jenvidiable. Ei quino ti conoci ti prefieri y poi ti a puesta y podría categorizai sus inveiciones .No sabiendo qui eres una mujeicita aperriá capacitada pa revoicaite con tu abuelo y con tu tio Valentino. -Lo que le sucede a usted, su meiced, es qui no tieni maletas pa guaidai ei manantial de cosas frescas que salen di mi gaiganta, la cosa qui yo si dici, la digo en lenguaje qui jablaron mis abuelos y poi eso no me causan “aleigias” pero estoy muy segura que en jellas jai un caudal de hermosura y de cadencia musicai.
---Vaya ustia vei, yo también jablo como mis jantes pasados, jen lenguaje de Quisqueya, aguaita, aguáitala, ¿qui si cree? --Si lo vua ripití jai qui aprendei a controlai los estímulos, alistaice pa las limitaciones, jai qui mejorai, la conductia y los reflejos concurrentes de la filogenia y la ontogenia. Hablaron de las motivaciones, de lo impulsos.
--De los impulsos—dijo Selacción, yo se qui hay tres clases, qui andan con nosotros qui lo llevamos en las médulas, son productores, de energías para las primeras necesidades, dei oiganismo. Los que las oían se divertían con el gracejo que ponía en cada entonación en las vocales interiores en cada cuento que exponía. -- Me voy -- manifestó en voz alta para que Selacción Pantoja, la escuchara.-- No, no te vayas mejor cambia de temas – aclaró La Pantoja.--¿Poi qué debo cambiai de asunto, dime Tú?--Poiqui los comi mieida como tú no lejintereza aprendei de los vecinos Minutos después Selación, que se había marchado regresaba vestida de verde perfumada y su boca era como una herida Isabel que iniciaba la historia de la prohibiciones de los Baquinís se detuvo que recordó otra vez al general que prohibió tirar papeles y cáscaras de guineos y de otras frutas que ensuciaran el ornato.
Pasaron los meses y nadie sabía donde estaba Isabel, creían que estaba en Montellano donde es dueña de propiedades de artes culinario entre esas la de Bajabonico de La Damajagua. Lo que si se comentaba que como una vaca que dejaba el rastro de la soga que desde los cuernos dejaba al paso de sus huellas.--- Viste a Isabel Modesto?—preguntó Selacción---Dicen que estuvo en la fiesta de los Uveros , pero cuando fui por allí, no se hallaba .
---Yo la buscaba para pagarles los réditos de un dinerito que le tomé prestado.--¿Y…, desde cuándo se convirtió en usurera?
--Yo no se lo si se es que ella está muy bien cobrando 20% semanal, pero lo que se comenta de ella es-- significaba La Pantoja, que se quitó la ropa y que la puso encima de la ramas secas, al no saber lo que hacía por el jumo que llevaba como sus moños, comenzó a zarandearse en las yerbas amarillentas se comenta que sentaba en las piernas de cualquiera estando como vino al mundo, que se serpenteaba más las aguas sucia de las crecidas del río Bajabonico, estando en supino dejaba ver las relucientes piernas juveniles, pero que intoxicaba a todos los que la miraban en la celebración de esa maniobra erótica, quién sabe a que santo o demonio. Inició un placentero viaje en la pradera, de sus ilusiones febriles hedonísticas iba muy cómoda en el pájaro de la voluptuosidad conducida por los
dedos de ambas manos ascendían con displicencia hacia las cañadas y colinas erógenas cruzando los vallejuelos, de sus piernas para alojarse en las gran llanura abdominal, sin tropezar con loe pequeños peñascos, cerros que comunican las piernas los muslos bien torneados.
Esos ochos asistentes, los dedos de las manos, iban y venían entraban y salían de rejillas y covachas, como periscopios que atisbaban los plácidos mares para entonces pasar al despojos de los sostenes dorados que protegían los múltiples senos de los intrusos .También el vendaje de los interiores, que todo el vivo asombrado creyó, que podía tener vulvas gemelas ,los colocó entre las verbenas y fregosas, que entraban al escenario como compice boyeuristas y luego Lengua Suave cambiaba de posesión , se movía, para con las caricias de las piernas, llegar al puerto menos lejano y menos profundo. Acariciaba sin hacer cálculos geométricos, de ninguna índole y nos dimos cuenta que el objeto de su pensamiento estaba cerca. Y se iniciaron los quejidos y ayees que la sindica como una mujer de profundas facultades sexuales
-- dicen que nunca Isabel ha estado en compañía de varón, que no puede tener orgasmo bajo la luz solar pero ahora como está ebria, es que nos damos cuenta, de parte de los misterios que la envuelven. Ahora vemos que tiene, seis preciosos senos en columnas, de dos que la especializan y la cotizan es posible, Julián, que se avergüence y encapriche, que se acompleje…--es muy atinada tu observación, Panchito, agregó Angel Francisco, que no retiraba la mirada de los dedos de Lengua Suave, que pesoneaba y aureaba los terminales del seno número dos, de la segunda columna.--¿Por qué será? Preguntó Selacción
¿Por qué será qué, Sela? Esa manera buscar placer, y también esa cantidad de cosas que la acompañan. Ahora es que me doy cuenta, del por qué de su agentamiento!
--La gente que menos sabe habla hasta por los codos. Cuando la gata maúlla debió de haber parido.
-- Fíjate lo que acabas tú de decir!-- Puede que tenga alguna virtud además de esas que hemos observado en su cuerpo, que oculta en algunos de los baúles más secretos dentro de su universo.--Las mujeres somos muy misteriosas!
-- No solo las mujeres, ese es un impulso muy humano, cuando somos normales hacemos cosas muy parecida a esas.
--Pero lo que se dice de ella es que tiene una vulva pequeñita y lampiñaza,-- ¡Ja, ja, ja! Se rió Selacción antoja.
-- ¡Anjá! ¿Será por eso?--Pero cuando íbamos de excursión al charcos de la India, a Barrabas, nos desvestíamos el mayor de todo era el de ella, por lo menos a nosotras nos parecía. Sería algún simulacro, una camaleonada
--Yo pienso que si que es muy posible que fuera simulación decían que al lado de cada seno había uno menos grande que el normal ahora vimos, que no era como decían sino que era algo mas. Tiene como las cerdas carreras de ya tu sabes de que estoy halando.--Por eso es que Isabel no es cuando esta vestida como nosotras usa generalmente cuellos o bufandas haga frío o calor. Los muchachos dicen que no puede tener relaciones porque en su vulvalina existe una fierita que muerde, no entiendo eso y me gustaría que me lo explicaras tú.
-- Su binbolina es muy estrecha pero también posee, una curva o pequeño desvío que como la gallina se convierte en un laberinto oscuro peligroso y según todo el que ha entrado ha salido gacho y sangrando.---Así como lo oyes
--Oye, Angel Francisco, déjame decirte una cosa extraña de esa mujercita, señalan que tiene un Clitosoma que impide el avance, de la prepucionía de varones y que puede ser mordido por un bicho maligno que por su energía lucifélica ella posee. Mientras hablaban de Lengua Suave, Dobleese, que había sido su primer marido permaneció hospitalizado durante 33 días, no pudo cambiar de lugar, fue el primero que cultivó en ese jardín pero no cosechó la primera Lila. Años más tardes el contó que tiene enormes contracciones de fuego que en la profundidad son como los Charcos de la Damajagua, cuando hablaba de esos asunto lo hacía como un magnate petrolero, lo interesante en
ella, son sus quejas, los primeros que manifiesta cuando al parecer su pareja atraviesa la desviación común y normal para entrar al laberinto orgásmico. No me importa—decía Dobleese si era corto o largo el recorrido, lo que me interesaba eran los quejidos que entregaba en bandejillas de placer. Dobleese tenía 5 años siendo miembro del Ejercito Nacional era conocido por múltiples motes que por gloria se había ganado Le llamaban Cabo dientes, se había hecho famoso por la habilidad que tenia en los juegos de azar, era de los pocos soldados que del sueldo le quedaba, siempre ganaba en el de dominó en los parecitos, o en la lotería. En la inspección general hallaron en sus pertenencias listados del uno al cien para rifas de la lotería Nacional, que lo acusaban de ser dueño de rifas de aguantes.
Contaba historia de su lugar cuando recibió un telegrama para trasladarse de inmediato para Jimaní. En la tarde del otro día del 23 de septiembre del 1964 llegaba al dormitorio de la Fortaleza del Ejército. Colocó sus cosas en el gabinete correspondiente, quedándose dormido luego llegó al comedor, para alistados. Ya no había comida, pero tuvo suerte, el jefe de cocina era amigo de su hermano Celso Dobleese, chofer del actual Coronel de la fortaleza Antonio Duverge.
--¿Pero no es usted hermano del Sargento Silvano Silva?
--- ¡Si señoi!, respondió Apolinar Dobleese, haciendo el saludo al sargento Camilo Amarante Pasaron los días, y ya Cabo Dientes visitaba los sitios de diversión escuchaba los chimes del barrio Enriquillo, pero no se enteró que en la Barra la Berrenda no iban los soldados ni las policías por estar prohibido. Ya en la mesa 14 en un Rincón, y sintiéndose cómodo era una simple sombra que habitaba dentro de sí como un archipiélago en deformaciones, conductuales... la barra estaba llena de tragadores, 21 personas estaban sentadas, el vestido de militar, los parroquianos les miraban como si el hubiese sido un pelo en un asopado de habichuelas blancas, El no se imaginaba por qué todo el que allí estaba miraba para su mesa, ella le sonrió, Lucinda Contreras, volvió a sonreírle ella vio que Cabo diente mostraba al reír los dos colmillos gigantes, forrados de oro si estos estar cariados. Cogió el lienzo color verde y comenzó a limpiar la mesa. Mientras laboraba dijo— ¿Señor parece que es nuevo por aquí?--¿Por qué lo dice señorita?-- Porque a esta Barra está prohibido la visita a los militares.--¿Cómo dice usted, señorita?
--Lo que usted escucha, no está permitido su entrada a la Berrenda! Hace tres años en esa misma donde está usted sentado mataron al cabo Caja Blanca, sólo necesitó una para morir pero le dieron 12 más y desde esa misma noche no había entrado ni un alcalde a la Berrenda.
A Dobleese se le salieron los orines con la fuerza de una eyaculación de quinceañeros, que desembocaron en el borde de la correa. Bebió el ron que le quedaba de un sólo trago, dejó 25 centavos encima del platico del hielo, y se marcho sin decir palabras ni mirar a nadie.
7 minutos después estaba acostado usando los brazos como almohadones, quedándose dormido nueva vez, despertó cuando los vecinos de las hileras de la cama mantenían discusión sobre temas históricos, entre otras cosas uno decía --Mi abuelo era Banilejo nacido y criado en Bani, tenia una propiedad cerca de la capital. Se llamaba “El Algodonal”, allí tuvo lugar varias batallas en 1866, siendo El protagonista principal, se levantó en guerrilla, contra el gobierno de Meriño, Sacerdote conocido como Pico de Oro por ser dueño de la más envidiada de la oratoria política de esos día, Eso es muy verdadero—manifestó el cadete que estaba de visita en la fortaleza, Mis maestros señalan que en el valle de Neiba, en esos días de revuelta, se levantaba un general llamado Pablo Mamá, quien guerreaba con la llama revolucionaria que ardía en los pechos de los hombres libres. Para Cabo dientes, eso no significaba mucho, pero se interesaba por lo nuevo en el, hasta había olvidado a la señorita Contreras, No podía comprender como no podían salvarse los heridos estando escondidos en las covachas y recovecos de la finca el Algodonal Tampoco pudo comprender en fin estratégico del decreto de San Fernando. Autorizaba pasar por las armas al que fuera sorprendido llevando armas encima o en las manos con propósitos desconocidos o para claramente al Gobierno.
Dobleese pensaba en Bajabonico de las aromas en las matas de Mangos lechosos y vizcaínos pensaba el Lengua Suave y en Patica de Chivo, Fue al otro pabellón y vio que la mayoría de alistados estaban allá, jugaban todo tipo de entretenimiento, se detuvo en el alero, ponía los oídos en las paredes del edificio, oyó que discutían de los años 1800 y 1882, se dijo en baja voz,-- sí, sí.., se comenzó a sentir el desarrollo, dijo uno, de los soldados, con las primeras circulación del telegrama, periódico que dirigía César Nicolás Pénson poeta dominicano, Nadie lo puede negar está claro, como también es cierto la aparición de ese mismo año de un foco de viruelas donde murieron poblaciones enteras, La Misericordia y la Protectora de los pobres, hicieron grandes e ingentes esfuerzos para socorrer a las víctimas y a familiares.Aunque Apolinar se hallaba exiliado en su propio país, y siendo soldado en la frontera y a pesar de no estar jugando casino, ni ningún tipo de juego de azar, había aumentado 25 libras, y se veía grande grandote, fuerte pero por lo menos no olvidaría los nombres de Pablo Mamá y de Alvarez.. Generales limpios y honestos. Se sintió atraído por los análisis que hacía el nieto del general Alvarez y recordó que una de las que fueron sus Maestras habían dicho que en 1886 Puerto Plata había sido Capital de la República y que Gregorio Luperón era el presidente. Del gobierno provisional en San Felipe, esas ideas les golpeaban el cerebro se fue acercando al grupo esperó el momento y manifestó—claro, claro yo estoy muy claro, pero en el cogobierno de Luperón nacieron el cuerpo de Bombero de las provincias principales, pagó los sueldos de los empleados públicos, mandó a uniformar a las tropas, mandó a construir un monumento en la catedral de Santo Domingo para trasladar los restos del almirante Cristobal Colón. Incluyendo el cadete aplaudieron las explicaciones de Dobleese, a quien ellos denominaban el Desconocido, fue el Cadete, quien dijo lo último sobre el gobierno de Puerto Plata. –señores, señaló el futuro oficial del ejercito,--muchos desconocen que 28 de mayo de 1879, se adoptó la Constitución y que el presidente Luperón la promulgó ese mismo día. La verdad en término histórico no estaba violentada, a pesar de lo incoherente del razonamiento. –murmuró un profesor Sureño de Apellido Pérez Encarnación. Pero a Cabo dientes esas partes socio-filosóficas no le interesaban porque tendría que volver a nacer e ir a la escuela Napoleón Núñez, Molina para poder entenderlas. Pero sí comprendió que los jóvenes soldados del sur de la República estaban muy en ondas de los temas de la historia. Esa tarde cuando dejó la Berrenda, y que Lucinda Contreras, le hizo la advertencia de la misma, ascendía a Sargento a su hermano Celso. Pero lo habían llevado hacia Samaná desde la intendencia A Celso lo conocía como el oficial gato se especulaba de este nombre y de este individuo decía que los dedos se convertían en garras, que los pelos quedaban por donde pasaba llevándose los objetos que seleccionaba por la importancia económica que según a él le parecieran se decía que estando en la Chocolatera laborando, negoció varias piezas de los vehículos para el embarque del café y del cacao.. Lo bautizaron como sargento Gatán, era un esbirro débil para hacer daño sentía jangadas de placer, mordiendo las orejas a los detenidos poniendo batería, de alto voltaje en los testículos, y en los senos de propia mujer. Así crecía su prestigio y su fama. Al compás de las actitudes de los coroneles al que Celso le sirviera de chofer asistente. Aguerrido en el choferismo, hizo en múltiples ocasiones y circunstancias que jóvenes, adolescentes que detenían en la carretera lamieran partes de su cuerpo, bajo el poder de la fuerza. Maximina Cruz Puente, era tía de Taguito Patica de Chivo, madre soltera, de once hijos .Medio hermana de Jacinto Puente y Puente quien era hijo natural de Felipe Wenceslao Bernardino. Jacinto era cabo del ejército como Dobleese y prestaba servicio en la fortaleza de Higuey pero fue trasladado a la San Felipe, en Puerto Plata… Dejó el servicio y marchó hacia Boca nueva, para saludar a su hermana Maximina. De regreso es informado que ha sido trasladado para Sierra Prieta, paraje de Guanuma en La Victoria. El día de traslado de Doblepe trasladaron a Dobleese para Higuey, tan pronto llegó visitó a Eleodorita Pereles, quien le informó del traslado de Doblepe para Tiro al Blanco en Sierra Prieta y que vivía en Punta de San Felipe de Villa mella La noticia produjo en Silvano Silva, nubarrones y amargos ventarrones, pero no se puso triste, porque era soldado de la tiranía, Era sábado comenzó con la tarde a caminar y a visitar lugares que en otros tiempos visitara para beberse unos tragos solo o acompañado y no halló sosiego en ningunos de los lugares por donde anduvo, retornó donde Eleodorita, mujer de Máximo el “Borracho” pero que compartía caricias con los tres, tanto al por mayor como al detalle. Lo estaba esperando y le abriría la puerta al primero que la tocara pero ese día ella prefería Dobleese. Acostó a su hija la arropó bien y con cigarrillo en los labios se dispuso a esperar la llegada del que la suerte le enviara. Estuvo en el espejo, luego en la ventana miraba la hija la arropaba de nuevo, en la ventana vio que el que se acercaba con una cerveza en la mano era Dobleese, pero además llevaba en bandolera el arma de reglamento…y lo halló bastante extraño. Fue de nuevo al espejo y limpió algunas huellas de los años con una toalla sanitaria en segundo abrió la puerta Eran casi las cuatro de la madrugada, cuando llegó el Borracho y al enterarse que Dobleese dormía con su mujer buscó gasolina sin importarle que su hijita dormía dentro de la casa le roció del combustible tiró una caja de fósforo encendida.. y salió huyendo para desde un punto estratégico mirar el desenvolvimiento de sus propósitos. Todos tuvieron buena suerte porque los fósforos cayeron dentro de un tanque lleno de agua y se apagaron. Minutos esperando que nada ocurriera el Borracho tuvo tiempo para ignorar lo
ocurrido y se marcho para la casa de sus padres donde durmió hasta las diez de la mañana.
Hubo vecinos que informaron a la policía de lo sucedido

y llevaron a Máximo al cuartel lo aconsejaron y a Dobleese lo trasladaron para Tiro al blanco y le contó lo
ocurrido a Doblepe Estando en Sierra Prieta tres semanas después Dobleese contaba a Jacinto Puente y Puente con lujos y parsimonias de los sucesos ocurridos en casa de Máximo “El Borracho” y de Eleodorita Pereles,-- Oye Jacinto, yo no despertaba, estaba tragueado y la candela de los fósforos no ardió… pero la mujer sintió algo y me llamó agarró mis armas y laigué antes de salir ei soi . Esperé en casa de tu familia y allá me llevaron ei telegrama de traslado para acá La sueite nos une.
En Bajabonico de los Morones, Taguito que había regresado a su vivienda hablaba con Sensemaya la madre de los Dobleese, --ese Polín, es mala peisona, me robó 30.pesos con 30 centavos, que guaidaba pa compraime una camita y dejai de vivil como los pueico, en ei fango, También compraría otras cositas y ya usted, En la corrida de San Juan me desvolvía incompleto y así no lo recibí, poique ei es un abusadoi y tiene qui daimilo juntitico pasentil que lo debo peidonai. Mientras las dos mujeres conversaban de la conducta de Dobleese, Selacción y Angel Francisco lo hacían acerca de Isabel Lengua Suave. —Cuando ei sol saiga para todos -- manifestaba -- La Pantoja, saldrá para los Negros y para los Pobres, donde quiera qui se hallen, entonces compañero la leche que las vacas darán leche no será blancas para los Blancos, sino para todos como lo que dicen dei soi. Era noche de Luna y no era pálida sino rosada, pasaban los rayos por el verdinegro follaje del alto limoncillo y de los cocoteros semi ancianos del camino, como un saludo risueño al universo.
--Entremos -- dijo Selacción, la noche se enfría muy temprano.
Cualquiera se queda y de esa manera no tiene que bañarse, en casa de Patica de Chivo el radio está encendido y no permite escuchar que Taguito preguntó a Sensemaya --y ¿cómo supo de ellos?--Supe que lo habían llevado a Polín un lugai llamado Sierra Prieta. Y a para Samaná a Celso .¿Poi dónde queda jese lugai? ¿Dónde ejeso? Expresó secándose el lagrimón que surcaba la mejilla izquierda. Se mantuvo parada de la banqueta donde llevaba media hora hablando de los dones de sus hijos militares y que en vez de beneficiar a la familia la han desfavorecido con actitudes, violetas deshonestas
deshonrosas y de terror. Se puso las manos en las espaldas y el vestido de alistado se le encogió Gregorio que atraído por la música del receptor había llegado miró, que a pesar de los 66 años mostraba carne en los tobillos , y deseó el soplido de una brisita y le empujara dos pulgaditas más hacia el norte del continente Sensemayáutico --Anoche, continuó doña Sensé, estuvo Celso buscando cuaito y nos dijo de los cambios que sufrían poi los traslados.,dijo ei, que Polín estaba fueite en Tiroaiblanco ¿Poi dónde ejéso? te pregunto poi segunda vez te lo ruego! -- ¡Es cieito!, ¡cieito es!, ¡veidad que sí! Sierra Prieta queda camino a Yamaza, a Guanuma, yo caminé poi un lugai llamao Las dos Luisas, Blanca y La Prieta. Pero ese territorio es del Distrito de La Victoria en La Capital. Eso es propiedad de las Juerzas Jaimadas. Es un lugai parecido a Loma Blanca, en Hoyo de Pérez, Es como si fuera una Jescuela pa aprendei a tirai con jaimas laigas y pistolas ya le diji qui está ceica di Villa Mella.
Muchas gracias mujei, dijo Sensé, que no le decía apodo a nadie, para evitar que alguien se atreviere a decirle Sensé la hojaldrera, Cuando Sensé iba camino a su casa se detuvo con Eloy Esperanza Medina , que cortaba plátanos y guineos en el conuco de los Morones,
Eloy, Eloy –llamó varias veces nadie le respondió. Soy yo Eloy, la Hermana de Catalino Silverio, soy Sensemaya la mujei de Virginidad, que le ñama. Venga pa que venda una mano de guineos maduros. Eloy escuchó que hablaron de vender y entonces levantó la cabeza. Esperó que vociaran de nuevo para en refunfuños decir;--¿unjú!, es usted Sensé?
-- ¡Si soy yo! ¡Cómo está Eloy?---Usted no necesita Ñamaime poique es usted de mi confianza! Las pueitas de estan Estancia están de pai en pai, pa mis jamistades, sabe usted. La señora anduvo en el platanal, llevaba un poco de miedo entre las frías hojas de la estancia poique recoidó que Yeya la nieta de don Gregorio Medina, murió después que entró teniendo la menstruación en el Conuco de Yautía de su padrino Segundito Minaya Medina. Sensé, no tenía la regla pero se había clavado con lo que parecía una daga mohosa y estaba nerviosa. El nerviosismo se le pasó al comprobar que era cierto que los plátanos de Eloy Medina parían cuatro y hasta seis racimos hasta en las ramas. Estaba complacida por la organización de los sembrados pero sobretodos por la limpieza. Cada mata
Manifestaba una individualidad y carácter casi humano. No había una sola hoja seca, era verdinegro el panorama. Era vida, educación y vitalidad. Contó 26 matas de Rulos 4 filos con seis racimos y no creyó estar despierta. No podía creer que en el mundo de los vegetales como el de los humanos pudiera haber esas maravillas que era facultad de lo sobrenatural. Su asombro fue mermando cuando vio que una rama de Limones dulces salía del tronco de una agria cargada de unidades de cítricos. Eloy era un fiel enamorado de sus siembras, de sembradíos como esos que atribuía poseer sensaciones eróticas y acciones sexuales. Cada tronco o familia como el la consideraba tenía seis miembros máximo no le agradaba verle más, se parecían hermosas adolescentes, con poses eróticos que estimulaban para otro engendro y la procreación Los paseantes y buscadores de leñas en los Jabillales, veían las largas hojas como largas y perfumadas cabelleras de poetisas y diosas inspiradoras de selección de buenas y mejores variedad para crianza de los nuevos vegetales.
Cuando habló con su marido explicó la diferencia de la agricultura de Eloy y la de todos los demás, mostró el racimo que como regaló enviara a Virginidad. --.ahí te envió un tremendo racimo, dice que te lo coma con calanche de pueica papacota poique la sangre de ese animai está santificada.
En sierra Prieta Dobleese lamentaba no tener forma para estar en la fiesta que su padre hacía el 24 .Por eso en
horas laborables, en horas de libertad , se dirigió para casa del Señor Pablo Mercedes en Mal nombres, paraje de La “Victoria” en la Capital de la república, donde hacían la misma bulla de San Rafael Arcángel,.Dobleese vestía de verde Olivo como vistieron los guerrilleros de 14 de junio en 1959 Lucía bien por ser delgado, alto y su porte erecto cual lata de fina madera, para bajar las frutas de los cogollos de las matas Olfateó los juegos de azar, y llegó a las mesas de cartas donde pasó la noche, bebiendo y jugando en resumida cuenta, al siguiente día en la garita, comprobó que había ganado 26, con 28 centavos, recordó a la rolita cuando le rechazó el pago que quiso hacerle, en la fiesta de San Juan, porque debió ser 30 con 30 centavos . Sintió escalofrío y dijo pues, esos pesos me cayeron como Tata a Valentín, frase que decía Esperanza Eloy, cuando los plátanos suyos parían múltiples racimos. Tata era doña Eusebia Silverio madre de Chepilo Valentino, sabelotodos, esposa de José Valentín Silverio, a decir de la gente ese era el matrimonio más completo partiendo de los sentimientos que enseñaban a sus hijos, el cuidado que impregnaban a los miembros de la familia del orbe Imbertolino.
Jacinto Doblepe, regresó a Higuey ciudad de donde era original, convivía con Eleodorita y la niña que tanto El como Máximo el Borracho, decían que era suya. Puente ya era Teniente del Ejercito y se creyó que había llegado, que había cruzado el Gibraltar o que en verdad era general de generales de varias estrellas y agarró un solo canto que le pareció digno para un recién ascendido.—“ no quiero que me pongan a morir como un traidor, yo soy bueno, y como bueno, moriré de cara al sol” Esos versos de José Martí, no sabía donde lo había oído, pero le gustaban, y le parecían que fortalecían su frágil personalidad Doblepe conocía que había en sus compañía un grupito de oficiales subalternos y de suboficiales, que lo consideraban flojo, genuflexo, nenúfar, energúmeno y otros calificativos para El, inmerecidos. También a él y a otros en los que se hallaba Dobleese, los tenían menos que a mediocres patán, a Idiotas. Estando en formación para retirar la bandera, una tarde, eran casi las 7 de la noche y por la imbecilidad de ese oficial,--dijo el Cadete Ventura Bristol, dio la voz de alerta de esta manera:-- Aquí todos juntos, en vez de mandar ¡Atención! Como todos esperábamos, el comandante que estaba presente, acompañado de un superior se molestó y lo calificó, de falta de hombría para ser un oficial dominicano, no tenía caloría, ni poder de mando. Fue por eso que lo autorizaron a reiniciar lo que debió ser un acto rutinario y llegaban a una hora sin poder iniciar siquiera. A lo de inmediato Jacinto dijo-- ¡Atención! aquí todos juntos. Y a largaba o triplicaba las vocales, carente de armonía y de musicalidad marcial .Tampoco había curvas tónicas que los jefes de equipos y de grupos aprenden de los orientadores instructores, en las enseñanza para oficiales, Puente repetía— ¡Atención! La tropa cayó en un estadio de risa y de irrespeto, al momento y a la solemnidad de la ocasión, Atención, volvió aquí estamos juntos, menos el cuervo y el gato por estar en servicio de los oficiales, iba a decir los nombres del Capitán Asiático y del Coronel Ambrosio Mateo, dueños respectivos de las barras Tresotas y Refúgiame que atendían los cabos Pimentel Cabrera y Cuevas Polanco. Cuando el Coronel le reclamó lo de la voz este respondió—yo no soy culpable, señor, culpable es el alto mando que hizo oficial, señor! La tropa al oír la barrabasada de Doblepe, rió con mayor entusiasmo y ahínco La bandera permaneció en flote continuo por orden superior por 48 horas violando los reglamentos institucionales, por la torpeza de los jefes que administran la república como una loca hacienda.
La muerte de Rufo y de Marcelo, dejó a los Bajabonicos huérfanos de personajes ledos y grasientos, en Bajabonico de las Damajagua vivía un personaje que aunque no lo agrupaba en la parcela de Rufo y de Marcelo, por las características físicas muchas veces joviales, pasaba los aposentos donde dormían los individuos pintorescos.
Rola era el apodo de Rolando Rondón Ramírez, pero coincidente a su pequeñez, de su cuerpo en general y en particular lo pequeño de sus piernas y amplio cuello.
En Imbert de los Cañafístoles, vivían Vate y Zeppelín. Dos individuos poseídos de las gracias de lo humorístico, propias de los primates en valencia frecuencial UNO, uno, se mofaban de los amigos que podían deleitar introduciéndose los dedos en los túneles nasales, y auditivos Al señor Vate que era más joven que el señor Zeppelín esa acción le provocaba llantos de tanto reír, reía por largo rato cuando si alguien luego de sacudirse las narices, se metía los dedos en la boca. En cambio Zeppelín que era un bebedor de tragos en bocas de botellas cilíndricas, nunca frascos cuadrados o de otras formas, reía a carcajadas, por diversidad y asuntos uno era por mirar que alguien bostezara le caía una retahíla
risas púdicas morbosa que sólo tirándole alcohol en la cara, se le quitaba o se calmaba simplemente. Pero lo que los distinguía era la alegría que adornaba su idiosincrasia.
Con cariño hablemos de Putica Fernández, simpático, enemigo de los días mojados, y de las noches oscuras de los caminos empantanados, y de los basureros, en los aleros de las viviendas., en las Escuelas o en las iglesias…Pero déjeme decirle que las notas de su acordeón quitó muchas perezas del jardín y varias persianas. Llevó varias venturas y glorias, en la intención de sus sueños que deseó compartir con todos.
Una tarde que iba de Bajabonico de los Ramírez, de la casa de su padrino, el señor Eligio Ramírez, legendario Inspector de la Manicera, al cruzar el río por el paso que lleva al Central Amistad encontró, que Rolando, hacía una cesárea a un chivita primeriza. El animal se moría de dolor, cuando Rola columbró la presencia de un oficial del ejercito huyó y de paso desembarazó al animalito. Creyendo que lo que hacía era un delito corrió y se internó en uno de los profundo Charcos Dobleese que con los humanos era huraño se acercó al recién nacido, y observó que movía el hociquito por lamerse el cordón umbilical.
Rolando Rondón guardaba el cuchillo en la playa, y mientras el soldado Dobleese estuvo en el entorno se mantuvo zabullido. Al otro día era domingo y en el play de Bajabonico de las Garzas jugaban pelotas cuando Dobleese se enteró acudió pasando primero por el kiosco de la familia Henríquez Bonilla, como Rola estaba junto a Marcos, el hijo de su tía Felipa, lo llamó – primo Marcos, primo Marcos. ¿Desde cuando Rolita es Partero? –Rola, Rolando es pediatra de animales !Pero polín se limitó a decir ¡Unjú! Yo no lo sabía. Era costumbre de Dobleese escariar cuando no hallaba salida o solución de algún problema. Fue para donde estaban la mayor partes de los fanáticos y saludaba a todos y respondía preguntas como esta—oye Polín ¿qué me trajiste? –preguntó Aquiles García que estaba en la policía cacos negros. No respondió porque bebía agua que había obsequiado el señor Aquino Emilio Henríquez, para los peloteros, que desde el kiosco veía la conclusión del séptimo episodio donde los visitantes empataban el juego.--Pero, ¿eres tú Felo?--Si yo soy! ¿Cuándo dejaste la prisión? No podía creer que fueras tú, pero conocí tú voz., y poi eso fue qui me quedé, pasado mañana volveré. -- Pues, llevo tres semanas, cuando me hicieron Legionario corrí de inmediato para acá pa a lucil mis polainas y total mis unifoime -- ¿Cómo legionario, Felo?
--Soy cocuyo, legionario de la montaña,--¿De los cocuyos de Petán? Dobleese emocionado con el uniforme que lleva Felo Silverio Vélez, por lo que nervioso y entusiasmado pregunto. Dígame paisano, ¿cómo puedo yo, ser un Legionario? ¿No necesitan guaidias de experiencias?
-- Yo como lo he sido, te seré claro y sincero, Polín , para ser de este cueipo , que es como una casa oscura, sólo entran los criminales o individuos condenados a 30 años, por habei dado mueite a peisonas suyas como amigos o familiares no lejanos. A Rafael le agradaba conversar sobre ese asunto y babeaba como un niño en las explicaciónes que le hacía a Dobleese. El sabía que el estaba listo para ser agente-palero de Balá pero sentía vibraciones de dudas que pudiera ser un legionario. Dobleese y Felo se ausentaron del play que miraban al juego de pelota. Tenía que darle algunas confidencias al cabo Dobleese,
--Oye Polín, cuando estuve en prisión en el Penal, me sacaron para hacer unos trabajitos, cuando lo hice de regreso me quedé dormido y al despertar me jallé
uniformado y a mi lado una caitera conteniendo mis nuevos papeles y jasta una papeleta de 100, pesos.Yo no comprendí ai principio pero dispués entendí ei mensaje. Pero ai que oividai lo qui ti je dicho poiqui es peligroso contailo mas palante-- Sei de este seitoi militai es muy peligroso y comprometedoi, lo que te estoi contando debe evitailo borrándolo dei viejo pizarrón de la memoria familiai pero sí cabo, llevaila a la memoria militai Quiero que lo que te conté quede como si no joyiste nunca. Te dije que sólo los come hombres caben en este oiganismo, los jemos coitados tetas, orejas, en fin individuos con instintos de carniceros.. Capaces de comei de las vísceras de su mujei. Ei úitimo que ingresaron, era un individuo de menos estatura qui Rola dei tamaño de la mesa qui ve ahí, mi más ni menos, se movía con la agilidad de un conejo ,brincaba empalizadas tan aitas, oiga cabo ei tipito ya es oficiai, poiqui además lee tres lenguas, abre cuaiquiei candado y cerradura con un pinchos de esos qui usan las mujeres en los moños…Estaba condenado poi habeile sacao ei mondongo y las asaduras a una vaca sin habeila matado pero primero ahorcó al capataz en la pueita dei corrai. Este mismo infernai, enfanaste se sacó un ojo de tanto estrujaiselo ai querei sacaise una paja.--¡Cómo!
--Así como lo oiyi de tanto cucutiailo se lo sacó. Finaimente amigo, --decía Felo—poniendo el brazo derecho en el hombro izquierdo, para sei miembro de aquella escuela ai qui sei asesino o habei matado como es ei caso mío dei qui me arrepiento poi jabei complacido mi joigullo de Varón.
--¡Orgullo de Varón! Dijo en su mente Dobleese—será de Macho! Minutos después entraban a la casa de su amigo Chencho Mora, que los esperaba con un trago de Barvancourt Pasaron toda la tarde y partes de la noche bebiendo también Cleren. Valentino Sabelotodos padre de Nilvano Vásquez, el legionario, subía del Central Amistad, cantando el merengue la Pava Vieja, Terminaba un pequeño ajuste en la parcela Juan Martínez, marcada con el número 313 Este número provoca en mí—señaló-- sensación escalofriante pero que yo utilizando mis habilidades la he convertido en agradable, porque había nacido el 13 de enero, y en lógica simple, también me casé día 13 del mismo mes de enero, y tengo y las 13 hijas mías nacieron Martes 13. Además para mí enero es un o es el mes 13.Pienso qui ese día es ei más maravilloso dei univeiso. Esos pensamientos los manejaba Sabelotodos, cuando las cosas les salían como anillo al dedo, Chepilo casi siempre decía como ¡Tata a Valentín!
El grupo que lo seguía les esperaba en la mata de Anón al lado de la trilladora de café, con media torta de casabe y una cuarta de chicharrones de costilla, como a El le gustaba. Llegó alargando las entonaciones de las vocales y poniendo los acentos como un catedrático y académico, Parecía un Pedagogo Bizantino.--Estamos Bien!--Estamos muy bien señor Chepilo! En coro respondieron al compás de los campanazos de la Iglesia que anunciaba la misa del otro día.--Venga, siéntese esa es su silla, ese manjar es suyo. Nos gustaría que nos hablara del general Desiderio Arias. Valentino que nunca piso el quicio de un centro escolar, pero que había aprendido mucho de nuestra historia, escuchando a su hijo Emiliano que era estudiante Secundario, quien leía en voz alta la clase de sociales.
Sabelotodos, conocía la vida de cientos de personeros y personajes como los Generales Arias, Bencosme, Duverge, María Cabral, Manzueta, Adón, los Puello, Luperón Rodríguez Masagó Antonio Imbert, y Valerio entre una larga lista de individuos comprometidos con el pasado cercano y lejano. Valentino venía cansado pero, tenía mucho que contar, datos aprendidos en los Bateyes del central de la vida y por lo escuchado de su hijo estudiante agora universitario.---Estoi y vengo, cansado como ei burro de María Cena, con ei lomo pelao tuei cueipo adolorío, empero mijos pueido rumiai un poco en los costillares de la historia de las primeras décadas dei 1900, qui son las míos y las dei generai Arias. Para jablai de personaje de esa categoría, y de las páginas de glorias de cualquier país se jace de necesidad, sei un endivío desapasionao, pa podei dai a cada quien lo suyo sin paicialidad pero con mucho respeto. Dejó la silla y caminó poniéndose las manos en la espalda…Estaba listo para comenzar. --Ai Generai Arias, Chepilo se detuvo y mirando un derrumbe, que esa noche con los aguaceros, se hiciera en Loma Moncito, con la manos izquierda buscó el cachimbo y comenzó a fumar enviando una cadena de humo plomizo uniéndose ese con el de la carnicería. Para acudir a la rumba de la contaminación. –yo lo conocí, era jovial tenía sonrisa amable, ei se daba a quirei, ganaba simpatizantes con facilidad. Personaje ilustre no podemos peimitil que cuaiquei musú ensucie la imagen buena de Arias. Fue ei más honesto y noble de su generación, como lo fueron Luperón y Rodríguez. Como ellos no hay bastantes, aunque, dicía mi ágüelo, qui bastante no es mucho. Pero colegimos qui otras estrellas iluminan nuestro univeiso; de su valentía no le diré nada, con ei los Horacistas pisaron finos como los Abueliyanquis con Ei generai Daniei Temían a las revueltas que pudieran jaimai Demetrio y Desiderio en las línea noroestana Mientras Valentino, explicaba a los estudiantes de Bajabonico de las garzas y de los Aromales, en el Seibo el cabo, Dobleese escuchaba las instrucciones de Antonio Turbí y de Demetrio Cedano Suero -- El 23 de Marzo de 1903, el cabo Remigio Zaya dio libertad a la una de la madrugada a los prisioneros, y se apoderó dei arsenal tomaron las calles de la capital, sediento de justicia borracho de intrigas, y de odio mataron a los que enfrentaron sus pasos.--Es bueno—decía Obispito en el salón adyacente al que estaban Suero y Turbí,--que ese plan es de urdimbre de la señora Jiménez, patrocinadora moral y económica de todo el camino del plan . Entre los prisionero estaban Pedro Pepín, y Leopoldo Espaillat La señora Jiménez viuda Rodríguez, entregó su fortuna a favor de la lucha revolucionaria. Desiderio Arias, explicaba Sabelotodos, en Bajabonico de las Aromas, y chupaba la manteca del último cuerito del chicharrón, era administrador de las Aduanas, en Montecristi, protestó vehementemente contra la firma de la convención del primero de enero de 1905, mayor fue su enojo, cuando consideraron los imperialistas que la republica carecía de autoridad, capacidad y recursos morales, e intelectuales para administrar su economía. Como ei veía a través de los obstáculos vio que se enjabonaba la bajadita de las relaciones exteriores, y como una mula se resiste, lista a no continuar sobre el fango y lavazas arrojadas desde las bases norteamericanas consiguió anularla en presencia del Contralmirante Charles Sigsbee. En la tarde del miércoles Dobleese llegó al dormitorio y pensaba en las ideas de los instructores, y como era fanático del azar, no creía en las matemáticas ni en la geometría militar o civil pero pensaba en las actuaciones de Remigio Zaya y le pareció que fuera un estratega militar. Pero como no conocía el significado de Estratega, que adjudicaban a Zaya, entonces se atrevió a cantar -- ¡ese es un zaramagullo-- se rió mostrando los colmillos forrados de oro 24, levantando según sus amigos, el rostro mongólico moreno por fuera y por dentro. Caminaba pero llevando un pensamiento sin imágenes sin sensaciones, porque creía que zaramagullón caía bien a sus ideas entonces masculló –Como Tata a Valentín .Pero odiaba a individuo como Remigio Zaya como a generales de la talla de Arias y de Demetrio, de Pablo Mamá, de Cipriano Bencosme y de Olegario Tenares, sin embargo amaba así se lo enseñaron , a Tachito, Pérez Jiménez, a Batista y a Somoza, Amaba a Santana y a los matadores de Henry Segarra Santos, a los que guardaron a Guido Gil, sin olvidar que es un seguidor de los generales Felipe Ciprián , Fausto Caamaño, Ludovino Fernández Malagón , Alcántara , de Elías W. y Wessin, de Pedro Rafael Echavarría. Lo enseñaron a odiar la bondad y la justicia. Aprendió, sus actos así lo dan como muestra, a odiar lo bueno, la honradez, vive en un cantero de temores y de inhibiciones; defendiéndose tragando zumo de paranoia, como Doblepe, devalúa a oficiales como Aquiles Alvarez y Zenón Ogando. Crucifican a Alvarez por haber dicho que sus “enemigos disparaban por estaba ahí un hombre” antes de morir el 18 de abril en 1903. Dobleese estuvo en múltiples cursos fingía escribir, pero ni leía ni escribía, Dobleese estaba el mismo considerándose, un fraude, una mentira socialmente dañina ocupando sillas como experto congresista Jacobino, no sabía descifrar contenidos de ninguna índoles pero los gráficos y numéricos los torturaban como a un loco en un cepo de madera. Ellos que no son más de marionetas individuos falsos se creían listos, que podían ser miembros de G-2 o de J-23, sustitutos de Doble W Bernardino, de Alicinio Peña Rivera, hasta creyeron ser como Johmny Abbes, se frotaban las manos porque sólo sabían valorar el mal. Estuvieron en unas docenas, de talleres de contenidos bélicos, de tácticas y guerrillas e informaciones estratégicas, contra guerrillas. Podían, podían ser nombrados instructores, como peritos en convenciones en tácticas y estrategias militares, Soñaban, pero despertaron en las patas de las Burras del señor Ireno, y darse cuenta que no sabían leer ni escribir --¡Pero Cómo! A ¿dónde era que yo estaba?, ¿Por qué es ahora que me doy cuenta que para ser instructor se requiere de condiciones que yo no poseo, Conocer la programación los planes, las actividades, de largos y medianos plazos. Hay que saber evaluar los objetivos, conocer los métodos o el camino a seguir. --He pasado parte de mi vida sentado encima de una mesa comiendo ensalada de mieida, estoy enlodado de mieida de tua clase. Soy un fraude, me han hecho un muñeco depravado, mitómano que tonto es sío, ei peifume de la misma mieida, me seivido de agua para labai mi orgullo, faiso. Se lavó las manos y se refugió en el Guariquiten donde estaba Doblepe, y le dijo—quiero hablaite, pero se calló porque la bulla de la máquina de soldar no permitía que Jacinto escuchara, y esperó que este la colocara en la hoja de cartón piedra. Entonces volvió a manifestar—quiero hablaite Jazo -- Hola Cabo ¿qui desea, Cabo? Preguntó y le ofreció una tasa de leche con chocolate. Deseo infoimaite amigo qui he peidido todo ei hermoso tiempo que aunque aprendiendo muchas cosas qui en rialidad no necesito je tao aprendiendo meida qui en nada nos beneficiaran, sin embaigo a otros en inmensa cantidad.
--¿Qué quieres que yo sepa Cabo? -Tueste tiempo lo he pasado Jazo, sentao encima de basura sin daime cuenta qui había debajo un diamante.--Dobleese, háblame con humildad, con lenguaje sencillo. De qué me quiere jablai? Yo no te estoy entendiendo. --Tal vez ha sío demasio taide, me doy cuenta que yo soy un idiota anaifafeto, yo no se leei ni airevez. Jacinto se reía y lo miraba con los ojos de luna llena como queriendo decirle --Tampoco yo hermano, yo no leo ni al derecho. Fue ahora cuando en veidad, heimano, la pueica retoició ei rabo. Ambos se abrazaron y lo hicieron con resignación. Dobleese de todo modo para su adentro manifestó – Ahora no me calló como Tata a Valentín. --también he comprendido que cuando ei sol salía… nunca era para mi, que no era cieito que era para todo, que es mucha mentira dici qui cada pan tiene su queso, tueso es mentira y qui jaunqui ei pobre se levante dei catri temprano, sigue siendo pobre y Dios sólo escucha a los ricos y a los maiditos, esos sí se levantan taide de juna cama de lana y de seda y de algodón. Me doi cuenta que ei cansancio de mis pieinas no es poi ei trabajo sino poi ei tiempo que estuve desconectado de la rialidad. Estoi conectándome a la veidad poi que me doi cuenta qui fue un engaño dicilnos que las jaimas eran nuestra familia nuestra madre y nuestro padre.Toeso es malo, es enfeimizo y morboso, nos convitieron en mususes irracionales, autoimatas. ¡Se dio cuenta que lo que había aprendido era una patraña? ¡Simplemente mentira engaño! –Las Jaimas nunca serán nuestros padres, expresaba en silencio—como sembraron en mi consciencia di autoimata. En los cuarteles estas enseñanza crecía como las verdolagas; los civiles son tus enemigos, explicaba el instructor, tus verdaderos y únicos hermanos son tus armas, coge tus manos y acaricialas, besa el cañón y las culatas, si quiere duerme con ella como la compañera fiel y cariñosa, e ideal. Sí estas ideas son siembras abónadas en la conciencia de --cada joven militar, alimentadas con la regadera del engaño, con rabia y con encono. Dobleese las recibía en su piel como el saleo recibía los aparejos, cargado de follajes envenenados desde el altar de los Dioses dueños de bienes, planifican la muerte de espigas y de fértiles que buscaban escape en las pocilgas escuchando poemas, cuentos e historias... y allí escuchaban canciones contra el Tirano. En los cafetales, en los arrozales, en los centrales azucareros y en los muelles, hasta en las aulas y las iglesias, hasta en los aleros de los cuarteles entran las tonadas y los compases de los rezos que hacían contra la tiranía. A pesar de esos circunloquios recordaba a Chencho y a Sabelotodos con sus exposiciones, recordaba a Patica de Chivo y los charcos de Charajima, ahora bebía con Jacinto Puente y Puente. Pero Jacinto no llegaba a las borracheras por la misión de oliscar a los de sus barrios… Era un Bucanero falseaba los resultados Doblepe no se creyó como Dobleese una ficha, ni una caja de bola, de la maquinaria de la tiranía ni los gobiernos colorados, Si quiso ser de la dirección general de investigaciones, pero como lo habían dicho ellos mismos, no sabía descifrar pensamientos gráficos. Doblepe sabía nadar y pescar en las aguas sucias y agitadas --Yo carezco de ética no tengo moral, soy un objeto venal, me vendo y me compran; soy salvaje, orino la cantera donde crecían las cosas nobles. Las virtudes. ambos aman las espinas de las rosas y las pelusas de la tunas Las tunas y a las rosas las pisoteaban.
Llevaban varias horas, en la casa de Jacinto, se acomodó en el alero, de una pérgola mientras veía que Doblepe cosía las bocas a ocho sacos de maní.--Vea Cabo- dijo Elodorita, bébase esa tasa leche, ese mismo día Dobleese acompañaba en patrulla a otros tres, tras las huellas del virtuoso guerrillero urbano Dr. Plinio Matos Moquete, en cada paso de cada soldado, el odio al guerrillero crecía, sin embargo, ¿por qué odiarlo si ni siquiera lo habían visto?
¿Qué daño habrá hecho el Médico, de qué será dueño, guardará los planos de los pozos petroleros de Charcos Largos, tendrá la fórmula contra el temor y del miedo, del hambre y de la pobreza, tendrá el jarabe que cura la maldad y la injusticia? Persio Pérez caminaba atento a cualquier llamado de los superiores o para evitar caer en sorpresas, pensaba diferente al sargento Doblepe y del cabo Dobleese. Era enviado donde el peligro era mayor. Pensaba en los derechos ajenos, cumplió 12 días retenido por tener en su cama un retrato de Benito Juárez y terminando de cumplir 15 en solitaria por escuchar el programa radial Tribuna democrática del Partido Revolucionario Dominicano. Pero a Dobleese felicitaban por tener fotos de los doce dictadores, sanguinarios a quien daba pleitesías y loas; emulando en cantidad, a los asistentes del Maestro, de la América en los espaldares de su cama. Se ufanaba de tener un altar con los perfiles de 12 santos de la muerte y del dolor Entre los varones, tenía a Porfirio Díaz, a Fulgencio Batista, a Marcos Pérez Jiménez, a Trujillo, a Duvalier, a Somoza y con espejuelos a Ranfis, a Balaguer, a Johmny Abbes García.
Valentino continuaba con los muchachos en Bajabonico de las Garzas hablaban de la historia como era su costumbre y lo hacían en una filosofía ruralita, de contenido alguna vez pueril. —Generaimente ei hombre y la mujei, doblan ei orgullo ante ei creadoi ñámese como se ñame lo jacen sin miedo y la clara, ni poi principios éticos ni religiosos o morales. Macho o Hembra persigue la luz temen como ciego de la sombra poi eso libra diariamente batallas enoimes contra los vientos maléficos de la oscuridad., ama lo verdadero y lo bueno, aigunos se convierten en asesinos, ambivalentes timadores, en engañadores vulgares. Los estudiantes se interrogaban de ¿dónde don Valentino sin ser lector, hallado tantos adjetivos para calificar las ideas de su conceptualizaciones? mostrando ser un individuo sensible a los influjos y las energías que pululan en su entorno espiritual, movió la cabeza, para señalo—engatusan hasta a la abuela de sus nietos, marrullero de siete suelas, embaucadores mentirosos --Pero por ¿qué si el hombre conoce que el fango corrompe se baña en el? -- No mijo, no es ei hombre son aiguno sombres que llevan por dentro la podredumbre y ei monstruo de la lujuria, de la ambición, de la envidia, de la gula y de la avaricia. Es asina! Consumidores de lodo y lujos fangosidad y carroña. Asquerosidades cloacales, engullendo desperdicios escatológicos… son escatófagos, así hay hombres y mujeres dotadas de un ángel que se alimenta de cosas sutiles, de cosas sensibles , de energías sensuales, consumidores de tesoros académicos, de simplezas pero maravillosamente hermosas poesía y sublimidades Nilo intentó interrumpirlo mas, los demás lo impidieron, atisbándole que Sabelotodos era otra persona, en la entonación y pronunciación de las palabras que usaba sobre los conceptos que emitía.--Déjalo, escribió Librado en un cartoncito—fíjate que es otra persona con otra actitud.-- ¡Está bien! Expresó Liano-- No son todos los que beben del fango dulce de la corruptocracia, no estuve en escuela, pero me doy cuenta que en ningún momento como la mujer han sido embaucados y se han confundido en el vicio descarado. Sin embaigo debo obseivai qui aigunos y aigunas pasan poi ei fango sin dejaise enlodai, ni la conciencia ni la túnica Dobleese volvió para el lado de Doblepe para preguntarle—Poi qué cuando andamos de pareja, dime Jazo, veo que tu sacas velas a colores en los bolsillos dei chaleco? -- ¡Muchacho te has vuelto loco de dónde sacas esos tramojos de disparates fuera de ópticas
--¿Pero cómo Jacinto, lo vas a negáis? Y, ¿ese bulto del Chaleco qui es mijito?--¡Muchacho!, muchacho! Te estás confundiendo esos son pedacitos de canquiños para mis sobrino y ahijadas .Puente lo negaba pero sabía que esa lámpara apagada se encenderían con la captura del Doctor Matos Moquete Inició un proceso de masticadera como si comiera, entrego a Dobleese un pedacito de canquiños, que de muestra llevaba en las faldiqueras .Hizo creer que era lo que no era sonrió de buenas ganas y se alejaba tres pasos de Dobleese. --Jazo, Jazo! Llamó contento por lo dulce de la canquiña, ¿poi quí si nos hemos llevado bien decimos qui bebemos leche siendo chocolate? ¿Quí es lo que esconde Jacinto, desde cuándo dejamos de respetaino?
En la reunión con el viejo Valentino los aires se movían de norte a sur y de oeste a este, las preguntas discurrían con la rapidez de la luz y la movilidad del Bajabonico. Hablaban de la ambición, de la Mentira, de la discordia de los llamados pecados capitales, calificados de menores y mayores,--Lo que yo se—manifestó Nilo -- es que no hay ni
menores ni mayores, como no existen los pequeños enemigos, ni los grandes enemigos, porque también conozco que lo que hay es enemigo.
Por los linderos de Naranjo Chino Ireno se preparó para asistir a los funerales de Toñita Patica de Chivo, La Colorada, La Rolita, Taguito, Observó que Altagracia no dejaría de reír desde el fondo del ataud hasta que no la mencionaran por su nombre verdadero. Mostraba una risita satírica muy desviada de las sonrisas satisfactorias satisfactoria ,sínica y chabacana, desde las paredes del ataud llegaba una risa perfumada pero malevolente, salía de los ramos de flores que cubrían el rostro de Altagracia Patica de Chivo, A Ireno le preocupó ver a un viejito que con su legua punta de puñal rojizo humedecía una pluma bastante larga de pavo real para alcanzar las narices de la difunta y como esta no quiso complacer al viejito, que quería que ella estornudara sólo se permitió sonreír También Ireno se molestó con el extraño señor, que preparaba otra pluma pero de ganso para hurgarle la oreja izquierda. Fue a la cocina y trajo dos jarros de café y le ofreció uno al extraño atosigador de difuntos.
Al regreso del cementerio, trajo las burras y las mostraba complacido como si las hubiese sacado de lujosas marquesinas, antes de subir a la mejor vituallada para dirigirse al cortijo de doña Daniela Arias a quien trataba como a una cuñada. Al entrar a la enramada de los aparejos y vituallas saludo a los concurrentes, se detuvo con el señor Miguel Vásquez quien castraba a Caifá, chivo semental del cortijo referido.yo estoy como los burros sin amos—respondió Ireno Bonilla Ireno comentaba luego mientras tomaba café que era criminoso maltratar la carne del animal que luego serviría de alimento, se refería a la manera que empleaba Miguel Vásquez para eunucar al padrote de la familia Medina Arias, empleaba un garrote de limón para machacar los testículos de Caifá. –Eso es una barbarie castrai con madero es una monstruosidad, Cuando yo he tenido que podai mis machos lo he hecho con espolones de carey o con espinas de limón. Las que mejor me han quedado son las que he citado, pero goipiai a un animai, eso no está registrao en la libreta dei señoi es un aito más qui de irracionalidad, de saivajismo de Maica mayoi
Ireno era algo solitario tenía a Juanito y a Jacinto, parecía un anacoreta o un ermitaño, ningunos estuvieron en la escuela, sumaban y leían habían aprendido como un arte per. Se. Laboraban en los cortes de caña fueron escogidos como buenos sembradores, recibieron pergaminos y palabras que en vez de estimulo pasaron a ser de apuros y de agobios. ERA día de calores de conciertos de chicharras y de grillos, la tibias brisas movía los recuerdos de Ireno que sentado en la sombra del algarrobo centenario, recordaba al viejito que cucutiaba las narices de la difunta Patica de Chivo, y creyó que era El en una dimensión no tan lejana. Quedó en trance y envuelto en arroyos de tibias babas se abrazó con empeño en los tobillos de un profundo y sagrado sueño. Hubo momento que caía desde El ANGEL, y desde EL NIAGARA. Daba tremendo brinco al despertase. A pesar de tener como Popeye, un ojo abierto, y el cachimbo mordido con los únicos dos dientes que le quedaban, vio que del cerrito La Pocilga, bajaban cinco individuos que parecían tres, y tres que parecían cinco por la forma no se atrevió definir que además de la escasa visibilidad, llevaban sombreros y gorras de picos largos aunque por el porte aseguraba y creía que eran hombres de Georgito Heinsembert. El hecho acontece cuando en la velación o velatorio de un pequeño, del lugar, manigeros alegaban haberles ganado partidas a los dueños de la casa. Habiéndose negado a pagar la pelea fue agenda y servicio de inmediato. Lilo que había herido de muerte a sus primos José, agarró montes y caminos, en la persecución de este hallaron el cuerpo de Lorenzito Paulino Bonilla en la cercanía que decir de mucho era desfondado. Los insectos y otros animales Necrófagos iniciaron las acciones de bocaeros invitados por el aire putrefacto emanado del cuerpo en descomposición .Habían apuñalado todo el cuerpo hasta en el fémur, los testículos sacados a marronazos y algunos tendones cortados, como si se hubiese tratados de actos satánicos. .
Para el señor Ireno, los matadores eran descendientes del cerro Pocilga, --Ah, bueno! Murmuró a flor de labios el senescal, mientras atizaba las pailas donde hervía botellas de leche de burra, que había parido por la mañana, hacía un quesillo que servía para el ahogo y el asma -- cabizbajo destejía los hilos que impedían tener sosiego a esa hora, pensaba sin embargo en los que cruzaron por el cerrito de la Pocilga-- fueron esos manigueros, tengo pocas dudas, yo averiguaré quien sería el matadoi dei toro negro, quiénes fueron los aimadores de esa masacre. Se rascó la cabeza entonces encendiendo el cachimbo de pluma de carey manifestó—los aimadores, dei muñeco moitai de toro negro, juro que lo pagaran! Más que los Matadores. Los cuervos y los chinchilines hacían nidos en los cuellos de las palmeras, y los becerros en los corrales cercanos a la vivienda del senescal; bramaban convocando en aguinaldo a guarecerse de los chubascos vecinos. .
Dobleese, días después, entró a los almacenes de provisiones compró una libra de clavos, un sombrero, habló con su tío el señor Lorenzo de Jesús Silverio, saludó a Ireno que este rechazó y lo calificó de Carabachí, Chigarabi capaz de pertenecer a los matadores de Lorenzo Toro Negro. Era una Chirusa, a pesar del uniforme militar, que olía a Chiniscuí, y a hoja de tabaco orinado a vinagre y sudor de chimpancé. Ireno recitaba la letanía de arriba abajo vaciaba los antojos en cualquier casa, dormía en cualquier ermita, enterraba la semilla de la jocosidad en cualquier terreno. La cosecha de humor venía de generación en generación creando escudos ante la realidad económica, armaba trucos trampas para sobrevivir en las dos primeras décadas de la tiranía Era muy de mañana, los vecinos de Naranjo Chino, lugar ubicado en las hondonadas y vericuetos, encaramado en el lomo de las cuadrillas, septentrional a menos de 18 kilómetros de la Poza del Castillo y a 31 de la más vieja ciudad del continente como de la desembocadura de el más antiguo río de las ínsulas coloniales caribeñas antillanas caribeñas.
Ireno columbraba la madrugada desde la cama, bebía del aroma de todo el café colado del vecindario Chinero, aseguraba distinguirlo cual sabueso policía atisbó el alba que como las lenguas de los fogones eran amarillas, lenguas de oro relucientes Minutos después estaba sentado en el banquito hecho con puntas de palmas por los apeceistas, por los miembros de la Asociación de peregrinos de caminos, ( APC) inaugurado por el segundo alcalde y los principales miembros de dicha junta comunitaria de asociaciones de compadres y comadres y de los amigos y tutores de los centros escolares.
Las lenguas cálidas de fogón, se retorcían a la vista del señor Ireno, por las materias resinosas que constituía la leña. Para él eran largas bayonetas de las usadas por los guardias Lilisistas y Horacistas en los años pre dictatorial. --13 años tenía yo, cuando Jacobito Lara le entró a tiros al presidente Ulises Heureaux. Ese muchachito, que luego en ei parque de Moca se suicidó, mató al untao. A pesar de estar pensando en lo referido comparaba las lenguas de fuego con los fusiles, además con los Machetes ardiendo en fuego que los imperialistas emplearon para torturar a los revolucionarios de los sobre vivió el legendario Cayo Báez. Así lo tomó por sorpresa el sol siendo las 7 de la mañana. Los caminos se iban oreando con las pisadas de los transeúntes caminos al río, a la carnicería, al play y cualquier lugar o a las pulperías pero el sol con su lengua amarilla, se convertía en un rodillo tan pesado como las dictaduras de Somoza, de Trujillo y Fulgencio Batista. Por haberse secado para las 10 el banquito estaba lleno de compradores de piltrafas, de lenguas, de trompitas, orejas y patitas. Y restrojos y desperdicios que Lorenzo había picados para la venta de fin de semana.--Yo pienso que es demasiada caigne, para este lugai – dijo Polo Cruz quien se había convertido en uno de los pichert más buscado en los municipios del ala oeste de la provincia. --Pero sucede compadre Polo, que Toro Negro les debe a los misterios dos mondongos, un par de riñones y dos hocicos porque hizo una promesa a las ánimas con tal que su mujer no se le muriera de parto.--¿Cómo dijo usted, campa?
--Así mesmito fue, como lo oiye! Ni menos piroo tampoco más -Era mucha caigne para tan poca boca!
Era casi la diez Ireno dejó a Lolo hablando y se acomodó bajo de la mata de anacahuita pensaba mientras veía las viajeras nubes en la transparencia de sus sueños juveniles, parecía simplemente un adolescente. En la carnicería Polo y su compadre seguían refiriéndose a los compromisos de Lorenzo con las Animas y el parto de su mujer la que según está—vivita y coliandera--Seleccionó el día dei jefe pa pagai su compromiso, decía Alfonso—pero con vaga energías y desgano, el era de esa tabla y así era cuando mayor empeño ponía para hacer conocer sus veidades, que según muchos la guardaba con rencor.
--Ireno, Ireno!—llamó con mucho empeño Margaro, quien miraba que Ireno, se metía una pluma de ganso en la oreja derecha., Échale un puño de sal al fogón pa evitai que se aposesionen de las tres piedras los malos espíritu que rondan en ei corazón de los mataderos.
--Usted sabe primo que no creo que esa sea así, lo que yo creo tuei mundo lo sabe, Eran casi las diez de esa mañana, mientras echaba la sal al fogón pensaba en las viajeras nubes y en su amada Celina mujer que venía amando en silencio desde la primera dolencias femeninas. Celina hija de Rumaldo Oquendo, dejaba cojo a los hombres, que en cruces de caminos la seguían y bizcos a los que se escondían para mirarla Detrás de puertas y ventanas, cristales o en los breñales y tabuquitos y matorrales. .Pasaban de las once y treinta, llegaban a la carnicería las algarabías y los ruidos desde el play y desde la casa de Juanito Bonilla, donde escuchaban la cantada de la Lotería Nacional. Los equipos que jugaban eran de la Aguaita y otro de los Bateyes La Grúa y de Baraguana, Ireno estaba confundido porque la manera de pensar en Celina no le permitía coordinar como llevarse libra y media de Chicharrón y tres o cuatro de pierna de la cerda papacota que el había echado mucha agua de sal en el basurero se su cortijo. .Con sabor a delicia llegaba el olor hasta donde preparaba sus estrategias geométricas. Se paseaba de un lado para otro hasta debió dar las circunferencias del perro cuando quería dormir, hacía tramoyas y deliciosos que destejía por inadecuados y delatores, entraban a los vasos gustativos y llenaban los del deseo caminó para donde se movía la multitud que no pasaban de tres docenas de contempladores o velones, los miró a todos y creyó que sólo tres comprarían. Fue a los burros reviviendo sus tácticas y proyectos, además de la bandejas de los Chicharrones había otras con yuca, riñones rabitos orejas y plátanos fritos muy apetitosos El olor picaba el gusto y mordía la impaciencia de Ireno. Olía demasiado entonces se preguntó--¿Demasiado será bastante? Al terminar el juego de pelota, los perdedores ocuparon asientos en la enramada de Juancito Bonilla, y comieron de Locrio por la lamentaciones de Gerardo Ireno rodó hacia su presencia --Peidí tres pesos oro—tres pesos peidí en ei 39 y salió ei 40 bolo, bolito, me arañaron la cara, ei 40 ¡Vaya usted a vei! –manifestó Los ojos y los labios del viejo marrullero, por la satisfacción se movieron como los de un camaleón salta cocote, caminó un poco más, hacia donde estaba Gerardo entonces le preguntó—Peimiteme preguntaite Geraidito, y se cuadró como un soldado de los de Món Cáceres poniendo su destartalada figura, como una estatua de Madera daba un ángulo complementario, inclinado sobre el madero de Naranjo --será veidad que ei premio mayoi fue ei 40 bolo, dígame que de cieito es? El viejo ponía una voz metalica algo electrónica, pero llena de malicias y de satisfacción
No dijo más nada caminó con el mazo en la mano izquierda, en frente de la casa de Juancito hizo la señal de la cruz, mostró una sonrisa macabra casi Maquiavélica, Margado que lo vio reír --le preguntó ¿qué le ocurre Ireno, qué está celebrando, apostó al ganador de la Pelota?
--No hombre Margaro, je, je, me caigué con ei cuarenta, me caigué de cuaito con ei 40 de la lotería,
--Siendo así Compay, pida poi su boca, esa es su medía pida y no se apure La gente a pesar de haber estado en grandes espacios y centros educativos, a enormes palacios religiosos y de otras índoles, no deja oculta los estropajos hogareños, usaban la mentira como un mecanismo de reforzamiento como muleta facilitadota como lienzo para esconder el pudor, de lo bueno y de la verdad como de los útil, Para esos días de la muerte del Toro Negro, en el Naranjo Chino, un grupo de cinco residente en esos predios, formaban la junta de los fetichistas, boyeristas y zoofilíticos. En la noche de San Juan, cuando retornaban de la fiesta en la propiedad don de los descendientes de don Juan de La Paz, Medina en Bajabonico de los Guanabanos, tres de los cinco abarrados al siguiente día dijeron haber visto al señor Ireno cosechar incesto con una de las flores de su jardín, con una del Jardín de sus amores. Esos comentarios anduvieron tan rápido que hasta el jardinero se enteró y consideró que había interés de marchitar el viejo vergel sin molestarse lo consideró como de una erupción ignominiosa. La exasperación del viejo aumentó cuando se le acercó Bonifacio de la Cruz Bonilla y violentamente le dijo-- Oye viejo socabao sin vergüenza , peiveitío --ei mundo entero lo sabe que eres ei marío de una de tus florcitas, Don Ireno en aparente mal de ira se tragó el cabo de cigarro que fumaba y como se hallaba a varios metros, del agresor, cuando iba a cobrar la afrenta lo vio volar las alambradas pero sólo pudo vocearle—Dos lomas no se juntan , pero dos paisanos pueden caise en ei mismo chaico Había llovido mucho, los caminos enfangados hacían muy lento y difícil el andar, dirigía sus pasos para la casa de Margaro tendente al pago de la carne y los Chicharrones, que hubo obtenido en crédito, sintió el olor a lazo y a granos de palma el perfume del que realiza ese oficio, llega primero, que el trueno después del relámpago. Se preparó para esperar al agresor que de acuerdo con la experiencia se encontrarían encima del paso y en efecto cuando Ireno subía el pie izquierdo a la costanera, el sobrino ponía en el otro extremo el derecho Era el único medio para ir al otro lado, no se percataba de que estaba frente al rostro del hombre a quien había herido en el orgullo de padre honrado. Bonifacio que desde niño se enamoró de la hija de don Ireno, no levantaba los ojos de donde ponía los pies, no miraba al frente. Que lo estaba esperando y a menos de un metro, del alcance de sus brazos Ireno le dijo-- Se lo dije, le dije que nos juntaríamos. El corazón de Bonifacio se encogió de golpe al oír la voz del primo Ireno, --Fue ahora—continuaba, que el hambre se juntó con la necesidad, le manifesté, Bone, se lo notifiqué dos lomas no dos cerros no pero dos paisanos sí. El Machete que tenía Bonifacio brillaba y el de Ireno espejeaba , tenía ganas de pegar el plan en la espalda del senescal pero las rodillas eran torpes en esos instantes ,prefirió lanzarse al fango en vez de echar una batalla que no estaba seguro que ganaría,, Ireno se reía viéndole huir como una Chirusa, como chisgarabís Otros días que llegó del astillero, donde dejó tres docenas que tablas que labrarse Puso en sus lugares las herramientas, bebió un poco de agua fresca se encaminó donde cocía María y le dijo—Oye María, ¡hazme algo de comer que traigo mucha hambre!. ¡Que es de hambre que me muero! María que cocía los pantalones de Jacinto y de Juan sin ni siquiera mirarlo respondió—háztelo tú poiqui estoi muy cansada -- me lo hago yo contestó con rapidez el marido. Se marchó y desde el astillero lugar donde labraba las tablas de palma, regresó con los materiales para cocinar. Esmerándose en el adobo al terminar y luego de esperar que a su mujer se le pasaran los caprichos y los deseos de pelear, se preparó para decirle—como no quisiste jaceime la cena, yo que a usted, la consideré como una floi perfumadita coimadita de una esencia amorosa sin embaigo hoy se convieite señora mía en una mula y de entradita mujei me patea mismito buche, como no jizo justed mi cena yo la amaniataré, la voy a mamantiai con esta soga de cabuya. La amarró por la cintura le retiró todas las ropas, la contempló y la encontró más hermosa que en todos los momentos. La colocó en una posesión desconocida para ella, sin poner sus manos la poseyó como un vulgar estuprador delincuente. María a pesar de ser abusada humillada, ultrajada, lloraba sin recompensas y sin esperanza se sintió complacida más que siempre. Aigo ocurrió…qué sería? Se inquietó. Treinta años después Ireno dormía en el cuerpo de la viudez, cada noche sentía la presencia de María pero sólo esa presencia crecía cuando en la víspera había dado a su cuerpo un despojo de las energías de las acciones cotidianas bañándose con romero e incienso dormía al lado de la madre de Jacinto y de Juanito Cenaba harina de maíz con asadura hígado y ensalada de aguacate con pedacitos de arenque y huevos de carey. Fue al manantial a la vuelta vio que en las raíces del antiguo limoncillo estaba sentado el jovencito Floycito el hijo de Serapión Medina. Y qué jace Floycito, usted sentado en mi mejoi raíz como si dueño fuera del Cortijo? --Yo, yo Ireno vine a contaile un sueño que según mi parecer es de su incumbencia.
¡Anjá! –dijo Ireno sacando de la boca la mitad de una sonrisita medio Maquiavélica, irónica y muy peligrosa.
--Presiga usted Joven -- se manifestaba aparentemente alegre.
--Anoche me acosté sin cenai, poique en casa lo que había era rulo mocuepavo y ese batimento me produces varias piquiñas y aleigias. Me jaité con un te de albahaca de la moradita y ai momento quidé enredado en los brazos tieino dei sueño más profundo que sentío en mi coita vida, señoi .Pero mientras .yo satisfacía la necesidad dei descanso y estando acostillado en los hijales del sueño reparadoi lo hallé inesperadamente enredado en los brazos de Celina la jija de Rumaido de la Cruz. Aceiquese pa que vea señoi la caiga que llevo en ei hombro, dígame qui es lo qui usted ve? Pero hágalo con honradez. Ireno levantando el índice lo pasó por los labios se fue acercándose que con apuros fue para complacerlo. Entonces señaló—Pero bueno jijo alargó la palabra jijo, con la sensación que padeció al ver la herida que en el hombro tenía Floy Pero bueno Jijo –repitió cómo te hiciste esa gurrupéela? --Fue usted que en el sueño me lo jizo, pero no comprendo como transpilgó, como se jizo en mi cueipo? Era un simple sueño, pero era un momento duice, que me llegó a empalagai mi deseo varonil. Ei veilo aramelaito me quitó ei doloi y despeitó ei gusto que yo tuviera poi muchos años en doimilación, sabe usted Ireno? --Mira muchachito, muy emocionado dijo Ireno, los sueños, son simples goteos de emociones resbaladizas parecidas al plumaje de un gallinero que no pudo volai y que poi su desnudez vive aveigonzada sin embaigo créio que en veidad tuviste una aleigia y piquiñitas o como tú la ñame poi esos brebajes que cenaste Jai tenei Jambre de segundo grado era ai trisito fiebre, era calentura duice, muy parecida a la aiferecía infantil jai tenei Jambre de comía fue de muchas sueite qui sólo ti jiciste ei gurrupelazo jese Floycito no piense usted qui fue otra cosa
--Déjeme dicile viejo, pero no se espante demasiao que es a mí qui ei doloi pellizca, si seño: Celina tiene a Geraido y a Machacho como sus enamoradios, tueitico, tueimundo lo sabe, sabe qui ella le sonríe jasta ei cansancio.
Ireno sintió que dentro de su edificio humano se caían las sillas de la paciencia, pero para Floy quedaban paradas y fue por esa razón que le dijo, palabras de simpatías de agradecimiento –Señorcito Floy señorcito Floycito Sosa, pa demostraile mi simpatía entremo a desayunai, entre conmigo a desayunai cogombro con ajonjolí y un pai de albor dei Pan, o lo que es lo mismo albor de la Castaña., peiro si no le agrada, puedo propoicionaile guenpanes con leche o quesillo de burra recién decalotreada y de postrimería un buchito de café qui yo mismo colé.
En la noche qui era luna llena en un ambiente pantomímico y de teatro ruralita, de un solo acto y no más de tres actores Ireno empujo la silla de 5 patas para donde había menos iluminación .Tomó la escoba por la cintura, contempló por segundo los cabellos desordenados, y con el ritmo de su mente hacía un mantrás que repetía de esta manera: Celina es mi amor, Celina es mi pasión Celina es más que mi soi ¡Celina! Para él la escoba era la mujer que amaba miró los largos cabellos, la cara de huevos los labios rectos y húmedos tan puros comenzó a hablar Celina, ¿poiqui tiene los cabellos desaiborotados? --Pero Ireno-- contestó La muchacha, será desaliñados y es que no se da usted cuenta que fue para usted que los he arreglaios
--¡Ah Bueno! Ah Caramba, yo si soy pendejo, yo creí qui era otra cosa Celina! Je, je, je, rió de profunda emoción. Yo soy saleo!--¿Cómo qué cosa, Ireno? --Pensé que me estaba engañando con Geraido lo decía tomando las perfumadas y mullidas trenzas se sentía un niño al ver que Celina encogía los hombros de corolas, y dejaba caer pizcas de humedad de sus labios senescales pero cargados energías hedonísticas y las miradas las cambiaba de púdicas a lasciviosas y lívidas. Ireno no le importaba lo que el público hiciera o Dijera, inclinó la cabeza recibió el beso que por muchos tiempo buscaba -No Cielito de mi veigel, de la campiña. ¿Cómo podría traicionai a un endivío como es usted? Es usted y Patica de Chivo lo decía antes de panquiaise, jiasta Lengua Suave qui era usted un hombre Maica Mayor. Aunque no eran buena garantía acojo como buena su aprecio. Pasó la noche bailando con Celina acurrucado en los largos cabellos usaba palabras bonitas, cariñosas alejadas del deseo carnal, se inclinó para pedirle la poesía de Pellerano Castro.--¿Cuái será Celina? ¿Cuái será Celia? Je, je reía cuando le decía Celia, ya con esto tenía para dormirse, y el lo sabía,-- Será la Criolla que habla de la burra de caiga? --Ah sí ahora la recueido. Es la que dici Yo quisiera mi vida sei burro de caiga y llevaite ei agua con qui tú mi trigueñita te baña.
--Esa mismita, cielo, de mis ataideceres,
Ireno pensaba continuar, pero al darse cuenta de que Celina, se acababa de dormir no continuó y se limitó a decir Dicen qui Machazo y Geraido te atosigan ,pero con Gera, con Geraidito puedo negociai pero con Machazo, con Machazo jum.., mejoi amuelo mis machetes! En los entornos de Bajabonico de Altamira, territorio presto para la guerra de guerrillas, específicamente en Hervidor vivía una mujer que era el susto para niños y preadolescentes, hasta luego de su descomposición anatómica y que se valían de su fama y de su prestigio. Para que los hijos traviesos no esperaran la noche en los caminos, y que estuvieran listos en horas de bañarse para acudir para los mandados y para los centros escolares. Su nombre era Moche Lina Merejo pero para los fines de asustaderas infantiles le decían Mocha Caco Los niños creaban las imágenes de horror y de terror y hubo que murieron a consecuencia de orientar la conducta de los niños, en la presión de ese remedio malsano y maldito. Mocha Caco recibió ese mote por ser vivaracha peregrina, pequeñita y de cabeza acuífera, hidrocefalica, bebía en todos los Ríos y arroyos también se lavaba las manos en todas las aguas, sus mejillas era pálidas y tenía los pies muy grandes, con uñas que nunca cortó pero que alcanzaron el parecido a las del mono perezoso
--¡Muchacha, duérmete, duérmete, que por ahí anda Mochacacos , la niña de sólo tres años bebía del seno de Adelaida su madre, y se prendía de la teta izquierda con la boca cargada de miedo más que dientes Dobleese llegó esa tarde al entierro de Mochacacos en los aleros del Charco de la Piedra, en los entornos de Río Grande, y de Pozo Prieto. Las sorpresas para El no terminaron estando listo para degustar del café de la difunta contó con los dedos utilizando también los de los pies, docena y tres cuarto de niños y de niñas que se encaminaban hacia el cementerio para pegarle fuego a la tumba de la difunta.
En la casa de Evaro y Daniela Arias Ireno hablaba de la Burra que se había extraviado en la finca del padre de la abuela del Negro…en Jicomé de los Torres Municipio, Esperanza, Yo haré el viaje con el Negro si ustedes me lo acreditan, y en los que pita un fohete, la jallaré. Anina es—dijo, y siguió andando sobre la salea, que según sus aprehensiones era una princesa indígena quizá Taina o Siboneya.
Cinco días después Ireno y el Negro ascendían sobre los costillares de la cordillera Septentrional, pero como en el paraje Rancho viejo de los Guananicos, osaron alimentarse con guineos maduros, dulce de coco con leche y de compaña media libra, de bombones y una y cuarta, libra, de Chicharrones, la constipación era tan segura como la descomposición estomacal de los dos, que llegaron sobre las tres de la tarde por que se la pasaron del aparejo de los animales a los improvisados sanitarios para evacuar los gases del desayuno que ingirieron de camino.
Al siguiente día en el teatro de las acciones de peregrinación, en Jicomé de los Torres, Ireno dijo—Seguro estoy moidió ei lazo en busca de pareja, de seguro que anda poi los predios de Maiza. Horas de búsqueda entre Castañuelas y Maizal, una patrulla formada por seis primos hermanos nietos del señor Torres González se fue internándose en la arboleda y pastizales, cambronales y guazábara llegaron después de las doce, a un peladero o revolcadero de burro, el sol tostaba las hojas de palo de leche y de guanábano Salomón y Juanito hijo de Buenaventura Torres, hermana de Daniela, llegaron primero que El Negro y Edilio, esperaron que Héctor y Miguel aparecieran al referido peladero conduciendo la burra pródiga que al sentir el olor a polvo caliente rebuznó, y se bañó de inmediato como cualquiera jovencita burguesa en una perfumada piscina sauna .
Los 6 de la patrulla entregaron la burra al señor Ireno quien la llamó Anina al verlo corrió hacia donde se hallaba su amo como Platero, hacia Juan Ramón Jiménez,.Dejaron la estancia del abuelo de los seis, en los aleros y lindero del Cortijo del señor Octavio Vargas, se veía reluciente y el señor Ireno la peinó con sus manos como si fueran las guedejas de Celina, al sentirse acariciada con la presencia de su amo movió las largas orejas y dejó en los anillos del suelo lo que para ella fuera la vergüenza .Estornudó, tosió como si tuviera muermo pero con el ruedo del pantalón como si fuera en la cara de Celina, secó los labios.
En la tarde de ese día retornaron por la cordillera, cuando pusieron pies en el triángulo de convergencias de Esperanza, Navarrete y Altamira, los tres municipios de las tres provincias Valverde, Puerto Plata y Santiago de los Caballeros. Según el Negro, era perfumado el aire esperanciano aunque perfumado entre arrozales, platanares y dulzores era devorado por la boca de los vientos aromáticos de los andullos de Navarrete, Así mismo los vientos alisios egresados del pico Isabel de Torres, regurgitaban los eructos de los guarapos del central Amistad y de la licorería de vinícola del norte.
Había llovido el polvo rojizo de la lomota se había convertido en lodo y fango, La burra y el señor Ireno desconocías esos resultados. El animal desconfiaba y dio tres resoplos y quiso resistirse a estrenar la ladera hacia las pendientes hacia Fundación de los Baños, en Rancho Viejo de Guananico de los Montes y de los Cerros.
Meses después Anina era madre de una acémila ágil y vivaracha, Dobleese, cuando vio que era muy grande la preñez apostó 20 pesos a que el animal paría mellizos, pero el fallo fue mayor porque aseguró que el desembarazo ocurriría jueves en la noche. AL enterarse que había parido se molesto dándose cuenta que no pegó en ningunas de sus Pretensiones. Dobleese se alejó de las trivialidades y juegos de los aleros de la realidad familiar. Fue entonces que Estando en la fortaleza encontró un telegrama donde lo enviaban para Polo municipio de Barahona. En Paraíso, 15 días después lo enviaron hacia don Juan de Monte Plata, específicamente en el DIAN. Cerca de Batey Antonci lugar de nacimiento del ex sacerdote y presidente de la república
el Lic Fernando Arturo de Merillo, apodado, PICO DE ORO, por el florilegio, que ponía en su limpio y agudo pensamiento..De inmediato Dobleese fue llevado al cuartelito de Batey San José, en Chirino Monte Plata. Cercano a Batey Ceyba doce y Rancho Arriba, de Los Morenos en Cabón de La Victoria… En menos de tres provincia, anduvo tres provincias una sureña y dos del Este
Casi sin terminar una misión era cambiado como fue el caso que sin lavarse los polvos y las cenizas de los cañaverales de Monte plata, lo envian a cumplir una rápida misión para la laguna Cristal, en los linderos de los Haitises. Según anónimos descuartizaban las reses que en
helicópteros escondían en grandes habitaciones rurales en una finca cerca de los potreros del CEA en los centrales Ozama, y de Bocachica Las cantidades de reses que descuartizaban, las carnes movida en medios aéreos las llevaban a los comedores económicos y a las fortalezas, estos traslados eran tácticas de ablandamiento a los más duros de los metales, y Dobleese era como un pedazo de hierro o quizá de una aleación de fango, moho y ceniza. Era obvio que esos traslados, lo colocaran como anduviera anduvieran, encima de mulas mañosas capaces de romper las jáquimas Dobleese que se había enfermado padecía de indigestión intestinal, provocando actitudes volitivas, emotivas y conductuales .En su rostro retoñaban las raíces de los primeros actos del consejo de Estado cuando por vez primera Dobleese había entrado a las escalinatas del Palacio Nacional para del presidente de la república recibir, las llantas de un pequeño Yeep Marca Willy. Acompañaban al Capitán, Celso Dobleese, que se bahía posesionado para recibir del presidente Díler un carro Austin, luego supieron que el Díler era el verdadero y genuino dueño todos los vehículos de esa Marca. Aquella noche permaneció pensativo y en la madrugada, muy ensimismado por querer ser dueño de un carro Austin.
Mil novecientos noventa y ocho 10 de mayo, en la madrugada, habían llevado a Dobleese al centro clínico del Doctor Florentino Flores en los entornos del curiato de la Iglesia Las Mercedes, en Imbert. Padecía de Sífilis Amarilla, cosecha muy prolífera en los canteros y hortalizas trujillistas pero que esa abundancia propia de las Dictaduras, continuaron en la “Dictablanda” que surgió hasta el 1978 en el territorio nacional. Y por ser agente de aquella horda armada cancerosa, asqueante, del último año de la tiranía y de esos doce años colorados hijos del escritor, ensayista, historiador y poeta doctor J. Balaguer .Pero se creyó transitar por los laberintos y recovecos del placer haciendo y deshaciendo en la corridas y fiestas, en las raíces pútridas de una edificación asqueante en lazos de quijadas y de corcovas proxenetas doctor Florentino, ese mismo, tenía encima del espacio que divide lo humano de lo animal, acostado como un cuerpo viviente las energías espirituales del Doctor José Fco. Peña Gómez que traspasaba al mundo de los difuntos. El teniente Apolinar Silvano Silva, que veía en la cara del médico preocupación más que sabiduría .Veía angustia dolor y hasta torpeza veía. Creyó que algo muy grande había ocurrido entonces preguntó.--¿Qué le ocurre a usted Doctor? Con una actitud gangosa el médico respondió--… Me, me ocurre que acabo de enterarme de la muerte del Doctor Peña Gómez. Y por esa razón continuó el señor Florentino que además era dirigente y militante de la organización Socialdemócrata Esa tarde a pocos días de las elecciones, me han consternado, y todas las gentes sensata, dijo y miró al paciente en los ojos. –Quédese tranquilo que le enviaré una enfermera, para que lo atienda. Pero, no es usted de Bahabonico de las Garzas, conoce al profesor Arias? –Claro señor Doitoi semos parientes cercanos.
Minutos después al quedarse dormido rumió el sueño que
según sus caprichos significaba la muerte del líder y el triunfo de la organización. Deseó saber escribir para comenzar a redactar de esa manera—Caminando rumbo al comando de campaña de Angel Francisco, en las calles Imbertolinas, sobre el polvo de un camino sucio y nauseando, llegó al río de las inmediaciones de los Charcos de las Damajaguas. Esperó que los pies tomaran la normal temperatura para cruzar, el agua que corría estaba empuercada, pero que fue cambiando a lechosa, tomando la nitidez natural y muy transparente. Esto sorprendía a la gente que lo contemplaba, ya que cada piedra estaba defendida por un erizo, era un guardián no faltó quien lo llamara Guarda espalda de las piedras el agua corría sobre un impermeable lumínico, sobre las piedras rugosas dejándolas pulimentadas. Los erizos guardaba las puntas de sus brazos y como luces intermitentes enviaban de las intersecciones, energías azules que descifraban las policromía de una esencia semiteodal. Se decidió cruzar y de repente caminaba sobre las calzadas de peñas gráficas, miró para el firmamento y del cenit bajaba un puño muy grande mostrando el dedo gordo hacia en cielo mientas los otros ocultos un nudo parecían, descendía con centelleante rapidez, y al dar con la superficie acuífera se oscureció todo el universo, las aguas volvieron a empantanarse y los fangos se putrificaron, fingiendo ser rosales y nardos blancos, y desaparecieron de cada piedras los guardianes.
La muerte del doctor Peña Gómez, hizo una grieta en las almas militantes de su partido blanco, y como una cortina de dolor enlutó su cuerpo social y político. Muchos paisanos perdieron el sueño permaneciendo en penas, como una pequeña criatura enferma considerada huérfana y llegó la nostalgia, nació la solidaridad, creció la lealtad el sentimiento en aquellos hombres y mujeres, que no comieron ni laboraron simplemente aguardaron el sepelio del que aluna vez sembrara su alma en el corazón del pueblo ferviente de una capa leal y sincera. Haciendo mucho más humanizantes las germinaciones y gestiones públicas, buscando el árbol más solidarios y permanecer en la umbrosía de un santuario amoroso a su recuerdo. Unos dejaban gotear lágrimas frescas en los tobillos vesperales de ese 10 de mayo y otros bostezaban en silencio
lloraron, lloraron como los Norteamericanos a Lutter King como los Indúes a Mahatma Gandhi. Cada pueblo encendió un cirio en su pecho apagado. En cada pueblo hay pueblos menores. Ahora había uno que lloraba, que recibía otras pérdidas, las del 25 de septiembre, las del 21 de diciembre, las de 28 de abril, las del 10 de mayo. Como Panamá lloró a Omar Torrijos los Dominicanos hoy lloran al doctor José Francisco Peña Gómez El 15 de este mes de mayo, los seguidores del fenecido líder Quisqueyano tomaron las iglesias en el territorio nacional y en los ultras mares oblacionaron, gloriaron con sabor a melancolía al apego al que llevó siempre los anhelos y esperanzas a un cielo de justicia y de amor, elevaron cánticos con inciensos y cáscaras y resinas y cogollos aromáticos, salieron de los centros de adoración resignados antes las horas, de ir a depositar parte de cada conciencia individual y colectiva , buscando la totalidad, la consciencia social. Las luces que irradiaban a los Ayuntamientos y al Congreso Nacional no disiparon los asientos oscuros de un pasado de fuerzas, e injusticias. Vencidas por los tornados desfavorecedores de las aspiraciones sociales que impidieron el vuelo de las Mariposas. En los primeros meses en los Municipios controlados por el color Blanco el hedor perfumaba los asientos las oficinas y curules, los capataces dejaban morir las flores blancas y regaban con buenas aguas a otras incoloras y polícromas nacidas luego que el vergel fuera acondicionado previo a las lágrimas que llegaron al río y piedras, que cuidaban los erizos. El humo rompía las nubes anunciando el incumplimiento de las enseñanzas del líder y Maestro .Era humo cenizo, manchado, sucio y contaminado dibujaba en un cielo de falsas esperanzas las caricias en caricaturas y en microbios las rosas blancas enmohecidas. La siembra de cuervos y de camaleones empañaba los surcos de los ventanales de la cristalería blanca.
Dobleese se hallaba a gusto con las atenciones recibidas de parte del Doctor Florentino Flores, director del Hospital del pueblo. Todo el personal daba muestra de hermandad y humanismo y Dobleese sin conocer nada de José Martí comprendió que era cierto que “Patria es humanidad “por vez primera sintió que había gentes buenas en las filas de los Partidos Políticos, que era falso que los partidos eran simplemente entelequias en desarrollo permanente para engendrar encubridores embaucadores mentirosos camuflajeados, saltarines y veletas que engordan las ideas calumniosas para venderla en los simposiums electorales. Quiso darle respuestas a las preguntas hechas cuando les ordenaron matar al doctor Plinio Matos Moquete — ¡Agora comprendo poi qui lo querían matai! Poi sei humano amaba ai prójimo era un hombre gueno, y en ei gobieino capitalista ei hombre que ama ai hombre lo jallan mai y es poi eso que dan lo oiden de matailo Si señoi los esbirros no quieren sabei de los que quieren defienden ai semejante de su misma clase. Aunque cojeaba con el pie izquierdo enyesado salió a buscar informes de los resultados electorales. Fue en el pasillo que se entera que el ganador de laS elecciones en Imbert de los Cañafístoles, había sido un señor de nombre Angel Francisco, hijo de Puerto Plata. En la casa de Juan del Bosque Núñez en Bajabonico de las Escaleretas hablan, mientras su hija servía café a un grupo de compañeros, y lo hacían de esta manera—Pero quien dijo ese disparate? ¿De qué estómago salió ese reguaido? Sueite que tiene letras grandes, en mayúsculas aunque a muchos no le guste, yo Juan del Bosque, aseguro que no es un disparate. Estoy más que seguro, que el Síndico no abandonará su equipo Madre,--Sin entrar en los bejucales de una discusión trivial ni Bizantina aseguro yo, expresó José Plutarco Ramos, que se olvidó ya, no sólo del equipo madre y padre sino de su propia esposa, Quizá no se olvida de su Padre --Que va no cante canciones tan elevadas, las puede desentonar y eso de mal gusto. Tengo por entendido que comenzó la construcción de la casa de sus Padres. Mientras tanto a esa misma hora pero en el parque en el entorno pululaban los conmilitones del doctor Florentino, unos jugaban dominó y los otros discutían y miraban jugar. Observaban a los trabajadores de ornato municipal. Las fichas la golpeaba con mayor energía el jugador que recordaba en el instante de colocarla que en su casa faltaba el dinero para el gas de la estufa. Y otro que no había pagado la cuota del teléfono, pero la que más sonaba y molestaba a los comensales del juego, era la que ponía R, J. al recordar que debía ir donde Angel Francisco o donde el Prof. Arias al Ayuntamiento, para conseguir la leche, para la niñita que nació sin mano derecha.
Arias, quien fuera el Mentor, si no era el número uno… no era el tres programador de las tácticas y metas a corto o a largos plazos del equipo en compañía de Pepe Cruz Henríquez, y a Antonio García, anotaba en su libreta las cosas que entendía indebidas, ilógicas y antipartido propias de troglócratas. Al llegar donde se hallaba Apolinario Almonte, encendió un cigarrillo al tiempo de beber del café que este le llevara de la casa de su madre—Oye Almonte, para que analicemos lo que dijeron Tony Bissón y Tony Amada
--¿Qué pudieron decir? -Cómo que pudieron?--¿Qué dijeron?--Estando nosotros en la Hamaca debajo de la mata de Limoncillo, pues Tony Bissón señaló—Y es cierto que usted cree en Angel Francisco, profesor Arias? No crea en ese individuo agregó Bissón, mostrando sus dientes blancos detrás de unos labios morenos,--ese es un hombre malo! Angel Francisco es hipócrita. Apolinario reía hasta con los ojos japoneses se abultaban según se excitaban Yo,- dijo -- Arias-- desconfío en él, fíjese se marchó para los Patos de Barahona, cuando le entregaron el certificado de ganador – Ya usted le hedía -- dijo Almonte, no le servía para nada, ahora buscará amigos que le adulen no que les sugieran o les rechacen acciones! Cuando el Síndico dejó la biblioteca municipal comprobó que los libros donados por el profesor Medina, estaban en los tramos de los anaqueles, pasó a la Cancha Municipal que, terminaban los obreros de reparar y se preparó para salir hacia la Ceiba en el central Amistad, donde llevaría una Bomba para el pequeño acueducto de la pequeña comunidad que coordinaba el compañero Andreíto Cabrera. En la oficina, ya de regreso, ordenó pagar los imbornales de los barrios de la parte baja de la ciudad…Mientras tanto Almonte seguía conversando con el profesor Arias en el taller de transportación. Tony Amada haciendo alarde de tener asegurado su futuro con el sindico señalaba—Oigan, pues yo tengo que levantarme, antes de las 5 de la mañana, para irme a correr con Angel Francisco, que según mi parecer debemos darle tiempo. --Pienso que en término político se ha confundido de rol desconocedor de sus verdaderos amigos. Perdió o nunca ha tenido el don de saber donde duermen los verdaderos enemigos suyos. Y se deja desviar de miradas hipócritas –manifestó –Agustín Bonilla que dejó la careta de soldar encima de la silla plegadiza y se secó el sudor y luego agregó—Pienso que debemos darle los días que a otros han dado para que coja el piso, luego veremos yo soy un individuo que he sacrificado por el desde la 5 de la mañana, repito, estoy fuera de mi cama para que el haga y hacemos ejercicio, y eso pesa porque descompone mi vida y en pedazo la rompe. --Dígame señor Arias, qué fue lo que dijo de mí –preguntó el señor Deodoro Ferreira. No, no, no fue de usted, Bissón se refirió a la manera que Angel Francisco ha enfrentado a doña Margaret Disla a la que en campaña veía como su segunda madre. Además con Usted, Anibaldo, y con Ízamel Cruz Bonilla, pero el dolor mayor es el que eleva José Enerio Luna, que dice que el Alcalde lo ha ultrajado habiendo sido su lugar teniente en todo el trayecto de la hégira por el poder. –El hirió—dijo Luna, mi propio corazón.--¡Arias!—llamó Apolinario—para manifestar lo siguiente: el comportamiento del Síndico, es muy extraño y desespera al comprobar que personas de su entorno las trata como mierdas usted diría flores, escatológicas alejadas del partido…-A qué entorno te refiere? –Me refiero al emocional.--¡Déjalo, déjalo ahí! Que allí viene acercándose doña Kanilda, tiene los ojos torcidos por no ver la realidad que muerde sus piernas. Está como los enamorados sufriendo de Escotoma. -¡Escotoma! Y ¿Qué es eso?--Búscala en el diccionario. Pero te adelanto, el que padece de esa enfermedad, ve lo que desea ver. Cierra la puerta de la visión ¡Eso es escotoma! Momento más tarde se encaminó por los aleros del Ayuntamiento estuvo en el taller y comprobó, que sobre 50 compañeros les esperaban, escuchó la canción por Amor del Autor dominicano Rafael Solano, y deseó repetir los versos pero no los sabía. Optó por decir --“Todo es hermoso y constante, es música y razón, es como el diamante que antes de ser luz es carbón”, pero esos versos de Martí no encajaban en nada en su realidad—pensó y entró a su despacho. La guagua que dejaba oír la canción de Solano, anunciaba el comienzo de las patronales Arias aprovechó la presencia del señor Sabelotodos que aunque con la dificultad académica, daba a conocer su experiencia, de nombres de personajes históricos que la escuela ocultaba por orden oficial se acercó para oírlo decir—No puedo continuai contándole las tristezas que he llevado en ei saco de mi trágico existir, sin señalai ei nombre de Vicente Oggé quien fue ei primer insurreito de la colonia. Vivió en ei exterioi y consiguió ei rango de coronei, pero muchacho, lo que para mucho fue soipresa para mí simplemente fue incumplimiento de la ley. Ei tatarabuelo de mi abuelo, José Henríquez Cantisano bautizó a Oggé cuando retornó al territorio y como ei que se come un panesico lo hicieron Diputao constituyente. Oggé fundó la asociación amigos de los Negros. Lo interesante de este hombre, mijos, no era la valentía que llevaba en su sangre, sino la fueiza y ei valoi de los de sus raíces qui imponía a las acciones contra la esclavitud a favoi de los suyos .Enfrentó a los imperialistas de aquellos días,-- dijo y secaba con su verde pañuelo, verdinegro ei sudoi frío que poblaba sus sienes. --No, no, no hombre, eso era lo de menos, Oggé era valiente, paralizó los negocios onerosos de las potencias europeas, hizo enoimes y vehemente joinadas de protestas para conseguil la igualación de los Negros, y de los Mulatos.
--finaimente amigos míos, la proclama poi ei respeto de los Derecho Jumanos. Ei primo Oggé fue comparado con los grandes anaiquitas, desoiden sociai y agitadoi profesional. Como lo creyeron príncipe dei mai oidenaron la descuaitización. Valentino agotado ya, solicitó permiso al Prof. Arias, para encender el pequeño cachimbo de ébano verde y pluma de carey --Lo mataron con barra de jierro! manifestó
--Señoi, señoi, decía Dobleese, que se hallaba en los
asistentes, en la improvisada charla, que el asistente del Síndico realizaba en la biblioteca municipal. Dobleese plegó la cara porque la pierna enyesada, le hizo un pellizco álgido y muy ardiente, si embargo continuó --poi qué, poi qué no nos habla usted de La Mear?--¿De La Mear? Y dónde escuchaste jablai de jese impoitante peisonaje? Dobleese no movió un músculo de la cara, sacó del bolsillo de la camisa blanca un lujoso lapicero que había encontrado en uno de los escritorios del consejo de guerra y con una actitud cleptómana lo guardó en la polaina del pie izquierdo. Como no sabía escribir hizo muchas bolitas encima de un papel de estraza. Tenía proyectado comprar un maletín y hacerse pasar como Licenciado.
--La Mear—decía Sabelotodos, con tono académico—como todos los revolucionarios, individuos con enoimes luces, abrió las pueitas de pai en pai, dei levantamiento contra ei imperio españoi en 1812. La Mear luchó junto a Fragosito Leocadio tendente a obtenei la separación dei sistema coloniai, imperante en aquellos tiempos e la media isla.
La brisa iba de este a oeste descomponiendo los cabellos de las hermosas que escuchaban y anotaban los asuntos primordiales de la conferencia. --era un defensoi de los Negros esclavos, en los bateyes, jasta qui fue condenado a mueite, compañeros, nuestra historia está llena de múltiples bagatelas de vagabundos y de vagabunderías, de terroi, de oprobios está repleta El Señor Sabelotodos continuó-- daba gana de llorai paisano cuando la gente vio que lo arrastraron poi todo los lugares dejando caer las lágrimas poi boca y poi las pieinas. La gente se cansó ai vei que lo frieron le frieron los pies, y descuaitizaron los brazos y echando luego las partes en una gigantesca paila llena de aiquitrá, con tuito y cabeza eso daba deseo salir juyendo heimamano mío, de Fragosito te diré continuó, que como La Mear llevaba la idea de liberación en ei cerebro y en ei corazón. Lo picotearon como a un pueico salieron cinco mariposas de las heridas y se inteinaron en las nubes blancas que esa taide estaba lleno ei univeiso -- si señoi, si eran blancas se peidieron en ese gran bosque de neblinas. Los coitadores de leña y de caña de los Ingenios Montillanos y principaimente de Amistad dicen que fue Fragosito ei que en moitajas aparecía con las mismas frecuencias en las principales oficinas de los centrales referidos.
Cuando llovía muchas veces después de las cinco de la taide aparecían otras mariposas desde ei fondo de las pailas azucareras donde achicharronaron a Fragosito y a Cedí.. Para finalizai, amigos míos ei señoi de aquellos tiempos fue Pedro Cedí. Indivío extraño con célebres facultades, con tai qui le diga, que para matailo se necesitaron cinco veidugos, pero un fueite infaito ai corazón fúiminó la existencia de dos, cuando vieron que Cedí no moría Bombiaba la sangre poi boca y poi nariz y lamía ei bigote como si se builara de las autoridades, escupía jilillos finísimos de sangres que en la conciencia de loe veidugos eran sogas de fuego. Movía, abría y cerraba los ojos como un bombillo de navidad .Sabelotodos rió por largo rato y volvió a encender el cachimbo de ébano verde con pluma de carey, La gente que estuvo por buen tiempo esperando para ver el extraño acontecimiento, abandonaba las filas y se marchaba asustada quisieron vei si era cieito que las cabezas se reían después de media hora de sei cercenadas. Esa fue una de las razones de los infaitos qui provocaron la mueite a los veidugos. Cuando Angel Francisco dejó en la biblioteca la llave de la camioneta que estaba para su servicio y como eran las tres de la tarde enviaría a Bajabonico de las Garzas al profesor Cruz Arias, que era su asistente. Al otro día después de las 1030 de la mañana Cruz Arias que estaba en la oficina de la secretaría municipal, conversando de los asuntos económicos con el director o secretario general de ese importante departamento edilicio, se percata por los gritos agudos y de angustiante desesperación de una infeliz criatura, aparentemente normal, abandonada en la mesa de los regidores. Entre las cosas que Cruz Arias y Gerardo Aquiles o Carvajal Cabrera, hablaban estaba que los funcionarios de ese cuatrenio tenían la particularidad de que tenían que cruzar el arco del siglo 20 y abrir el portal de gran siglo 21, es decir estaban en el atardecer de una época de muchos dolores para el mundo, y para la república Dominicana ; como fueron la guerra de 1914 1939, l945, Hiroshima y Nagashaki, la invasión de 1905, la convención de 1907, la invasión de 1916, y la invasión del 1965.Los treinta y un años de sangrienta dictadura.. La guerra fría a partir del 1966. El señor Gerardo Aquiles Carvajal y Cruz Arias, se hicieron presente en el escenario de los que acontecía y comprobaron que los llantos eran de un niño de meses pero con rostro de adulto, que con la presencia de Nicolasio Henríquez de infante cruzaba las llanuras de la vejez y el pecho se le emplumaba, la cara se le arrugaba los de se le alargaban y los dientes en apariencia se le empequeñecían, Nunca supieron quien había dejado ese fenómeno que movilizó al pueblo urbano la tarde del 30 de Mayo. Fue el secretario quien ordenó a Miguel el correspondencia externa, a llevarlo a la clínica del doctor Florentino Flores, quien le diría en primera, que hacer. El griterío de los concurrentes, y de la exposición que en esos momento hacía el señor Henríquez, jefe de policía de ornato llegaba hasta los que se deleitaban con el niño camaleón, como le decían los observadores, crecía con los minutos, la calle Mella y las del entorno municipal y de la clínica del doctor Florentino Flores y del curiato católico, estaba repleta de fisgoneros mirando los murcielaguinos cambios ocurridos en el pequeño cuerpo del singular ser. Cuando Nicolasio de lo relámpagos llegó, dijo --esos son cambios lagartinos, y culebrinos --¿Cómo así?- preguntó Ilumilda, asistente de contabilidad, en tesorería –No puedo darle mayor explicación más de ahí no puedo, pero la referiré donde el profesor Cruz Arias, quien es ducho en esos y otros asuntos y temas relacionados con las fenomenología metamórficas, es un zacatecas de eslabones sicológicos de la naturaleza humana. La calle se iba estrechando y el niño que parecía de seis meses tenía el pecho emplumado, un bigote de anciano, y mostrabas uñas de aves de rapiñas, como vejiga llena de aire caliente crecía el pecho., cuando alguien dejó caer agua por casualidad, casi congelada, el jovencito lloraba voces roncas que fueron aclarando en la medida que su cuerpo volvía a la normalidad de un infante lactante. El público se movilizaba como si estuviera en activismo político, y los fatalistas y los crueles analistas decían que luego del triunfo del partido revolucionario dominicano, había sucedido en el universo imbertolino casos enigmáticos cargados de enormes energía demoníacas que encendían en la mente de los incrédulos la mecha de la duda Esos fenómenos y extraños episódios violentaban las en el universo imbertolino la tranquilidad y el sosiego popular. Las reglamentaciones de las fuerzas de la naturaleza. Rompían el sosiego y la quietud de los espíritus nobles—Figúrese --dijo el señor Macoro, asistente de transportación, individuo de recia complexión física de acero, a pesar de sondear los 78 años ,-- continuó hablando -- habiendo Papi Tibia y Yo terminado de reparar el camión azul, lo hubimos dejado encendido en el garaje, inesperadamente huía de otro que lo empujaba a abandonar el patio edilicio compartido por ambos por muchos tiempos, al creerse hoy un príncipe lo atosigaba, el acosado penetró a la cabina del camión azul, que permanecía encendido con las patas ensambló la palanca de los cambios y huyendo como un guerrillero urbano con la desesperación con que el otro con el afán de escapar de la tormenta y por el acoso del príncipe escapó de su émulo poniendo en marcha el camión azul .Macoro cambió el tono de su voz, y hablaba sin dejar de secar las herramientas de trabajo que guardaba en una caja que tenía un letrero que rezaba—sólo el Perredé destruye al Perredé, mientras tanto ocurrían los sucesos de esa tarde, a la oficina del Alcalde, Alicia de los Azahares escuchaba Cuando la comunicación entre La Alcaldesa Pimentel hiña y Angel Francisco se reestablecía, Alicia de los Azahares lo miró retorcido el cuerpo del Síndico Angel Francisco y se marchó hacia la bañera fingiendo tener calor-- El decía—Aquí sólo hay deuda, aunque en verdad existen en abundancia los Camaleones, y muchos Saurios a los que temo por la ambivalencia de su Anatomía. La tesorería estaba compacta de cobradores y busca vidas fue desalojada por el Lic Ramón Manuel Montes Ulloa encargado, quien estaba acompañado del señor Milvíades Simón Moral, presidente municipal prestos para el análisis de los presupuestos del Ayuntamiento. Ramón Manuel, estaba incómodo por la algazara que llegaba al cubículo desde el parque donde grupos hacían coros a un borracho que lloraba la perdida del poquito de ron que le quedaba de tres botellas recibidas de manos del Alcalde saliente, por la haber votado a su favor en la convención de su partido. La charla continuaba en transportación y el Doctor José Francisco Macoro, contaba hechos y anécdotas de cuando era preadolescente, un jovencito de 14 años—Sí, si a esa edad iba por orden de mi padre para acompañar a mi madrina que se hallaba sola porque su marido que según las lenguas suaves andaba llevando comidas y vituallas al guerrillero Enrique Blanco Sosa. En monte de la Jagua y la lomota.
En el parque encima de bancos y la glorieta, militantes y dirigentes medios de partido del buey que más Jala, en Bajabonico de los Cañafístoles, hacían guardia en la media luna, pasaban horas y horas pisoteando gramas y matitas de lo que fuera un precioso jardín en los tiempos de la guerra fría. En grupos de seis en presencia de regidores especialmente de Ana Victoria Pichardo de Ventura; hablaban de la poca o ninguna atención que ponían los gobernantes ya en el calor de las funciones. Hablaban también del fenómeno aparecido en la mesa de la sala capitular, los temas variaban por los intereses Pero todos opinaban del infante lagartija y que el gallo de Kuning pasó la tarde entera manejando en las calles de la sociedad, en el caballo más briso de los entornos y contornos imbertolinos Y en el camioncito azul, dicen que fuera el gestor de los accidentes ocurridos en los tramos Imbert Llanos de Pérez e Imbert Maimón. En cantos de amargura y de sollozos místicos el gallo de Kuning, cacarea cual gallinita de corral.--Todo ei vivo si no lo sabe usted, está mueito --¿Cómo así? ¡Ja, ja, ja ¡ se rieron por largo rato . Calificando de alocada y torpe la pregunta de Celestino Suazo miembro de pa policía de Ornato
--¡Pero bueno, pero bueno mijo! Tuei mundo sabe qui los pies dei difunto pisan ei aceleradoi dei camioncito azúi.
--¿Quién no lo sabe? --interrogó Brunildo Sención.
pero escuchaba que Cuando la comunicación se reestableció Alicia de los Azahares miró retorcido el cuerpo del Síndico Angel Francisco y se marchó hacia la bañera fingiendo tener calor El decía—Aquí sólo hay deuda, aunque en verdad existen en abundancia los Camaleones, y muchos Saurios a los que temo por la ambivalencia de su Anatomía Un nuevo grupo integrado por Bobito Cruz Batista, por Rafaelito Santos Sosa, por Andresito Cabrera ponían pensamientos en el comportamiento que ahora tenía el señor Alcalde Municipal—Pero señores el Síndico nadamás tiene ojos para servirles a los que los combatieron y los calificaron de descalsos—dijo Bobito, sólo favorece a los que con él riegan el mismo jardín --Yo no entiendo! Manifestó, -Andresito. --Está más que claro, es muy transparente. Angel Francisco da de comer a los que tienen comida en la misma mesa suya, --Así es-- afirmó Anibaldo Santos. Le sirve a los que los halagan y aplauden su travesura. Está sedado ¡Unjú! ese compañero, enmendaba el señor Cabrera—se le a subido el orgullo a los pies. --¿Cómo a los pies, será a la cabeza?--En la cabeza tiene El, los senos y los labios de su nueva Hada madrina.-- ¡No sea necio! Por qué habla así del Alcalde, por qué no habla como hablan los individuos libres y honrados, limpios, con transparencias sin galimatías pesadas. En la oficina del Alcalde, la Secretaria, le sirvió una copa de agua de coco de indio, dulce y fresco. Lo hizo con muchos tactos voluptuosos, él la miró, fue entonces cuando se acercó y puso con mucha suavidad y delicadeza una cucharita de azúcar de leche. La movió cálida y afectuosamente. Tomó sus manos la acarició con los cristales de su dentadura para agradecer el gesto que había hecho. La tertulia continuaba en transportación ahora el tema era el sepelio del Doctor Peña Gómez, pero el mayor interés estaba en los extraños sucesos ocurridos luego del triunfo del Partido Revolucionario Dominicano, que este lidereaba aun desde la ausencia física y en sentido particular en Bajabonico del señor Angel Francisco, Nicolasio de los Relámpagos, jefe de la policía de Limpieza y experto lector de orines femeninos, más que de otros géneros y de esencias escatológicas, decía—le diré que hay que cuidarse pero en especial cuidaremos al Síndico porque en esta semana a la oficina nuestra enviaron tres grandes fundas llenas de golosinas en condiciones de regalo y un frasco de tisana. Llegaron las tres cosas por separadas vistas por el profesor Cruz Arias, como algo muy sospechoso. El Prof. Cruz Arias, observador por experiencia prohibió que fueran consumidas y recomendó a que la estudiáramos con sumo cuidado. Luego de conocer los resultados y la procedencia y la naturaleza e intención el envío – Veremos habría dicho el profesor, asistente del Alcalde. En hora de cerrar el despacho el miércoles 13, para sorpresa de los que allí nos hallábamos—refería el encargado de Policía de Higiene municipal, -- pudimos ver que de las gavetas donde se encontraban las fundas con los regalos salían como largas crines… verdes de 48 caballitos del Diablo, que como 48 matitas de junquillos perforaban las rejas y paredes como en una hortaliza de fantasmas. Nos acercamos para comprobar lo visto. Entonces Estanilao Bonilla -- manifestó -¿por qué no fermentaron en vez de germinar? ¿Por qué esos regalos tan benditos de la naturaleza?
¿Qué le hubiese sucedido al o los que hubieran ingerido un pedazo de hojaldre? – preguntó Tony Amada, el Naipe que tenía en sus brazos a su primera hija acabadita de bautizar por el sacerdote Bernardo, altamirano. Los grupos se desintegraron hasta el otro día. La casa edilicia con los nuevos inquilinos emitía otras sonrisas porque tenía otros labios, y emitía nuevas voces. En los pasillos El asistente del Alcalde ofrece detalles de la visita hecha por Juan del Bosque Núñez, requiriendo ayuda, para transportar a una nieta suya que fuera quemada en primer grado, a el hospital provincial --Ordené a Emiliano a llevar la pequeña accidentada, sin embargo esa orden no pudo ser ejecutada por oposición de la señora Kanilda Pérez, dando alguna justificación. Angel Medina, respondió de esta manera-- Esa fue una actitud desatinada, desfavorable que desdice de los fines de nuestra gestión. Fue una salida errónea. Ese mismo día contestó preguntas que les hicieron los empleados que agradecieron los regalos que El le trajera de España. A Juana del Paraíso Medina Vásquez, empleada de tesorería le contestó así--- Caramba, si el día anterior a mi salida se me sentó en la mesa donde cenaba un individuo con cara de esperanzas, una mariposa con nariz de dame un poco, comenzó a comer, de lo que había en mis platos, sin preguntar. Lo hacía tan rápido que cuando intenté el ensamble de nuevos bocados no quedaban más que las florecillas de la porcelana en el fondo de los paires al término de sentirme mal, llegaba una nota de nuevos servicios que el individuo había ordenado, que luego degusté complacido. Oye Juana del paraiso,-- dijo el Alcalde -- el hombre tomó mi mano izquierda como se toma la de una novia secreta, je, je, je, je. En tesorería escuchaban con atención Angel Francisco, exploraban en silencio el rostro del funcionario edilicio y Ejecutivo Municipal. Luego lo hacían con aplausos y algazara. En el parque estaba el equipo de los Swaps pero que había sido coronado como los tragafuegos intercambiando trofeos perfume de una tonga de alcohol la ebriedad empañaba los cristales, de las transparencias humanas pero en los Swaps, lo que no se aclaraba se empuercaba. Uno de ellos reía, del borracho que aun lloraba, como un niño que acababa de perder su biberón de leche, pero el libador. Había perdido la presencia del clan colegial con el y sutiles encantos, con el las tres botellas de ron que como paga le había otorgado el ex incumbente a cambio de su voto en la convención de su partido. El hijo de Crucito manifestó—ese lo que tenía era un huacalito. Los demás lo observaron Antonio Siete Cuero, caminaba con sus zapatos como siempre bien lustrado, servían de espejo para mirar la paja del ojo ajeno, de todo modo, murmuró en seguida -- señores, quién no sabe que era la decimoquinta vez de los botellones violetas ¿Violeta! Manifestó Guárico Sosa,-- ¡Será rubia! O colorado. En la oficina quien manejaba sus sentimientos encima de los rieles como un tren de emociones eróticas las rodillas y los codos hallar el sosiego como palancas de segundo género, una retrocavadora de sensibles arrugas mudas. Anduvo hasta encontrarse en los labios erectos con sabor a mangos y a mandarinas en una cara limpia y fresca, la del Alcalde, libaba como el que había perdido el biberón. El dejaba como una pérdida la timidez y la vergüenza de quedar envuelta en las misteriosas hilachas en una mortaja seductora. Movía las piernas entre las ganancias del llegar al norte donde esperaba las notas estratégicas el que da la trata de deseos de un viaje, Libidinoso. Pero El no la dejó cruzar el último travieso con la boca entreabierta como persianas de lujo, Recibió las caras caricias de una cálida cinta de carne roja penetrando por la garganta yendo y viniendo en plena emoción entrando y saliendo en ritmo juvenil. Ese día lloraba Dobleese la muerte de Valentino entregaban a Nilo, hijo suyo, el segundo título universitario. Ahora era Licenciado en derecho, Este el más pequeño de sus hijos, se había mudado para la calle San Vicente con Fernando de Navarrete, en el Barrio Los Mina. Emiliano se echó a los ojos unos pañuelos negros que tenía en una caja de cartón para evitar que los rayos del medio día alejaran el deseo que tenía de dormir. Los Morones, en la casa de Angelita hija de Justiniano la comadre, celebraban el cuarto cabo de año de este que había muerto de Precundía, Dobleese salió de la casa de su madre cuando el Capitán Celso, se marchaba en compañía de tres soldados rasos que habían estado con él en el cumplimiento y condolencia de la muerte del señor Virginidad Silvano, su padre. Dobleese recibió un plato de ensalada de hojas y otros con carne de cerdo y arroz blanco, escuchó que alguien decía--- ese es el fundador de los Bocaeros, entonces bebió un poco de agua fría. Milo continuaba tratando de dormir, solo como estaba y sabiendo que su padre había muerto optó por lo menos complicado y se quedó dormido. Por más de tres horas se la pasó escuchando que Valentino decía—ese Dobleese, no aprendió algo bueno en los cuarteles eso mismo le pasó a mijo Felo, llegó una taide siendo cabo ai paique de aquí en Bajabonico de los Cañafístoles ocupó un banco de la cercanía de la iglesia Las Meicedes puso los pies en ei otro banquito dei frente, teniendo ei fusil en bandolera como uso yo mi machete. Cuando recuperó las eneigías comenzó a caminai estando sin zapatos Media hora después llegó a la calle de la gallera siempre con la boca abieita como un calabazo de bocao, se colocó en la galería de la casa dei Señoi Anibaldo Santos se llevó ai hombro ei Maussel, miramiento cuando uso ei dedo en ei gatillo salió una mariposa dei cueipo de la señora madre de Anibaldo y se posesionó en ei zapato de Dobleese, comenzó a temblai entonces caminó para La Ferretería F & H de La Duaite frente ai meicado. Donde laboraba su tío Lorenzo a quien le refirió lo acontecido --¡Muchacho!, ¿De dónde extrajiste esa orden? Esa era un alma del purgatorio la que tú viste encima del zapato—Aclaraba Lorenzo a su sobrino Dobleese que estaba asustado.
--Repítamelo Tío poi favoi! --Ya te lo dije esa no era más que un alma del purgatorio la que viste que estuvo en el zapato.
--Yo intenté cogerla, .tio Lorenzo, pero volaba como ei aire, es más parecía una brisita toimentosa voló y voló, la señora se me peidió no supe ei rumbo qui esa mujei tomaría.
La madre de anibaldo que estaba en casa de Demetrio Henríquez secretario general del partido, escuchaba a su hijo hablando cuando llegaron a informarle que la guardia estuvo en la galería buscándole. Su jijo jablaba asina nunca es maltratado a nadie jamás he calumniado ni injuriado, yo tampoco-decía-- Anibaldo, pero en la persona del señor Sabelotodos, he vivido atento muy despierto observando nuestro entorno y el comportamiento de los que han tomado el camino teleológico, el sendero de esperanzas, por eso es mi militancia revolucionaria. Es cierto que molesta a nuestros enemigos paisanos nuestra membresía en el comité de la honradez y el de vigilancia del decoro por la limpieza social. Doña Eulalia se levantó el asiento que ocupaba y eso obligó a su hijo Anibaldo a bajar la voz, y Lugo escuchar que ella leía un papelito que una vecina le enviara—“Doña Lala quédese donde está y comuníqueselo a su hijo, no salgan vuelan moscas en el borde del cardero. No salga ahora que los insectos duran muchos volando, pero tendrá que casarse. El Licenciado que en la profundidad del descanso vio a su padre rascarse las narices y notó la fidelidad de lenguaje del viaje al transferir las emociones de Anibaldo. Le pareció ser hijo de un padre descomunal y extraordinaria sonreía a pesar del comentario otros ocho años estudiando derecho con el mismo entusiasmo para obtener la licenciatura de contable
--Está bien mamá—expresó el hijo pasándole un rojo lirio cala, Doña Eulalia marchó hacia el hogar por la calle de la Farmacia Flora, y compró aspirinas contra el susto y el miedo.
Yo soy, un jociadoi, jociadoi dei bien-- continuó el viejo evocando lo que Anibaldo decía en la fangosidad de esta sociedad lo hago como ceido que le ha crecido ei jocico .Estuve, estoi y estaré evitando qui vengan a apagaime ei faro de mi conciencia histórica y disipai el aureola de mi jacho qui es como mi único honoi soy jun guaidian dei mismito fogón que nos enseñó primero don Juan y segundo Peña Gómez. Vigilamos nuestro compoitamientos la faita de límite y de fronteras poique semos jijos dei debei pero de la veidad. Vemos ei entrai y ei salil como agua despresada Emiliano José cambió para el lado derecho, entonces escuchó con mayor energía al difunto padre que aún perorataba, decir—esos muchachos de Virginidad y de Sensemayá no pegan una, siempre abanican ,especiaimente los militares son dos caballos patojos, dos cachos recoitados . Esos muchachos regurgitan encima de la panificadora en los sacos de harina se acercó y le preguntó –dígame muchacho de qué, o de quién me deseaba jablai, ándeme pronto qui la sombra más vieja dei univeiso se me aproxima –Cuénteme Polín, dígame, muy alegre dijo el viejo. -No es muchas cosas señoi, pero cuando en mi andai veo una tonga de leña ei corazón me pega varios pescozones en la cabeza dei estómago y siempre creio estai noqueado a mi cerebro Compay, llega un jombre con sotana de cura atado en un joicón de pino de cuaba ajogandose poi ei jumo que de la pila de leña salía sin más ni más paisano, ei amarrao rezaba la letanía de atrás para lante.Emiliano José puso el cuerpo en supino y pudo escuchar directo del mismo escenario los términos del de la letanía. Vio que ei cielo y tuito ei panorama enrarecía quedando más oscuro qui jablai de un mentiroso, y como lo qui lo atosigaban juyeron creió qui la providencia le ayudaba echando la bendiciones, sacó eneigía y procedió a desataise pero los nudos apretaban más que flojaise con la humedad, pasaron minutos ei señoi saceidote sonreía, pero murió ajogado poi la inundación ocurrida en ei entoino rurai poi la lluvia que dei cielo -¿Qui significará eso señoi? --Na Muchacho, na. No creo na está más claro ei vestido de San Antonio de Padua, los qui fabrican ei miedo son los dueños dei terroi para asustai, jacen crei que ei mai es una fueiza dei cielo. Y eso es mentira eso no es asina de un lugai inexplicable y desconocido, eso es de otra foima, mentira sobre mentiras ha sío un faiso andullo pero es mucho mejoi decilte .qui ai sei de lodo la zapata se ha desrrumbao. Jan enseñado a la juventud a que crean que los maites son lunes, y estos sábados o domingos, Nilo en el sueño veía que su papá asistía al velorio de Lengua Suave, pero las imágenes les llegaron confusas porque lo que veía era en el club de los hijos si padrinos, vio que al viejo le entregaron café en una taza arenosa color barniz lechoso luego encendió un cachimbo y comenzó a tabaquear. Hoy es 24 de octubre fecha para conmemorar la revolución unionista mi Papá, mi difunto Valentino Silverio decía que el grito insurreccionar convirtió en gobierno a Carlos Languasco ese momento fue un arrocito con mangos, un locrio de arroz con millo –Duimieron juntos y reburujaos, mansos con cimarrones y se acabaron los colores. Este aparente nacionalismo no aicansó mayoi tiempo pero si sacudió al país como a una gallina culeca como era un fenómeno inexplicable no duró lo suficiente los colas laigas, como eran identificados los Horacistas, no comían con los colas coitas, como muestras Jimenístas, caña pelada y mucho menos pendejadas .En esas refriegas estuvo en la loma de Jamao ei joven Mon Cáceres quien con los años fuera de recuero presidente de la república. .Fíjense-- manifestaba Valentino- Lino, aunque escuchaba sin importarle demasiado lo que su padre hablaba, ahora en la logia Las Mercedes, en Bajabonico de los Cañafístoles, se cambió de postura empleando sus brazos como almohada pero plegó la cara porque escuchaba que Valentino continuaba diciendo que el emblema de los Jimenístas era un gallo bolo canelo, y que Horacistas otro canelo coludo considerando que el viejo repetía formas y conceptos. Y hacía mangú con los detalles. Los Jimenístas formaron la desunión, movimiento con su célula maestra en la línea occidental del país, permaneció más o menos 7 meses --sí, eso fue muy bonito, muy heimoso veilos juntos, pero de buena a primera lo bueno dura muy poco como ei duice de leche, ei de ajonjolí, como ei beso primerizo poique qui con miedo es qui se da. .De esa foima comenzó ei finai de la Unión Nacionalista nació una nueva revuelta, los muchachos se movían jasta en zancos, en caballos y en burros y carros de madera .Los de Bajabonico de las Aromas y de los de Bajabonico de las Hojas Anchas, como de los Llanos del paso del Río Pérez, y los de la confluencia de Obispo y Bajabonico de los Cañafístoles, vomitaban los anhelos como plomos sus jaimas. Para defendei ei honoi jacían caminos carreteras, puestos; cruzaban pantanos, arroyos ríos, lomas. Jacían carretas con ruedas de madera de toda manera de muchos se quedaron en los pantanos. En los otros municipios hicieron joinadas de protesta para así foitalecei a los Bolos opuestos a los Morales, que regalaba la tierra de la bahía de Samaná, como un dueño de un coitjo más que privado comprado en vacas mueitas. De esa foima cae poi los múitiples errores cometidos entre otros las caricias que se daba con los Gringos, y con ei resto de los imperialistas. La revuelta, ya le dije, trajo dolores de cabezas y de estómagos y jasta 550 marines dei Noite .poi la mueite que sufrieron los gringos en ei Vapoi John Gerald Jonson.
Con su lenguaje picaresco, Sabelotodos, dijo—Los Personajes Jimenístas que “filmaron” ei cese dei fuego en la lucha aimada, fueron Desiderio Arias y don Demetrio Rodríguez, y poi ei gobieino “filmaron” los Horacistas Jesús María de Céspedes, pero como consecuencia de ese pacto salieron los nombramientos del General Arias, como Gobeinadoi de Montecristi ei dei generai Demetrio como delegado dei gobierno pero lo peoi para ellos y para todo ei gobieino de Wos y de Languasco fue que legalizaron la corrupción, alegando que de esa foima activaban ei comeicio y la economía. Nacional. Ramón Cáceres que era vice presidente de la república no le pareció correcto el nombramiento del general Demetrio Rodríguez y que tuviera poder de nombrar las autoridades hasta los diputados de la región cibaeñaEmiliano José soñaba con su padre mientras…En el sepelio de Valentino la multitud quedó sorprendido viendo a Dobleese vistiendo de oficial estando en retiro pero la sorpresa fue mayor cuando empleó espacio y esfuerzo para El llevar por tres metros el cadáver de su padrino Valentino hasta el campo Santo.
Veinte años después de la muerte de Chepilo la sala capitular del Ayuntamiento Altamira somete y resoluta para que en adelante las calles y callejones de los Silverio que va desde Bajabonico de los Morones, hasta las distintas propiedades, hacia Naranjo Chino, sea conocido como José Valentino Silverio Silvano Arcipreste de los Morones. El 14 de febrero día de su nacimiento y de su defunción en 1999. Las campanas de las iglesias católicas, de los parajes nororiental y norte de Altamira doblaban a sus recuerdos.
Optaciano Silverio Cabrera participaba en la Peña asistía al velorio de Lengua Suave, pero las imágenes les llegaron confusas porque lo que veía era en el club de los hijos sin padrinos, vio que al viejo le entregaron café en una jarra acostumbrada, en la casa del profesor Cruz Arias, en el callejón de Bajabonico de los Guanábanos Arias; hablaba de Basora ciudad Iraquí, y de La Tormenta del desierto. A un grupo de escolares de educación Media y universitaria procedente de Palmar grande y de Los Llanos de Pérez, las campanas de las iglesias católicas, de los parajes nororiental y norte de Altamira doblaban a sus recuerdos Inopinadamente se presentó en medio de las explicaciones, un hermano de Dobleese buscando al señor Optaciano para requerir de sus buenas relaciones con el jefe policial de la comunidad de Bajabonico de las Garzas, y que interviniera ante la patrulla que buscaba a Dobleese quien se había fugado de la “Fortaleza” San Felipe, para ir a ver a una mujer en la comunidad de los Uveros. Apolinar Silvano Silva cumplía arresto por habérsele hallado culpable en compañía de otros militares que actuaban como bandas de mafiosos cuatreros llevando ganados de propiedad particular a la de los oficiales de las fuerzas armadas.
Se comentaba en los predios del Batey La “Altagracia” y de San José de Monte Plata, de Chirino y de Yabacao, que las vacas del potrero San Sabino llegaron, a la referida
Hacienda, como invasores paracaidistas en noche de lluvias, sin luna pero sin relámpagos Dobleese era el segundo al mando, cuando trasladaban el ganado desde Ceagana, propiedades del Estado, para los Cortijos de Oficiales de las fuerzas Armadas y de la policía.
Estando Emiliano José en el baño recordó que Valentino había dicho del primer gobierno de Cáceres en 1906 –Arias y demás jefes Bolos abandonaron el país por el intolerable modo de actual del presidente y de la clara inclinación imperialista y por lo inconstitucional de ese gobierno que era un guaraguao, con patas y picos del norte. Con las alas salpicadas de fango podrido y mierdas de garzas. Para Septiembre prohibió el pastoreo y la vagancia de todos tipos de ganados, ordenó sacarlos o llevarlos al cibao central. Los que desobedecieron las órdenes fueron vistos como enemigos opositores del régimen y como rebeldes anarquistas La zona quedó bajo el filo de las bayonetas y de las polainas de la guardia de Món Cáceres.
Quedaba demostrado que no era como los opositores habían calificado al presidente de Caco de Maco, Racionalizó la entrada de los alimentos de primera necesidad, autorizando la entrada del arroz, del azúcar, la manteca, del gas, los fósforos Emiliano José hurgando en los escombros del pasado y en los recuerdos de su padre. y maestro. Volvamos a los que habitan en el parque de Bajabonico de los Cañafístoles, y así observar a Junín Bonilla quien pasaba a Angel Francisco el número telefónico de la Alcaldesa de Pimentel que le llamaba dice ella,-- que la llame de inmediato. Angel Francisco acercó el cuaderno agenda y anotó el número.
– ¿Qué tal Martina? -Aquí cargada de problemas!
La zona quedó tan devastada, que se podía comparar
con el paso de un huracán de fuego de los cañones de la política del poder demoníaco del Presidente Cáceres quien; ordenó acabar con las guerrillas que los hartaban. Dejemos a lemas, corrigiendo torpezas ajenas -Sí, si, así es, sembrando salubridad y un poco de higiene aquí, otro allá ¡Como no ¡Unjú! --No yo no hago eso, el anterior si que hizo, yo no lo lago -Yo recibí casi tres millones de deudas en suplidores y prestamistas --También yo, la que yo recibí ascendía a seis millones y medio con tres centavos
--Hola, hola, que pasaría. Parece que se cortó—dijo Martina Castillo Sindica de Pimentel. Aquira sonrió al saber que la comunicación fracasaba, reflejaba la alegría en los ojos de café, y sus manos que estuvieron sudando se la terminaron de secar con una toalla sanitaria. --Sí muchacha,--continuó Martina--hablando con una de sus secretarias. Ese hombre, es un bombón, lo malo suyo es que no baila., pero escuchaba que Cuando la comunicación se reestableció Aquira miró retorcido el cuerpo del Síndico Angel Francisco y se marchó hacia la bañera fingiendo tener calor El decía—Aquí sólo hay deuda, aunque en verdad existen en abundancia los Camaleones, y muchos Saurios a los que temo por la ambivalencia de su Anatomía
y la multiplicidad de rostro y en la sicología, son zalameros y muy codiciosos y pesados al caminar eso me atormenta ¡carajo! En la oscuridad son inofensivos mientras en la luz juh, a esos no hay quien le lleve, hay que ponerle cubierto en las mesas son murciélagos camaleones salta cocotes se excitan como el gallo más un berraco!--Así es, nos veremos el 3 de mayo en donde Fausto Ruiz, en La Vega.--¡Está bien! En la tarde el gallo de Kuning volvió andar las calles Mella y Duarte del pueblo pero huyó a caballo al cogollito más alto de las matas de Jabilla en la puerta del Barrio Varaguana Muchos creen que ese curioso animal es el espíritu del matador del comerciante anti Trujillista Señor Pedro Canela. –Ese animal no halla la puerta del cielo, y es por eso que vaga y deshora a los cuatro vientos. Mientras hablan de trivialidades Junín vaciaba el camión de Volteo con un viaje de arena en el patio de la casa María, hija del barbero la Comadre, quien alegaba haber pagado varias veces.
El Síndico preguntaba, por Rafael Castells Benet, Maestro de Albañilería regidor del mismo partido suyo. Para que le informara sobre las inquietudes que este tenía sobre Junín Bonilla, que siendo Chofer del Alcalde se la pasaba vendiendo arena extraída de los ríos haciendo negocio con los intereses del ayuntamiento, y ante los ojos de la Sociedad, era una grave falta quedarse callado. O podía ser visto como compice... Junin no le tomaba en cuenta, no le ponía caso a nada ni a algo, según su parecer Angel Francisco le había entregado el camión como paga por los servicios prestados al partido a favor de su candidatura. En primer lugar, sin embargo, el mundo entero conoce que Junin recibió “contante y sonante” paga mensual por el servicio prestado entregado por el equipo político y el mismoAngel Francisco dinero que enviaba La Senadora Bournigart, Ismael Cruz Bonilla y en muchos casos el Empresario Otto Gómez propietario de la casa Nelson --¿Quién lo iba a creer? --¿Qué cosa compañera? --¿Pero…, es que no se da cuenta, usted? Que los apocaban de descalzos a Angel Francisco y a sus seguidores, son los primeros en celebrar su triunfo, y gastan en tragos y picaduras en los charcos y chorreras de arroyos y manantiales. Son los primeros comprando hociquitos y rabitos de cerdos en las paradas de la autopista para comerlos con guineítos y cervezas heladas haciendo planes y proyectos,.. Los domingos o cualquier tarde sabatina. O en la casa del coordinador general como en la Gómez 25 en la capital de la república,-Ese tipo de gente ofendía la naturaleza de la organización también la del candidato. --Ana! ¿Por qué? Explíquemelo usted. Hubo quienes estuvieron hasta en la internacional socialista
buscando desméritos a Angel Francisco pero sucedió que este era más conocidos por los incumbentes que los difamantes El líder los mandó a trabajar por la candidatura de Angel Francisco --Y qué es lo que ahora quieren ellos?--Bueno compañera, tal vez no lo sepa me parece que buscan arribarse a la cobija de la fronda del árbol que le amaneció con brotes florales. Ya no son descalzos, ni ignorantes. Todos los hombres traen al nacer los pies descalzos y la mente como un cuaderno en blanco dependiendo del entorno se va manchando con anotaciones.--Así es, los descalzos ganaron, pero los triunfos son el resultado de esfuerzos comunitarios agregados a los intereses. La defunción del Líder produjo grandes decisiones en el pueblo y dio el último empujón.¿-Lo cree usted? --Claro que lo creo, más que creerlo lo se. El Partido Revolucionario Dominicano es el partido de las grandes mayoría, lo otro en monte y culebra como dicen los Neyberos.¿--Y dónde salió que Angel Francisco no tenía capacidad para administrar el cabildo?¡--Pero bueno! ¿Y por qué ahora sale usted con esa perogrullada, de esa naturaleza? Es que no recuerda usted que en el 94 nos hicieron todas las mañas en plena presencia del doctor Peña Gómez. No aceptaron que Angel Francisco acompañara al doctor Florentino Flores, y llevaron en la boleta al compañero Pedro Cruz. Claro que recuerdo, siendo yo la que acompañó al Prof. Arias, a las negociaciones en la residencia del compañero Luís Vargas Binet. Esa misma noche Bernardino García y nosotras acabábamos de llegar de Palmarito, de la casa de Pascual y del Prof. Salvador, en la guagua Peogeout del señoriíto Edgard Ricardo Arias, sobrino del Prof. Cruz Arias. Con Margaret y nosotras andaba Morayma Aragonés, enamorada del Profesor Arias, pero después de conocer la precariedad económica del educador optó por aceptar las propuestas de Prof. Antonio García con quien se une en compromiso nupcial. Pues esos compañeros sólo conocen el valor ajeno cuando lo requieren y de esa manera sus intereses quedan protegidos. O simple y efectivamente cuando del cielo político están cayendo granos de sal .Siempre ha habido una franja obscura en la blanca sábana que cubre el cuerpo del partido… Quizá desde la fundación creyente y dueña de los emblemas y distintivo de la nación como de la organización socialdemócrata, pero en esa franja hay unos cuantos que en todos los eventos han sacados beneficios personales perjudicando a la colectividad. Se auto determinan autócratas, duchos estrategas e intelectuales, éticos y ortodoxos. Cuando los visitamos, algo casi imposible por varias razones, que callaremos en estos párrafos, pero déjeme decirle que generalmente las puertas las tienen cerradas, los que han podido llegar a la sala de estos letrados e intelectuales no poseen ni siquiera un pedazo de la revista Ahora, o una página del periódico Tribuna Democrática órgano escrito del partido. Y mucho menos un pequeño estante con las obras que hombre o mujer que haya circulado por la secundaria, sino leer, conocerlas y tenerlas. Para no molestar a los aludidos estén donde se hallen, escribiremos sólo algunas “El Hombre Mediocre” “Moral Social” Emriquillo,” “La Mañosa” “Las Cosas Añejas” “María” “Talaré” “El Ismaelillo” “Fuente Ovejuna,”Otras son pocas porque deben se cientos las que deben cursar entre los planes de un aspirante a conducir grupos de inteligentes, no de manadas como algunos al parecer se han creídos. Pero las que enfáticamente señalo, amigo son los cuatro libros de Confucio, La República, El Criticón y toda La Historia y Geografía Universal que pueda su mente concebir. --Oiga compadre por qué no me enumera otras diez puramente universales --Todas esas obras aunque tienen autores conocidos por nosotros el asunto es universal pero ahí la complazco con unas cuantas como “El Hombre de Maíz”, Días difíciles, Trópicos de Cáncer, Jubiaba, Lolita. Ariel, Cien Años de Soledad, Trópico de Capricornio, y cientos de obras contemporáneas.--Pienso con suma humildad que Angel Francisco cambiar su manojo cultural. La lectura sería una de las recetas que él debe reformularse a fin de refinar la dicción, poseer una meta ideológica tener la idea de humanidad conocer la naturaleza humana en los estados síquicos, y los estados orgánicos anatómicos. --Lo vi subir al autobús llevaba una funda de libros premios nobeles la mayoría “El viejo y el mar” “Platero y yo”, “Por quié doblan las campanas” y entre otros “El hombre de maíz” “Eugenia Grandet” y “La madre” --Espero no molestarlo con mi insistencia pero me gustaría conocer las obras que según el parecer de muchos debe conocer un dirigente político.--Es posible que para muchos ser seboruco, mamarracho y licenciado en estultologia y estología, no hay que ir a estudiar y graduarse en La Universidad Para ser miembro de una organización política es necesario ir a colegio superior y querer dirigirla tampoco es necesario leer. Para decir cuáles son las obras que debe leer un dirigente de seres humanos no borregos ni burros o saleas jorras o encintas, iguales o mutables es muy arriesgada, sin embargo le diré que en término elemental el neófito en materia de lectura debe conocer obras como: El Criticón, Las 48 maneras del poder, Rebelión de las Masas, Concepto Elementales del Materialismo, Hostos el Sembrador, La gran Pirámides, El hombre Mediocre. Y docenas de cientos textos y obras de ensayos y opusgrafías muy importantes para el engrosamiento cultural de los amantes de la dirección de las Masas.
Debí mencionarle El Doctor Chivajgo, El Príncipe, El Estado y la Revolución, Y las obras de Estadistas de la talla de Benjamín Franklyn, de Rómulo Gallegos, del prof. Juan Bosch, de Juan Isidro Jiménez Grullón y del doctor Balaguer y los discursos del doctor Francisco Peña Gómez y otras quinientas de esa naturaleza. Asiáticas y europeas.
Después de haberse instalado y haber celebrado el día de la secretaria y el de los trabajadores, Angel Francisco estuvo reunido con el señor Cruz Arias, Alicia de los Azahares, Gerardo Aquiles Carvajal, Ramón Manuel Montes Ulloa, Nicolasio Henríquez, Ana Victoria Pichardo de Ventura, Milvíades Lemon Moral, Pepe Cruz Henríquez, Junin Bonilla, a ojos de algunos, esos eran los principales funcionarios del nuevo gobierno municipal. Estuvieron ausentes Alcides Manuel Victoria encargado de Catastro y el señor Deodoro Ferreira asistente de la vice sindicatura. En todas las reuniones se veía con simple claridad la señalada ausencia del señor Lic. Ismael Cruz Bonilla.
El propósito de la reunión no lo conocieron los participantes, por haberse convertido en una champola de agria guanábana, pero en la fresca brisa ascendida del viejo Bajabonico llegaban gotitas de una ligera neblina que se acercaba, nos metimos en la pérgola cobijada de pencas de cana amarilla, Angel Francisco ya sentado en una mecedora mandó a servir un vaso de cerveza a cada uno de los participantes. En la oficina otro día, continuó la reunión, con los mismos actores, el alcalde le dijo al asistente: --consiga informe de lo que quieren la gente que esperan en los pasillos profesor. Quiero que informe a los demás lo concluido En la sala de reuniones está el compañero Juan del Bosque Núñez con unas docenas de compañeros con una cantidad de reclamaciones para ellos de prioridades. Dice que siente mucho el haber tenido que en circunstancia como la presente interferir en las instalaciones de esta oficina para solicitar las reclamaciones que les hacen los compañeros de Las cana y Escalereta. Señalan que harán movilizaciones si no se les atienden en sus reclamos, quemarán parcelas de cañas, derribaran alambradas, y los tendidos telefónicos, y eléctricos. Y si no entregan solares en las parcelas de Saballo sabotearían los encabezados de los puentes que comunican los pueblos de Isabela y de Luperón. Dicen que cortaran las alambradas y se apoderarán de la tierra para hacer conucos. ¿--Qué otras cosas piden ellos? ¿Quieren que les laven los pies, que recorten las uñas de los dedos de las manos, que le chupen el dedo gordo del pie derecho? ¡Dígame usted!--Piden además ser incluidos en el plan de emergencia Navideña.--Está bien profesor —dijo el incumbente—se movió hacia donde podía ver en su totalidad lo que hacía Alicia de los Azahares, su secretaria, que en apariencia no le importó la conversación del sindico hasta que este no dijera –será que le chupen el dedo gordo del pie derecho. Entonces para continuar con el profesor, se pasó la lengua por los labios más de una vez.--dígale que traiga 12 nombres, ocho compañeros y cuatro compañeras. Angel Francisco al término de la reunión dijo palabras incoherentes cagadas de energía concupiscentes que hicieron temblar las carnes del cuerpo de Alicia de los Azahares, lo miró con ardor erótico se fue acercándose como el pequeño que busca el biberón pero pensaba estoy comprometida con Rojo Antigua, sin embargo amo con fervor y pasión a éste por quien estoy tumbada. No se atrevió a calificarlo. Al dejar el cubículo el asistente, ella se acercó definitivamente a el poniéndole las manos en las comisuras superior de la boca preguntó con voz ronca pero excitada-¿Qué es lo que esos quieren que le acaricien? Hablaba y acariciaba las cosquillas de su jefe, como ella decía –amo a mi jefe más que a mis padrinos Yo no te entiendo. ¿Qué es lo que quieren, será que buscan un biberón, será eso? ¿Qué tu crees Alicia de los Azahares? Yo otra cosa no podré por ahora. --Echa para acá déjate llevar, deja caer toda esa energía ardiente que lleva como un barril y la recibiré para que te sientas renacer. He comido manzana, guayaba, cajuiles, guanábana y jugos de fresa y de caña pero ningunas son mejores que la delicia de tu boca. Giró al flanco izquierdo para estornudar. En cosa de micras de segundos recordó a su abuela Victoria, que decía—“cuando uno de los Francisco estornuda, sin más para acá ni más para allá era indicios de alergia. Salió para el sanitario, ella abrió las persianas. ¿--Por qué abre? --Para que comparta con nosotros el aire. Al tiempo de abrir sonaba –ton, ton, ton. Varias veces se escuchó que alguien tocaba la puerta del cubículo. --¡Abra secretaria, pero cuando tenga el fólder amarillo en las manos --Ton, ton, volvieron a tocar.--Voy dijo – Alicia de los Azahares, ¡Ya voy! Nadie entró no había nadie en el pasillo.
En la tesorería las puertas estaban de par en par. Milvíades presidente municipal dijo—Tesorero cómo andan los tesoros de este mi palacio? Quiero saber cuáles son las posibilidades hasta enero? Los planes míos son grandes, usted los conoce tesorero. Cuando me junte con el síndico debo estar armado de las informaciones correctas y bien asesorado quiero ser dueño de la menor duda
--Como pocos usted conoce este desvencijado aparato económico conoce las deudas, contraídas, y las recibidas. Además la política populista del incumbente andamos sobre girados, pero debe usted señor Presidente transparentizarse conmigo ponerme sobre sus intereses. ¿Qué es lo que desea hacer acto, y cuáles para luego, lo cuerpo grandes no se arropan con lienzo pequeño.
--Bueno sería acondicionar las calles principales, las de la parte baja del pueblo como regalo de navidad.
--Tenemos que andar con tactos y llevar cuidado debajo el brazo para evitar caer en el barranco. Nicolasio, es el más alegre de todos los funcionarios del Ayuntamiento, hablaba con el profesor Cruz Arias en el altar de la señorita Ingrid Piedad, de asuntos extras curriculares. Cuando el maestro se retiraba Nicolasio le dijo—Me gustaría escuchar su opinión sobre el acto de bostezar. --Está bien, me iba, si no le importa seré breve. Viéndolo literalmente, es un simple abrir y cerrar de boca, pero no es así es mucho más que eso, es una acción sicosomática relacionada con la conducta social. Para mucho más que para mí es una consecuencia provocada por tedio o por animosidad cansancio o ensoñación pienso que es la manifestación como el sudar, o el estornudar que es el resultado de la acción generosa de una glándula así es como lo entiendo y lo interpreto. Estudios particulares de los últimos años lo ubican como una categoría pasajera transitoria de los individuos en estado abúlico, apático o de empatía social, Continuamos después.--Hasta luego, profe dijo Ingrid Piedad.
Cuando Isabel estuvo en Los Uveros, que dijeron los que estuvieron allí, que durmiera en los retoños salvajes en medio de pajas entre cañadas y matorrales. Encimas de frías hojas bajos los escasos rayos de una luna traviesa, se puso un poco trastornada escandalosa. Avergonzada se dirigió al central Montellano donde tenía algunas propiedades, luego de permanecer hospitalizada, fallece atacada por los efectos de V Y H, la cara se le convirtió en la barriga de una rana repleta de ordinarias excreciones y enormes verrugas papujas, molestosas a la mirada de los amigos que al levantar la tapa del ataud, ofrecían el saludo final. Había pasado la noche en aguaceros pero el calor penetraba por todas las rendijas, La crecida del río impedía que amigos y parientes de la difunta estuvieran presentando las condolencias al cadáver traído desde Montellano en un carruaje de Ayuntamiento Sanfelipino dejado en medio de la iglesia de Bajabonico de las Garzas.
Dobleese y Jacinto Doblepe primo de la muerta venido desde el Seibo fue el primero que entregó sus conduelos a un ataud peregrino anacoreta con cercanía a la soledad de ser un ermitaño en términos reales.
En el sepelio, los amigos y amigas de Lengua Suave, se oponían a la actitud de borrachos que ensayaban la manera de cómo interpretar la canción de Bachatas “La cama tiene candela” para ser cantada a la salida de la iglesia y a la entrada del cementerio. Como no hubo consenso no hubo definición entonces se pusieron de acuerdo a cantar el merengue “Juanita Morel.” Mientras tanto el ataud descansaría encima de los pies del barón del Cementerio.
Las últimas paladas de tierra caían encima del cajón de madera blanca al ritmo del merengue el “Florón” jaleo de música de vientos, griteríos, ataques histéricos, entre los clientes y amigos que facilitaron que la difunta descendiera del piso frío, del entierro contornando la bachata “La cama tiene candela” En la casa donde colaban café, unos y otros parientes gritaban guardando de maneras obvias las apariencias recibían condolencias y algunas abrazos interesados. Ahí estaba lleno de canas y en el rostro se le dibujaba la angustia y la tristeza, Ireno Bonilla, por haber llegado de haber enterrado a su amiga de muchos años
--Dime Doblepe—expresó Dobleese ¿—de dónde sale que tu fuera primo de la difunta? --Mi verdadero papá era hermano del suyo, así de frente llegó buscando al señor Pedro Canela, también hermano, medio hermano,
Apolinar dejó a Doblepe y dio un rodeo en los alrededores del patio y de regreso como si completara una circunferencia expresó –venga vamos donde el viejo Ireno que debió conocer a sus parientes.--Sí vamos, pero a mi no me interesa hablar de esos temas.--Está bien.Caminaron muy poco, al Ireno darse cuenta que sería abordado como a un padrino por los ahijados buscando regalos el día del Niño Jesús, parpadeó algunas veces, se agarró el viejo pantalón, luego de ponerse en guardia de los de Món, garraspeló. Escuchó el correteo de unos cabritos encimas de unos corotos de yaguas y el relincho del patojo que a decir de muchos era un fiel amante de la difunta. --Cómo está Ireno,--preguntó Dobleese. Ireno mirando los botones de la guerrera de los visitantes respondió—Bien según sea la taide. Escupió miró el kepi de Doblepe, y entonces como si calculara algunas cosas manifestó, y usted jefe es coludo o cola coita blanco o colorao? Uf, ju., ji, ji. Ireno era un hombre muy alegre y entusiasta, a pesar de entenderlo, Jacinto no respondió. Le encendió el cachimbo pluma de carey que bastante tiempo estuvo sin lograrlo.
--¡Qué me lo favorezca Dios señoi Teniente! Lunes tres de octubre el presidente del Ayuntamiento iniciaba conversaciones con el señor Polanco quien siendo Agrónomo graduado con suma, era el rector de la facultad del acarreo de todos tipos de arenas y variedades de estas en la región, ostentaba el lustroso título de secretario general de camioneros del norte con asiento en la ciudad de Atlántico. De las conversaciones surge el contrato de ocho camiones camas largas para que a partir de las diez comiencen a llevar materiales desde La Hacienda Cuba propiedad de la familia brugal pero en territorio de alcance municipal en la comunidad de Barrabas. En hora de la franja crepuscularia, Angel Francisco y Milvíades Lemón, exhibían como una flor de lirio cala, la risa de la satisfacción en las mejillas, como una tajada de sandía opalina, y, en los labios el regocijo y sosiego, que da el haber triunfado. El Ayuntamiento había movido más vehículos en dos horas en las calles de Bajabonico de los Cañafístolas que el gobierno central en dos años. Angel Francisco había comprado el comercio en menos de tres meses que en tres años la gobernatura Peledeísta. Ocho vehículos de varios metros de tosca en el Barrio Luís Mendoza y en La Pangola, asustó a los guías del liberalismo Imbertolino que violando las leyes de la municipalidad prohibieran la circulación de los referidos camiones de la enunciada compañía del atlántico, y el traslado de los materiales de las minas las que cerraran en una actitud troglodita propia de un gobierno fascista en la sombra de foresta como una nueva guardia templaría, su brazo armado. Días después en una reunión de la Comisión Ejecutiva del Partido Revolucionario Dominicano el Profesor Cruz Arias quien fuera interpelado por haber manifestado opiniones en contra a lo que llamaba empachaduras que para entonces el presidente del Ayuntamiento se preparaba poner en práctica en colaboración de las demás autoridades en las calles de barrios del pueblo, este respondió—muy sencillo, el pueblo votó por un Ayuntamiento con Autoridades limpias transparentes y honestas, y aún pienso que estamos en condiciones de ofrecer sin jubilaciones. La posición nuestra es racional, es estratégicas, pero a corto plazo. Esa obra que asusta a los jerarca del comesolismo jingoísta Ah aclaro! Entonces se pregunta, ¿Cuánto le costará al pueblo, a tan pocos días de navidad? ¿A cuántos pesos sale cada vehículo de esos? Esa es la posición mía y es bueno que conste en actas. Para unos es inoportuna y aberrante. Seguro que el Ayuntamiento no podrá ser solidario con aquellos hogares que el 23 de diciembre esperan que los que gobiernan situaciones tengan un fósforo con que encender la mecha de las viejas esperanzas.
--¿Quién más se opuso? -Permítame si no molesto los procedimientos, está bien gracias. Mi oposición es peregrina y solitaria, es la voz del desierto nuestra voz no existe en el parlamento municipal del conclave que presiden Milvíades Lemón y Angel Francisco, mejor debo asegurar que se lo tienen prohibido los que una vez a El, llamaron lambiscón y descalzos. Si nosotros fuéramos una mosca, ya hubiesen pasado los novenarios, hubiésemos perecidos por estar lejos del fogón donde se cuecen las Habas. Estoy seguro que no es de los intereses políticos míos, sino de los que convienen al partido y la memoria histórica del Doctor Peña Gómez minutos más tarde, Cruz Arias y Nicolasio, hablan del crecido de la barba en la mujer y el lampinismo en el hombre. Fueron al Rancho degustaron el aroma de los cañaverales proveniente del corte del dulce de la parcela los muertos, mientras Yskenia y Junin hablaban de la posibilidad que tenían de ver a su hijo en un internado de menores protegido de todas las acciones contaminantes y corregir las torceduras de una hormona suprarrenal. Angel Francisco cenaba en El Restaurante La Ginita, en el rincón entorno al puente Brisa del cañaveral en la salida hacia el municipio parte sur, lo acompañaba el Naipe, o Tony Amada comían camarones de los conocidos con el nombre de congo, con fritos verdes y cerveza presidente y Bohemia Angel Francisco en apariencia se molestó con la llegada de Aquira de las Máquinas, quien le llevara la nómina del mes trece, para ser firmada. Después de cenar leyó los nombres con las ayudas y al no encontrar los correspondientes a Las Canas y de La Escalereta, como los de Los llanos de Pérez y de Bajabonico Arriba casi llora de molestia. En Bajabonico de los Morones Dobleese era burlado porque aseguraba haber estado junto al teniente Doblepe con el señor Ireno Bonilla, quien había muerto hacía cerca de tres décadas, el día del sepelio de Isabel Lengua Suave, --Mire usted señor – dijo el teniente Jacinto Doblepe, me han dicho que no es cierto, pero el señor que hablaba con mi colega Apolinar, con esta caja de fósforos yo le encendí el cachimbo que por más de media hora no pudo prenderlo y lo mantenía en la boca halando aire como si conseguía algún placer a pesar de tenerlo apagado. --Je, ei, eh, i.e., se reían todos como si se burlaran del desconocido y amigo de Polín lo hicieron en coro al compás de irónica sintonía lo que más me gustó del extraño individuo fue que no retiró nunca de las manos el leño que según Doblepe parecía de limón o de naranjo agrio. Los oyentes se miraron porque esta vez no rieron con necesidad burlarína. Ah tampoco podré olvidar que me dijo ser padre, primo y abuelo al unísono, ¿qué me quiso decir Apolinar?—preguntó azorado. --¿Cómo, eso dijo? Sorprendido expresó Margaro. --Óigame oficiai, mientras se paraba del banquito de tablones, Floy Bonilla, hace doce años que encerramos a ese señoi, ai que muchos quisimos aunque a su distancia, Ireno era un burro, pero más manso que en los que siempre anduvo, era un hombre gueno con su repeipreo naturai. Dispués de su mueite se jan dio casi juntititos, y poi los mesmitos motivos Neison Gaicía, Juanelo Medina Sosa, y Cailixto Gaicía, Demetrio Silverio, pero junto a Laíto Quiñones Silverio jijo de Baibina la hermana de La paica, enterramos al señoi Evaristo Cruz ei marido de Daniela Arias, pero ei 27 de ese mesmito marzo aviamos enterraos a la señora Higinia Bonilla, esposa dei dueño de la carnicería, de la escuela y de la iglesia de Bajabonico de La Garzas. Ambos difuntos eran dos individuos muy queridos por los Bajabonicos y en sus memorias les guaidamos ei respeto que merecieron ello”, señoi oficiai.
--Lo que sucedió heimano Floi fue simplemente una travesura dei primo Ireno. Quien no se ha podido todavía aproximai a la presencia dei señoi, será qui a usted se le oividó, a mi si no. --Cómo oividailo si lo recueido tomaise tres pedacitos de alicoinio, tres de cueino de chivo cojudo dei coloi de la noche y menos que ese día era maites trece. Como no ha jallao ei camino pa tai con Dios cuando se entera de aigún velorio en aigunos de los 13 Bajabonicos… en seguida aparece como un aitoi a un escenario teatrai y se jace visible poi aigún forastero o poi aigún alelao dei lugai. Ei resto imagíneselo usted. -Yo pienso aigo parecido—manifestó Machazo, ese difunto no se sienta
No se rinde, ei camaleón más camaleón que pueda jabei en la colinda entera, en las colindas regionales, llega pa acostillaise jai lado de cuaiquiei coloi jasta que le convenga. Bebe café, fuma, pero saben ustedes que es lo que ei condenao viejito busca, ei anda en espera que se muera un cristianito que fuera de meses pa podei colaice.
Dobleese y Doblepe se miraron sin decir esta situación está, más oscura que el corazón de un camaleón prestamista y brindaron del Cleren que desde la casa del señor Mora habían llevado en Bajabonico de Las Garzas
Una tarde habiendo Macoro terminado las tareas del taller acudió a las oficinas de Catastro y como allí hablaban de asuntos estereos se sentó en la silla que aun estaba desierta.
--El hombre es la combinación de humores, entrecruce de sensaciones hormonales, como un circuito de nervios y de energías sintomáticas que provocan actitudes y aptitudes. Pero entre esas combinaciones volitivas y sensitivas viven gamas de individualidades, síquicas agrupadas cono en un corral los ganados de todas las especies y de todas las tipologías. Son organismos y microorganismos subyacentes en oscuros océanos y escabrosos continentes pero hay zonas de islas y archipiélagos. En cada parte de cada todo existen numerosas montañas y extensas llanuras cargadas de peñascos muy enjabonados, cruzadas por numerosas cañadas cristalinas que en casos singulares asimilan el poder de la simulación y se hacen invisibles, las riberas son brumosas, neblinosas que se aclaran dependiendo de los estímulos exteriores Mientras el doctor Macoro exponía las acciones del gallo de Kuning y consideraba que ahí se escondían algunas de las
sustancias extrañas que corren dentro de las llanuras y montañas misteriosas de esa brumosidad de las riberas que según el hombre lleva dentro de su esencia, pasemos a la comunidad de Saballo donde el Tío Juan habla de la honradez del señor Angélico --Poi favoi Angélico, dígame poi favoi, de qué es que está hecho usted poique según lo visto y oío no le caen las maldiciones, nada lo ofende ni algo lo entúibia. Veo que sus emociones no se entoipecen.
--¿Por qué cree eso de mí Tío Juan? --Poique a usted sobrino no le caen piojos en su baiba ni mancha en su vestimenta blanca. No hay sudoi ni vinagre gubeinamentai que estruje o manche su camisa. ¡Carimba Angel! déjeme buscai aigo pa fumai y aliviai la gaiganta que la tengo riseca de tanto hablai. Caía un fuerte aguacero cuando el Tío dejaba al sobrino Angélico hablando del mismo asunto. Cuando retornó el señor charlista hablaba de las simulaciones humanas y las llegó a comparar con los mimetismos de las plantas y los cambios o actos metamórficos de ciertos animales. Tio Juan se retiró a las partes finales del plantel que alojaba la biblioteca de la comunidad de Saballo mientras fumaba escuchaba las voces mas que las esencias de estas porque el ruido de la caída de la lluvia en las hojas del zinc lo adormecía
el lic, Ramón Manuel Montes Batista, había recibido al señor Angélico de la Cruz, mientras que el profesor Arias después de haber terminado la exposición que hacía en las oficinas de Catastro recibía en el restaurante Las Garzas, al señor Martín Rodríguez, presidente de La Junta Municipal Electoral, quien le visitaba en compañía de su esposa y sus dos pequeños hijos. --Sentémonos en esta mesa—espetó el prof. Cruz Arias, a su amigo de secundaria. Arias se levantó y estuvo saludando a los tertulianos, que los respetaban y les trataban con afecto y aparente simpatía, casi 36 minutos El señor Martin Rodríguez se sintió muy alagado cuando amigos del señor Arias lo fueron a saludar con deferencia y cortesía y le pareció que el lugar había cambiado bastante. Arias saludaba al señor Aristarco Abelardo Ramos, y lo hicieron con efusivas acciones.--¿Qué hace por aquí? --Soy amigo de Rigoberto Silverio a quien le hacía un trabajo en el Kiosco.--Venga siéntese con nosotros --Mi compadre, se lo agradezco, infinitamente, pero ando… mejor dicho estoy esperando a Henry de Frontana.Ya en la mesa, Víctico Hiraldo, director de la orquesta musical saludaba a los acompañantes del prof. Arias, luego hacía chistes con el tinte que este inauguraba esa tarde.--¡Carimba, profesoi, Carimba, qué bueno, tiene cara de diputado,
Que bueno es estai en los palacios así hablaba el director del conjunto típico allanando el camino que condujere unas cuantas frías, luego o de inmediato. La sala de baile era amplia limpia, recibía a los bailadores sin tomar en cuenta el tipo de zapatos que humillaba el perfil del suelo Víctico abotagado pero de voz clara aunque no rítmica envió el primer estadio musical con el merengue Me lo dijo Adela, continuó con María Antonia, fue ahí cuando el presidente de La Junta Municipal Electoral salió al medio del salón y bailó tiernamente con su esposa, mujer alta de cutis plateado, lozano con el brillo de una juventud fresca. Ella tenía un vestido azul y en la cabeza un lazo largo color verde puesto sosteniendo un moño mariposa. Permanecieron tres horas tomando tragos cortos y bailando en el alero de la plataforma prevista para ello. La oscuridad de la noche se apersonó cargada de calor y entonces fue que el funcionario electoral agradecido marchó con su familia hacia su residencia de Imbert de los Cañafístoles iba alegre y satisfecho del momento que Arias había ofrecido a el y a su familia en Bajabonico de las Garzas
De repente la mesa del profesor Arias, se llenó de militantes seguidores suyos y del partido blanco buscaban el completivo para tragos y cigarrillos. Sin muchos roncar Henry Frontana, vio que el asistente del Alcalde Angel Francisco entregaba algo de dinero a los miembros del partido que los aplaudían y de inmediato estaban en medio del salón degustando los merengues que enviaba la orquesta del señor Hiraldo. Ramos y Frontana vieron bailar al profesor el merengue Rhadamés Guerra. Al otro día, en la mañana vestía de seda amarilla, había un sol solidario pero muy conservador, los pasos de la gente encima de las aceras de las calles, eran sin rumbo, sin objetivos, caminaban dejándose llevar por la energía de la brisa que caía de cerro Rafael en la hacienda los muertos, Uno de esos caminantes era Rafael Antonio Séptimo Vásquez, individuo de escasa estatura, pero de contextura formidable, no entraré en detalles pero sus anchos hombros poseían bastante energía demoníaca, a pesar de ser dueño de pierna muy corta Séptimo se movía con la energía de un motor de cadenita. Llegó a la escalinata del palacio municipal cabizbajo describía un panorama lastimoso, al detenerse puso la mano izquierda en su hombro derecho sin haberlo programado murmuró para su consumo-- ¡Caramba Siete, no dejaste ni para el carbón, no hay habichuela, la estufa en el empeñador. Bajó el brazo, caminó y miró en los zapatos que siempre estaban lustrados como un ustorio, como le gustaba decir, se dio cuenta de que estaba sudoroso. Cuando Yolanda lo atisbó lo llamó para arreglarse los bucles descompuestos. Vinieron otras y Siete pensó hacer un negocio para que las muchachas se miraran pagando un peso por cada segundo que estas estuvieran mirando su pelo en la superficie de sus zapatos. Se movió y llegó al despacho del secretario general del Ayuntamiento donde estaban varias personas en busca de solución a los problemas presentados en el pasado. ¿Qué te ocurre Vásquez? – Preguntó el Sr. Jeralquilino Carvajal --Nada, que puede ocurrirme, lo de siempre.
Minutos después Gerardo Aquiles puso en manos de el condolido Vásquez, la suma de 300.00 pesos sin mediar palabras mayores Ahora a los ojos del beneficiado llegaba el brillo de sus zapatos. La brisa la que salía desde el mismo océano entraba a las paredes de sus oídos haciendo escuchar voces que en apariencia lo llamaban.
De regreso al taller donde el doctor Macoro laboraba, y recordaba las gestas del Gallo de Kuning entró a los predios de transportación gritaba el nombre del profesor Cruz Arias, por lo queJosé Francisco Macoro le dijo—Arias anda con Angel Francisco para los Llanos de Pérez.--¡Está bien, hermano! Se marchó sin mucho esfuerzo --Con ellos, anda Nicolás—manifestó Macoro, pero ya Séptimo iba llegando a la media calle. Al terminar en casa del señor Cruz Henríquez Angel Francisco marchó hacia la residencia de la madre del profesor Cruz Arias, donde almorzaría en compañía del prof. Julián Bonilla Alcalde de Altamira. En el parque conversaban del gran triunfo del presidente Mejía, los jugadores apostadores de dominó lo hacían como rutina en la parte nororiental del parque, mientras los tácticos, filósofos y estrategas del partidos, entre los que se hallaban Prof.Julián Chiche Medina Cruz, Danilo Silverio Medina ponderaban las actividades de Carmelo Medina Cruz, para a partir del 16 de agosto, la dirección de las oficinas de Cora-Plata en Imbert de los Cnñafístoles. Lo mismo hacían Bobón Batista y Chiche Buche, Emilio Pichardo y Rigoberto Bonilla César cedaceaban el nombre de Alejandro Bonilla para la dirección de foresta en el municipio. Los que estaban en la glorieta apostaban a la renuncia de Jeralquilino Carvajal de la secretaría municipal y aseguraban a Manuel Antonio Victoria quedaría como sustituto. Las discusiones profundas la tenían en la mesa de los Regidores Deodoro Ferreira daba un charla sobre lo que entendía una burla programada contra el señor Ismael Cruz, a quien asistía desde la semana del 16 de agosto. Lo que a el le sucede es que, Angel Francisco, es un fresco y abusador, lo ha hecho con sus seguidores, nos ha tratados como a pésimos enemigos, convictos y confesos delincuentes lo ha hecho con opresión malsana. La lógica me dice que Angel Francisco desprecia a Maelo, pero muchos más a los que le seguimos. Ese mismo día en el club deportivo y cultural de La Escalereta Ramón Manuel Montes Ulloa, presentaba los charlistas, a la concurrencia--Ellos son—manifestó—Amable Polanco y Emiliano Silverio ambos son licenciados egresados de la Universidad Autónoma. La tarde seguía con misma ropa que usó en la mañana pero ahora el calor provocaba mucho sudor el sol cambiaba de lugar como un bocaero cuando en la comunidad se presentan más de una velación. El Prof Ramón Manuel continuaba haciendo la presentación de los presentes en el Club Tomasina Cabral Ingeniera antitrujillista. Fue llevada a Cárcel La 40 fue empujada, humillada ultrajada; recibida con insultos indecentes y asquerosas amenazas por los esbirros de ese infierno como ella la calificó. –fui halada por los cabellos por el general Tunty Sánchez, jefe de La Aviación Dominicana.
A las paredes del Club llegaban sin interferir en las voces de los participantes, cantos lejanos de los gallos y de los bachateros que interpretaran la canción ¿Quién eres tú? El Lic Emiliano Silverio, conversaba de la estructuración del Partido Político. Y en ese sentido manifestó—Partido político es un instrumento como un vehículo o como un río por donde llega algún lugar. El partido asciende al palacio nacional, es un bando, una parcela, un clan, una facción, es una bandería, una corriente de pensamiento. A los seguidores se les conoce como adeptos, prosélitos, satélites, sectarios, huestes y hasta secuaces. A nuestra organización han venido, los saurios individuos con sangre fría, reptiles, como las verdolagas llegan a los caminos y a los conucos, y huellas de los caminos apoderándose de los estamentos de la organización con la finalidad de variar los planes, y los fines tácticos y estratégicos. En las sombras de los anones y de los robles del entorno de la garzas restaurante, Arias y Angel Francisco reciben junto a José Angustia, y Tony Amada alia (el Naipe) y otros a medida que la fiesta toma el pulso de los bailadores, a los adeptos a ir con el Alcalde a la búsqueda de la postulación o nominación para la diputación, Algunos al comprobar que Arias apoyaba la reelección de este optaron por la retaguardia, cuando se disponía subir al vehículo se detuvo en el tronco del roble y se puso a conversar con José Miguel López, quien le hacía reparación a la vivienda de su madre. Arias aprovechó que el Alcalde no se llegó a marchar para enfatizar que lo apoyaría sólo en caso de repetir en el cargo y sus aspiraciones no trasciendan los linderos municipales pienso que no debe enfrentar al compañero César Emilio Peralta, quien ha sido siempre un leal aliado. Angel Francisco, arrugó los linderos faciales y puso en marcha la camioneta Nissan al considerar las palabras de su asistente como una antorcha mas ardiente que los haces del Hacho del Partido. Capaces de quemar los barbijos de los cañaverales, no quería escuchar lo que palabras como las del asistente. Andan por los cuatro caminos encaramados como matitas en los postes de los tendidos telefónicos, y eléctricos. Son “Con” del árbol donde estén alojados, son parásitos enquistados en los tejidos sociales contaminando el organismo universal, en pocas palabras son parásitos sociales, llevan su biología entre las hojas de la familia, capaces de cambiar con el tamaño y con la forma de las aproximaciones en cromas termo-tácticas escondiendo el rostro son monedas que corren hacia los mercados y mercancías suben caminan y bajan. Se asoman a las bocas de las bolsas luego contentos saltan brincan por encima de la cadena de intereses, por donde andan los vientos y colores conducentes. Podemos manifestar que son corchos chupadores, bailadores de la música prevista, la que estén tocando los tambores generalmente si le favorece. Llevan máscara ponen las huellas sin dejar verse. Son caimitos, tamarindos, se voltean buscando luz, calor y muchas cosas que a ellos le conviene. Cuando se aproxima la tormenta alzan vuelo porque son lagartijas voladoras, orugas nerviosas caretas y antifaces carátulas plásticas. Huyen y entran a las cuevas protectoras y hasta en las rejas de las gavetas de las mesas. Finalmente –dijo Silverio en su monótona exposición, estos sufren la mayor metamorfosis habiendo sido pobre son dueños de almacenes factorías y emporios dientes negros con fortaleza cavernaria.
De regreso del restauran Las Garzas donde estuvo reunido con el Profesor Arias, Angel Francisco llega a las instalaciones municipales, deja a los menos confiados y se acomoda en el sillón de su oficina, donde los seguidores suyos les esperaban que no buscan otras cosas que bailar en las fiestas de los camaleones. Y Arias lo sabía.
Ángel Francisco no cruzaba los pies y muchos menos los brazos, pero esa tarde ambas cosas las había inaugurado. Miró a todos los costados fijó su mirada en el rostro de Alicia de los Azahares para decir—le cerraré la puerta y le retiraré mi apoyo, es más dejaré de ir donde sus padres, que son mis parientes ya que el profesor se ha constituido en un obstáculo, en un peñasco, en un escollo en nuestra aspiraciones. Angel Francisco colocó los brazos encima del escritorio y con el izquierdo extrajo un lapicero de las gavetas y anotó los nombres de 36 parajes de los municipios y se levantó del sillón y despidió a los miembros del equipo político después de servirles un leve brindis. Minutos después llegó al palacio Municipal Séptimo buscando al maestro Cruz Arias. Entró a la oficina del Alcalde necesitaba comprar una receta en su andar se le salía la premura y en los movimientos de sus ojos la desesperanza. Vio al profesor entonces llegó a la mesa de donde partieron hacia la biblioteca a colocar una caja de libros enviados por el profesor Juan Medina, ex gobernador y ex diputado de la provincia. –¿Cómo está Maestro—preguntó –Mejor que mañana respondió. Cómo va ser? Le pasó una pequeña nota que Arias leyó y sin aspaviento le entregó un billete de cien pesos. --Me voy debo ir a llevar estos “ojos de piedad” a mi familia En circunstancias diferentes Angélico y Emiliano uno en La Escalereta y el otro en Las Canas –es muy cierto compañeros y compañeras que las cuotas, que como entidad, el partido debe defender y evitar que se las sigan robando los enemigos del humilde pobre. El Lic. Silverio, interrumpió la ponencia y salio al baño por un momento, las cuotas de que el partido como entidad propone para los trabajadores de éste van a parar a las largas manos de la oligarquía que desde muchos años están mordiendo el tejido de nuestra sociedad,-- manifestaba Angélico en el club José Mesón, expedicionario ex miembro de la marina de guerra, torturado en la silla eléctrica en la infernal cárcel “La 40,” esas cuotas eran raptadas por garzas pintarrojas, como ciguas Madán Sagá devoradoras de arrozales y maizales. Como viejo cocodrilos de grandes y afilados colmillos de taimadas hazañas esta actitud engorda las vacas enemigas y adelgazan las verandillas del vergel político donde como umbrosía el pueblo humilde y pobre se guarece. Es allí donde las hamacas de los añejos robles cuelgan aún las nítidas esperanzas cumplidoras de sus primeros 70 años. --¿Cómo así señor compañero Angélico? --Está muy claro ahora en el 2009, el partido cumplirá 70 años de su fundación en el exilio en el 1939. --Es el más viejo de todos—manifestó el compañero Osiris Guzmán dirigente de La Escalereta. Antonio Almonte se rió y le guiñó el ojo izquierdo a Antonio Espinal que hacía algunas anotaciones en su libreta. Juan del Bosque levantaba las manos, esperó que el señor Angélico le autorizara hablar. --Yo pienso señaló que esa riqueza ostentada por los camaleones, como diría nuestro amigo, el profesor Arias, es furtiva y según es salvaje. Y debe ser sancionada por algún organismo del Partido sino por el Estado. El señor del Bosque, continuó enumerando hechos que avergonzaban ser militante y dirigente de una organización capas de proteger al burgués y al oligarcas engreídos por el poder económico que posee. Angélico hablaba del bienestar de los Camaleones Metamórficos dijo – son dueños de un nuevo confort y producen las nubes que desean porque son cosecheros de la lluvia que les satisface. Poseen una máquina para moderar y cambiar el clima. El señor Piazo Acevedo que con su voz de soprano no dejaba escuchar su pensamiento dijo--¡Cómo no, esos gansos cambian hasta el color de sus ojos! Tienen una nariz para la salida del sol, y otra para la llegada de la luna nueva. Son basuras y se creen nácares se creen perlas y ni siquiera poseen el valor ético del carbón. Cambian de dientes…, abonan sus raíces siendo por ellos que la población es considerada. Celebran el seis de agosto como fecha de su patrón y coincidencia a la figuración y transfiguración de Cristo. --Para mi continuaba en Las Canas, Eminiano—los partidos políticos, se han convertidos en canales y sajones borrascosos colmados de malezas. Es un atajo de saltamontes y de lagartos con iguanas y salamandras murciélagos y cabritos cuyos fines seguros son los estamentos del Estados. Y al embolsicádselos crecen ufanados con poderes de mandos en el presidiun y cosechan cerones de mentiras que como hojas de tabacos disecan en los aleros de las viviendas de los activistas de barrios y de pueblos que siguen creyendo en el vergel de las nítidas esperanzas. Esas mentiras en las orillas de los senderos crecen como espigas de maíz, como flores en las matas de azahares y de naranjas de verdolagas y de moriviví. En las mesas de los regidores Rafael Séptimo habla con Arias, que no tenía oficina, y era el más socorrido por la militancia del Partido hasta de otros municipios ocupaba la silla presidencial en la Sala Capitular. A su derecha estaba el Alcalde Angel Francisco y a su izquierda el señor Ramón Manuel, tesorero municipal. En la mesa de caoba secular estaba el señor Lic. Pedro Alejandro Aguirre, Alcalde Municipal, del Mamey y Yolanda Cruz, gobernadora de la oficina de Catastro, ocupaban los extremos, Vásquez aprovechó la presencia del señor Aleja y, de la concurrencia para decir que necesitaba la colaboración de los jefes de secciones y departamentos y así asistir a una consulta con el presidente de la república al palacio para ser reintegrado en el ejército. Días después el señor Séptimo Vásquez regresa informando que además de ser reintegrado al rango de Sargento Mayor del Ejército Nacional, que le habían convalidado los 168 meses que estuvo fuera de la organización cosa que agradeció al primer mandatario y calificó de un acto socialista. Cuando se despidió del salón de la reunión donde también estaba el Síndico de Mamey, pero antes dijo—es probable que me paguen los promedien a $500.00 lo que tendría un cheque en mis manos de 84 mil pesos. Al marcharse el sargento mayor del ejército, el Alcalde Medina dijo:-- ahora me sentiría bien tratado si el Profesor VICTOR ARIAS, manifestara algunas justificaciones para no brindarme su colaboración y apoyo militante. El señor Arias se sintió invadido en su continente emocional sentía que las tropas invasoras lo encaminaba hacia un callejón de salidas estrechas atosigantes. Juzgó esa actitud propia de individuos imperialistas con hálitos fascistas pero como tenía ferviente afecto y singular simpatía por él respondió de esta forma:-- No necesitamos puntas de lanzas tampoco de puñales, para poner entre éstos y la pared de agitación a la que quizá sin proponérselo me ha llevado o desea llevarme o me quiere ver o tener. De toda manera, señor Alcalde, existen montones de razones que brillan como diamantes que envían ráfagas de luz al foco de una realidad verdadera, no fantaseada. Sin embargo en esta circunstancia no podré presentarle más que algunas lógicas sobre las inconformidades particulares, propias de estas acciones donde existen tantos intereses encontrados. Hacemos actividades rudimentarias que perjudican a la militancia. Construimos precisiones falsas hablamos de cosas desconocidas para hacer creer sabidurías abordando temas reales e irreales emitimos manojos de palabras lejos de poseer contenidos, transmutamos por caminos llevando un borrador de huellas para no producir caminos de esperanzas, esos borradores son sucias zapatillas salpicadas de carcomas y salivas ensangrentadas, olvidándonos de que desde algún lugar nos vigilan y escuchan otras consciencias. La militancia que por usted votó no está conforme con el comportamiento nuestros y nos acusa de que los hemos desamparado, ha vivido los días de glorias suyos bajo la peor situación de pobreza y en el mayor estado de desfraudamiento, pienso que la militancia donde sólo los coordinadores están contentos no se puede avanzar ni al tercer perdaño de la larga escalera, y con seguridad no alcanzaríamos a cantar las primeras estrofas de un himno inmortal. Si usted opta por beber de nuevo el trago para ser candidato a La Alcaldía allí estaría yo de nuevo presto a seguirle, pienso que el triunfo sería incuestionable, los que se han beneficiados continuarían apoyándole, los que han visto fallidas sus aspiraciones no le negarían en segunda ocasión estarían en primera fila.
Los presentes entre los que se destacaban Yolanda y Nicolasio intercambiaron miradas con el señor Aguirre mientras valoraba los juicios del Prof. Arias, como correcta Angel Francisco consideró como violenta la actitud de Arias en el Panorámico donde propuso la continuación del mandato suyo. Pero según seguidores del asistente no había sido violencia sino algo teatral para reclamar de los corchos y saltamontes estuvieran buscando la cuota de responsabilidad que el momento le imponía cumplir.
Días después el señor Arias era víctima de actitudes groseras, temperamentales de los anillos extorsionadotes arribistas trepadores, nenúfares amigas del ejecutivo principal de la gubernatura edilicia En muchas ocasiones esa principal figura parecía que pastaba en un postrero de hierba páez rodeado rumiadores egoístas que regurgitaban ambición hasta por los orificios auditivos. Había además buitres y zaramagullones que sacaban las cabezas para oliscar las nóminas de los trabajadores explotados. Esos Zaramagullos ahora les sonríen y hasta comen granos de las mismas mazorcas municipal se reclinan en la misma mesa y los bostezos de Angel Francisco, les agradan y todo lo que éste hace es bueno, nada para ellos se sale de los fines políticos del partido, porque esos no tienen conciencia de grupo social desconocen, las células constitutivas del gran cuerpo político, muchos sería para esa claque, pedirle cumplimientos de fines y estrategia, o fines de la organización a la que nunca han conocido como un instrumento de lucha social. En su ausencia hablan mal al tiempo que los odiaban y les sacan los ojos ponen motes asquerosos le llagaron a llamar en la precampaña jefecito de los descalzos. Fueron sus primeros opositores, y vieron mal la creación del vergel de frescas flores en el portal de la ciudad, al que bautizáramos como el Jardín de la bandera.---Pero “profe” dígame de alguien que según su parecer se halle mal tratado, con nuestras acciones!
---¡Pero Angel Francisco, usted se me ha puesto ingenuo… habiendo yo opinado a favor de José Miguel Rodríguez Cruz, en el kiosco de los Félix, en Bajabonico Arriba, donde había unos cuantos zaramagullos y camaleones, haciendo justicia porque la Sindicatura le debía… entregar los derechos económicos que por derecho les correspondían, por ser propietario de la máquina para soldaduras retenida en la tesorería, por su autorización, uno de los derechos gloriosos y cobijados con la sombra de la guirnalda que orla vuestra dignidad. Uno de los Camaleones que estuvieron en el kiosco de los Félix donde hice y haría nueva vez, en casos de necesidad, la defensa para que el compañero Garipó como se auto determina José Miguel R. Cruz, reciba lo que le pertenece, subió a su planta a regurgitar la maledicencia que guardaba en los almacenes de corcho mal oliente de su débil carácter y temperamento servil y usted de forma superficial segado por el afán de querer bailar sin ser bailador en la fiesta de las aspiraciones a subir por el palo encebado de los congresistas neófitos y leguleyos no pudo ver la verdad estando en transparencia delante de sus ojos más que en sus recuerdos. Ese Bissón o Garipó o como a El le guste llamarse, empleó varias horas de su vida para que el Partido llegara en el 1998 al poder municipal y congresual como llegó con mucho más de 62% de los votos nacionales, y fue quizá por la simpatía que usted le aurea, que el invirtió las horas que hemos referido, porque El como todos los que vemos, el gran universo que hay dentro de usted, nunca esperó ser despojado del derecho que le daba el poder de haber sido, uno de los alimentadores de esa criatura llamada Síndico, que por la influencia que irradian los zaramagullos en su entorno, se creyó emperador, y empleó, aunque sólo mientras estuvo bajo el influjo, que dan los Camaleones arribistas…hizo represalia en una actitud ridícula, antitácticas; vista por todos los leales, como una acción parecida a la que hubimos tomados mientras usted estuvo en España, el no haberle facilitado el vehículo al señor Juan del Bosque para llevar la niña accidentada al hospital Ricardo Limardo, retuvo el salario, el jornal correspondiente a mi persona pero todos sabíamos que no lo hacía el Alcalde Municipal individuo de Aura positiva con vínculos amorosos y hondas sensibilidad humanísticas era el aspirante a diputado en iniciaba una cacería, y el primer objetivo hube de ser nosotros por ser el que se atrevió a decirle que era incorrecta la idea de traer un chofer de otro municipio… Fui el que se opuso a que se enfrentara a César Emilio Peralta Vélez, su viejo y leal aliado, porque en esa actitud perdían los dos, como ocurrió.
La sinceridad en los grupos no es una mercancía abundante es difícil de cosechar y en los anaqueles espirituales donde aparece es muy cara adquirirla. Son escasos los que la poseen como luz disipa las borrascas de los entornos porque es una linterna y nosotros la encendimos para disipar en usted la bruma que los Camaleones tarántulas habían puesto en su perímetro pero ya era tarde para que los haces de esa pudieran llegar hacia su pedestal. El día de la detención de mi cheque, manifestaba Arias, Pepe Cruz Henríquez, evitó que nosotros renunciáramos, así mismo Jeralquilino y Manuel Constazo Victoria con quienes estuve íntimas relaciones casi de hermandad por lo menos eso siempre creí, era evidente la alegría que vislumbraban los Camaleones viendo que las relaciones nuestras con la del aspirante a subir el palo encebado del las diputaciones, comenzaban a teñirse de negro. A partir de esa encrucijada es que la señorita Alicia de los Azahares, comienza a llamarnos Chuky, o sea, muñequito diabólico, y, me cerraban el acceso a cualquier información de importancia. Me pidió el nombre de alguien disgustado, pienso que la principal incomodidad la tiene en la profundidad de la lejanía el doctor Peña Gómez, y sin destallar ahí están los de Margaret Disla Frías, Ismael Cruz Bonilla, Apolinario Sención Trejo, Diego González, de Kanilda y de Garipó y la de sus seguidores, estos no son nombres sino personas que los admiraron y los quisieron que dieron a luz a su engendro y no faltó momentos para amamantarlo.
Días después Arias descubría que los compañeros de la misma parcela política ponían vallas a su presencia moral y ética más que a la material, Colasio, Yolanda el mismo tornado espiritual franco y abierto de siempre, ella agradable y transparente considerada fuera del contexto universal. Un día que me esperaba preguntó las opiniones que nosotros teniamos sobre el machismo como del feminismo.
--Me agrada responderte decirte que en el feminismo como esencia natural lleva lo bello como lo frágil. Lo delicado es un elemento conducente a la adquisición de respetos a los derechos de la mujer. Es una escuela para planificar las luchas para obtener derechos políticos y la igualdad en el varón. Con la lucha surge el partido feminista, revistas y periódicos feministas no es lo mismo que feminidad que femineidad
Del machismo te diré Yolanda que el fin teleológico era anular el feminismo y exaltar el perfil humano del varón, pero ha quedado demostrado la igualidad de naturaleza inteligencia en términos generales. El doctor Peña Gómez, estudioso del desarrollo de la evolución de la sociedad, quien en este país antes de morir, legisló por los curules de su partido, en ese sentido.--Señor Arias, no se me vaya sin darme algunos nombres de mujeres universales que hayan descollado en igualdad que los hombres distinguidos.
-- Está bien amiga—dijo el maestro, quien encendió un cigarrillo Marlboro que Apolinario S.Trejo le fuera a comprar, está bien amiga… hay cientos de mujeres en nuestro país que hasta hoy la sombra estulta del hombre las ha mantenido oculta en término universal. Oye si te suena feo la manera como voy a señalar, discúlpame pero es un monte de mujeres gigantes que se izan como bandera en la cumbre de nuestros soles luminosos de la sociedad para agarrar las glorias patrias en las nubes de nuestra historia. Sin embargo comenzaré con lámparas votivas de otras galaxias políticas: Doña Juana de Arco, Juana de Ibarboreaux, Juana Inés de La Cruz, Juana Azurdy, María de las Mercedes Barbudo Cecilia Grieserns, Rosa Luxemburgo, Ana Betancourt de Mora, Mariana Grajales, Policarpia Salavarrieta, En 1966 Betty Friedan fundó en Estados Unidos la organización Nacional de la Mujer, que presidió hasta 1970 Enmienda para la igualdad de derechos). Las mayoría de estas heroínas murieron si derechos y sin glorias. En nuestro territorio hay millares que como las mencionadas califican de heroínas cogieron un machete, un macuto una aguja, una garrocha, produciendo alimentos con sus manos para la cría que muchas veces en su espalda o como canguro o dejaban en la puerta de una casa ajena hasta la vuelta de la recolección de frutas y frutos. O en el lavado y planchado del vestido de la burguesa terrateniente opresora en cualquier sector de clase, esta María del Rosario Sánchez, María Trinidad, Alia Saltitopa, la hermanas Mirabal Reyes. Yolanda Guzmán, la “Coronela”, Trina de Moya, Salomé Ureña, Mamá Tingó Virginia Elena Ortea, Antera Mota Ucrania Montás, Ercilia Pepín, Andrea Evangelina Rodríguez Ivelísse Prat, Sagrario Díaz Santiago Jeannette Miller, Gladis Gutierrez, Mirna Santos, Elsa Peña, Milagros Ortiz Bosch, Gladis Borrel, Aniana Vargas Sagrada Lujosa, Alma Arlette Fernández, Carmen Mazara, Picky Lora, Ing. Tomasina Cabral, doctora Aséela Morel, y otras que por tiempo no te puedo decir. En la oficina del Síndico el maestro constructor ahora regidor hacía rosarios de arrogaciones, hacía malabares y alardes de pulcritud en un pensamiento barroco y galimático que según su parecer eran únicas por ser desinteresadas por estar muy enlazadas con las del pueblo y los intereses comuneros los puedo demostrar –decía- recogiendo con la mirada el salón punto por punto no dejaba el foco de su mirada en objetivo previsto era una cámara inteligente buscando consenso en los que escuchaban. Puedo comprobar que lo que ganó lo cuotifico, el 33% lo empleo en la militancia, 33% en la inversión familiar y el 1% para los imprevistos. Los otros en ahorro y gastos personales. Al concluir la perorata comía mejor debo decir tragaba salivas como premio por la actuación. el presidente y maestro constructor galanteaba de las vestiduras que usaba en las reuniones y en los viajes al exterior, muchas veces escuchamos de boca suya, -- No uso traje de la pulga. En los momentos difíciles para muchos el nuevo presidente municipal presentaba a los que según su idiosincrasia y su carácter multifacético se satisfacía haciendo públicos ofrecimientos a los que él entendía que en término económico eran débiles y no tenían dinero para gastar en acciones voluptuosas. Muchos fueron los escucharon decirle – vamos a casar al profesor Arias con Amarilis Otras veces dijo—Cuando termine de construir el Hotel Celia, ahí profe, de inmediato le entregaré la llave de la suite presidencial para que se sienta a lo grande. De esa manera su imagen crecía en un acto hedonístico y de Narcisismo auténtico – Para que haga una noche de amor para usted solo. Eso llegó a decir al camarada Alfredo Batista. Pero siendo justo con este personaje Imbertolino debo decir que fue el preferido y la figura mejor cotizada y la mercancía mayor buscada en la pre y pos campaña electoral del 98 y del 2000. Si no era un especín de las familias del tema era un saurio en parentela manejador de su filogenia y de las corrientes sofiológicas. Decía que este personaje de la fauna de Imbert de los Cañafístoles era admirado de las muchachas y de los jóvenes de su género. Arias estaba despierto seguía la ruta de los que decía y hacía el señor regidor, llegó tan lejos que al Angel Francisco no aceptar la reelección, le propuso que aceptara ser el candidato de la nueva corriente de trabajo que EL y Chiche buche y Alfredo Batista estaban gestando. Así lo proclamaba el profesor Arias en presencia del profesor Marciano Cruz en el Hotel playa Grande, aquel primero de mayo de 2003.--Dígame profe Arias si es cierto que para usted y los compañeros no hubo comida, los invito entonces. --No sabemos que ocurrió pero las tres se cayeron de las manos de los tres sirvientes, cuando llegaban donde estábamos nosotros tres. Dijo sonriente el profesor Arias. Quince días después estando Arias sentado en la mesa de los regidores con su oficina como el bacalao a cuesta, anotando los nombres de la oligarquía trepadora del partido creedora de ser dueña del comité municipal cuando llegó el señor Fermín Hilario Díaz, amigo suyo, y le informa: primero que el niño metamórfico había desaparecido, y después, que en la cama donde estuvo en niño fenómeno apareció un hombre llamado Dobleese, quien aseguraba llevar tres meses acostado allí, en la misma habitación, en la misma cama y con la misma pijama --¿Dobleese?—exclamó sorprendido el Maestro Aja!, pero como no, ese individuo es hijo del señor Virginidad Silvano y la señora Sensemaya Silva. Es sobrino de Lorenzo Silvano y Silvano --¿Está seguro, profesor Víctor? -- ¡Muy seguro!, es pariente mío por línea de mi padre, pero usted llegó a protagonizar fiesta con su saxo el 24 de octubre en la fiesta de San Rafael.
--Ahora sí,-- dijo Fermín-- haciendo chuispes con la lengua y los labios ¡Como no recordarlo, si a el le decíamos Virginidad Popó porque entre palabra y palabra se detenía para tartamudear. --Compañero Fermín. ¿Cuándo lo vio usted y en qué situación lo dejó en el hospital?
--Hace media hora exactamente. Estuve tratando unos ventiladores pero hubo un apagón y el calor confundía a los enfermos el sudor corría como detergente el los cuartos de los enfermos Hice unas supervisiones a los lugares donde debía instalarlos y aquí me tiene usted. En la habitación 43 estaba Dobleese comiéndose una canquiña sin embargo al acercarme le dije al doctor --¡eso que come no es canquiña sino vela a color! --¿Comiendo vela de cera o de pelma?
--De parafina. El señor Fermín guiaba al profesor hasta el hospital para percatarse de lo contado y oído, pero no pudieron penetrar al recinto, por orden de la administración. Las puertas estaban cerradas los guardianes alejaban a los que se acercaban. Sólo atendían las emergencias. Había sucedido algo extraño… luego el pueblo se enteraba de que… el gallo de Kuning cabalgaba, es decir volaba en el hospital esa tarde y con el pico recogía las ropas interiores sólo las de mujer y la depositaba en la cama donde Dobleese comía parafina. Cuando Arias lo supo señaló — ¿Desde cuando en Bajabonico de los Cañafístoles, habitan los fantasma? ¿Quién querrá que la gente crea disparate tan ilógico? ¿Dígaselo usted! Mientras Arias Fermín retornaban hablando de fantasma y de asuntos extrasensoriales en la oficina del Alcalde programaban asuntos para el lanzamiento de la candidatura a la diputación. En el restauran La “Ginita” el presidente del comité municipal y ex presidente del cabildo y jefe de un ostentoso cargo en el aeropuerto, repartía útiles escolares a padres humildes del municipio que siempre los han respaldado, y 45 compañeras madres solteras del municipio. A estas entregó, acompañado de su equipo político, útiles de cocinas y algunas raciones de primera necesidad. En Panorámico, pero en la noche de ese día de las madres, Ramón Manuel Montes impartía una charla a un público polifacético del perfil de una madre ideal. Puso ejemplos de casos de mujeres heroínas en la lucha compartida con su pareja para el desarrollo físico y moral de una niñez desvalida como la que abunda en los predios donde existen centrales azucareros. Florentino Flores hacía visitas a la sala de los enfermos cama por cama, intercambiaba con los pacientes un poco de energías positivas. Según el doctor Florentino la mayoría de ellos sufría de problemas digestivos que se reflejaba en la dermis sobre todo en el cuello y en las extremidades inferiores. Cuando llegó a la cama de Dobleese sintió recuperación comprobó que el militar comía vela de pelma creyendo ser canquiña también conoció la nueva manía ocurrida a partir que fuera puesto en retiro. --Dígame teniente, ¿por qué lo pusieron en retiro? Preguntó el galeno--Yo, yo fui prisionero, contestaba y miraba mientras agarraba la mano izquierda con la otra y la subía a la altura de las orejas en una actitud de aparente desesperación y de fuerte caos – poi negaime a trapasai ganado de un postrero a otro y según las investigaciones realizadas poi ei Estado Mayoi Jallaron ei cadavei de múitiples becerros ajogados en la laguna ei Cristai en la comunidad de Bayaguana peimítame que le cuente, Doitoi amigo, siendo custodia de la laguna Rincón me acusaron de vendei truchas, caipias y tilapias. Me llevaron a La “Descubieita” en ei lago Enriquillo entonces fui llevado a prisión poi comeiciai con los faisanes, con gaicines con caimanes, y traficai con la piei de las jigunas según ei gobeinadoi… el doctor se levantó de la cama donde había permanecido escuchando la confesión del enfermo y la entonación que ponía en cada caso para más tarde expresar—Está bien, pienso que se recupera pronto, yo estaré mañana por aquí—dijo sin apuro y se marchó. --¡Adios Doitoi, vueiva pronto! Angel Francisco visita al señor a Julián Bonilla Medina, y se instalan en la plaza de Chachito, chofer de Julián Bonilla, conversan de otros propósitos que tiene y como considera la empresa muy delicada le solicita cierta colaboración y consejos. Al finalizar el encuentro Julián lo convence de que debe apoderarse de por los menos dos de los medios de comunicación sugiriéndole buscar al Lic. Julio César Vargas para los fines. Después del pago de Noviembre en la oficina del camarada Síndico se produce un encuentro con los medios y los protagonistas de estos, las sillas estuvieron ocupadas por Humberto Francisco, Humberto García, Humberto Morrobel, Julio C. Vargas, Enrique Vargas. Cuando Milvíades, Ramón Manuel y Nicolasio, ejecutivos, generales y coroneles dejaron el restaurante la ginita en la puerta sur de la ciudad en la cercanía del rincón; Arias que vestía de blanco miró que el cielo de Bajabonico del las Cañafístulas también vestía de nácar. Sonrió por la grandiosidad y esbeltez crepuscularia todo preparado estaba para que Apolinario Amonterio presentara a los presentes las excusas por las ausencias del Alcalde, luego de la ponencia de Arias varios dirigentes de la parte occidental del territorio se marcharon iban molesto y como huellas dejaban maldiciones, por considerarse burlado una vez más. El profesor siguió hablando de los dirigentes de pensamiento anarquista, intolerante, arbitrario y tiránico. Del pasado reciente y de cuando en cuando bajaba a las breñas lejanas restauradoras e independentistas así podía enhebrar los pensamientos críticos y evaluativos de las actitudes de ciertos pulpos traficantes y usureros de la historia y la cosecha del partido –Pero esto no acontece sólo en Puerto Plata, no es un malestar de un sistema preparado en oficinas de la alta Burguesía nieta del Capitalismo usurpador asaltante entrometido y salvaje. El público atosigado por el hambre y muchas veces por el sueño que provocan las palabras huecas inhumanas y vacías reaccionó para aplaudirlo levantándose de los asientos cuando escuchó decir –Nosotros en la oposición somos gentes, en el gobiernos somos enemigos de la gentes…Nos condolimos y somos solidarios, pero tan pronto asaltamos el poder de humildes condolidos y solidarios pasamos a ser olvidadizos charlatanes y sinvergüenzas De pronto dio un brinco en término morales y dijo…-- sí porque ”vida que no florece es vida que no merece llevar el santo nombre de vida” y el público sin conocer a Lope de Vega, autor de esos versos citados por el maestro, volvió a aplaudirlo entendiendo que Arias se refería a la actitud que daban los dirigentes cuando ocupan cargos de alto rango, que cambian de la noche a la mañana… tanto es el cambio que se opera en los de nuestra organización que cambian hasta los hijos…cambian de dirección y lo que es peor que abandonan a la compañera que por muchos años compartió desde los sinsabores de los calieses de la tiranía hasta los allanamientos de la guerra fría durante los doce años de tardes Balagueristas. Desde que como criatura se convirtiera en un ente social y político hasta recibir el bautismo de la comunidad nacional e internacional. Bajo la lluvia de rencores de injuria que caían desde el borrascoso cielo desde el tiránico firmamento en las noches trujillistas siendo símbolo de honradez en las altas instancias de nuestra organización sembrando la consigna de vergüenza contra dinero y energizados por frases como no hay “corazón que sea capaz de traicionar a su dueño”
Cristinito Díaz se subió en una silla plegadiza para aplaudir y al tiempo que gritaba con voz de soprano:-- desde las montañas se ve el triunfo del Perredé. Arias señaló—si nos tocara hacer balance y ponderar entre los aspirantes a ser nominados tendríamos que colegir la necesidad de separar entre los cinco individuos incluidos Maritza Ureña, Graciela Fermín, Alejandro Aguirre diputado en el 1982- 1986 siendo aun un adolescente. En 1998 fue el último Síndico del siglo veinte y el primero de los dos primeros años del veintiuno, en el laborioso territorio del Mamey, al oeste de Puerto Plata. Este ha sido de los que no han cambiado de dirección, de los que no han cambiado de compañeras y que mantiene su número telefónico. Saborea los problemas y agonías de su pueblo digiriéndolos acudiendo a cualquier actividad propuestas o y previstas de los hijos del Bajabonico del Cabía y del Unijica o de cualquier afluentes a estos, ríos de las jurisdicciones de la provincia.
El balance sería con el señor César Peralta Vélez, quien para la realidad intentaba a la repostulación tampoco ha
cambiado de hogar y los jardines de este, se mantienen enviando los sagrados perfúmenes en el mismo vecindario familiar. Atento a los gorjeos musicales o deseos de delirios de la militancia que elevó a ponerse la banda congresual.
EL pueblo de la parte occidental de la provincia ha construido la fábrica de aire que consumiría en campaña ahora Bajabonico, Altamira y Guananico; Luperón, Isabela y Mamey son autosuficientes en aire en salud, como lo fueron en Azúcar, continúan riéndolos en café, leche y cacao, también en aguacate y en pescado. Estos mismos pueblos más antiguos del continentes cortaran el cordón umbilical entre los sanfelipeños para obtener el traslado de los recursos académicos y la construcción en Bajabonico de los Cañafístoles, un centro Universitario que irradie a las otras comunidades por ser Imbert de los Quesos y de Cañaverales, en sentido anatómicos , la cabeza del cuerpo territorial..Por ser en sentido geográfico la convergencia de líneas puntos aritméticos, geométricos por donde el lente de la comunicación coincide. En filosofía, en lógica algo menor, pero en política, en la guerra y en la religión no es poco lo que se emplea la mentira como método de lucha atropellando y engañando a la gente de ahí en embriague desde el suelo de la botella sirve de careta para los corchos y camaleones negocien con la verdad. Ruedan orgullosos por los crímenes cometidos siendo pérfidos con la boca de hiena bostezan cajas de podredumbres y toxinas. Después que el señor Síndico presentó la conferencia con los medios de prensa y los periodistas, se trasladó al hospital en compañía de Enrique Vargas, para saludar al doctor Florentino Flores vice presidente del partido revolucionario dominicano nuevo director de la institución médica. Visitó la habitación de Dobleese, que estaba interno desde que la misteriosa desaparición del niño metamórfico, y que algunos aseguran que Dobleese es la transmutación del fenómeno infantil. Angel Francisco dejó la sala por no comprender cuando el enfermo que a El, le pareció un simulador, dijo—Me caen sí… lluvias de calambres. ¡Juh cómo no! Que se corretean en mis pieinas, juh como río se deslizan… y como un rojo toro bravo brama… ¡si señora y si señoi… y ¡como no! ¡Mire sin moveise! ¡Juh! Y, ¡Cómo no! Mira ahora y podrá vei ei vuelo dei gallo de Kuningo, ei, ei animai…anda con la moitajuela... de la mueite. Dobleese se quedó hablando con Fermín Hilario Díaz, encargado de ventilación del centro médico, llevaba en los bolsillos juegos de destornilladores, que llamaron a la atención de Dobleese porque recordó a Felo Silverio Vásquez que cuando era cabo de La Legión de los cocuyos de Constanza, llevaba en cada bolsillo trasero uno y alegaba que era su arma de reglamento…usada en los servicios peligrosos. También llevaba alicates protegidos con gomas. Era muy temprano aquel día, la brisa de los Pastízales de la propiedad de los Brugal, entraba a pesar de hacer bastante calor, su temperamento Flemático aireaba los recuerdos de las hazañas de los legionarios de Petán, el hermano del generalísimo Trujillo. Pero como si tuviera un temperamento sanguíneo, saltaba los matorros de su débil memoria y dijo -Juh, esos legionarios eran pueicos de clavijas de aceros, ¡como no! Eran asesinos, sicarios ai seivicio de la tiranía. Unjú lo veo clarito. Felo llevaba en los bolsos de la guerrera siempre un juego de estrías, como les decía. Miró a Fermín Hilario para preguntarle:¿Poi qui tose tanto usted siñoi? Ei salió disparao como un cañón y levantó la faida de la abuela, mientras corría ei estoinudó pero voivió y creyendo…que la vieja era una montaña, se quedó doimiíto paso la noche soñando que era una paicela dei SIDA, y quei padrino FLOY no se contamina poi los gusanos… pero Feimin Hilario ¿poi qui continua usted tosiendo? ¿A caso los reflejos de aquei sueño lo aicansaron? ¡Dígame usted! Oiga… unjú… yo le pregunté poi qui, poi qui, juyiía y no era dimí entonces Feimin me respondió –no hombre no es de usted qui ando juyuindo e dei señoi de los destoinilladores como jesos qui lleva vusted, posí juia poi sei cosechero del mai dese malestai dei momento llamado Sida. Ese mai es tan fueite como una pieza de Aitillería, mejoi expreao de una foitaleza… Pero… ¿no es usted ei que tocacaba en ei Tropicai Bambú dei Lombiche?--Si soy yo el mismo que calza y viste.- manifestó el electricista. Dobleese quiso saber por qué había cambiado el orden o la lógica de tan vieja expresión. Prefirió preguntar las razones que llevaron a Puchy a quedarse dormido en la falda de la abuela creyendo que era una montaña.--Pregúntele-- ¿poi qui jizo crei qui la faida de la montaña era la abuela? ¿Sería qui se confundió? Lo hará o no lo hará, hágalo y así podrá vei ei gallo de Kuningo cabaigando en el lomo de buey Cabo de vela… pero don Feimin lo que me gustaría sabei poi qui cambio la lógica dei pensamiento y qui le preguntara a Puchy poi qui juyuia desaforiao, luego de voiveime ei niñito metamoifico. ¿Me responde usted? En caso qui ei le respondiera… entenderán qui no fue un laigo sueño qui tuve ¡Uno de infantería! Al darse cuenta que le cuestionaba con la mirada repostó – no es poi na, ni na… simplemente poi raro.--¡Cuénteme Dobleese! Como le tenía confianza a Fermín continuó la letanía que lo satisfacía.
--cuenta qui en los sueños vio una jangá de homres y mujeres eran aitos unos otros goidos y entrimiliados sabe usted, Fermín muchas veces sonreía y oras movía la cabeza para ir con el pensamiento del militar, estaban bien vestidos, limpios y peinados como comeiciantes, pero… los goidos estaban en ei flanco erecho dei poitai principai de la iglesia dei lugai según ei sueño, era ceica dei centrai azucarero. En ei lao izquieido señoi, peimanecían los flacos deigaditos eran aito... lo dañino dei cuento es qui en cada fila había un cura caco pelao con boca grande y negro bigote qui con un auxiliai iba boca poi boca como si llevara una ostia le entraba un pedacito de caigne de gente qui los dei flanco erecho saboreaban como eran regoido la trituraban simulando felinos como una máquinita descuaitizadora. Los dei lao izquieido… heimano mío dijo Doble secándose el sudor que desembocaba en las comisuras labiales, dando muestra de asco y nausea como no comieron le coitaban la cabeza.
--¡Ah bueno! Espetó Fermín No sería poi eso que juyuia Puchy?
--Señor Teniente, explíqueme por favor… ¿qué eso de parcela del SIDA? -¡Caramba don Feimin Hilario esa es… Se rasca la oreja derecha y estornuda encima del compañero y le humedece la cara. Esa es, continua…la cosecha dei momento, la más entoipecedora, son las drogas, y también, Don… peoi que la peste, qui ei cólera, en su laiga jefatura. El teniente Apolinar Silvano silva, sonrie porque recuerda que estando afectado por el mal… señala—aquí donde me ve usted… ¡Yo sólo soy poitadoi! Pero nada más, cuando me convierto en ei niñito metamoifico. La tarde era tan calurosa que en el central Amistad ocurrieron igual que Montellano y el Ozama en la comunidad de San Luís en el Distrito Nacional. En el hospital los ventiladores no funcionaban por falta de energía eléctrica. Fermín Hilario Díaz dejo a Dobleese y fue detrás del apagón pero regresó al oír que este lloraba como un pequeño al que le negaban un biberón de leche lo encontró haciendo nudos a las sábanas teniendo un extremo en la boca. --¿Qué le sucede señor?—preguntó el señor Díaz. --¡Pero bueno, manifestó con sonoridad—es que no vez que estoy llorando? ¿Poi qui la gente jace preguntas conociendo la respuestas? Señaló acongojado y mirando en perspectivas lloro poiqui ayei el saigento Puello uitmó mejoi dicho ajoicó a Plácido Peidomo --¿Por qué lo ahorcó señor? --Ei raso Placido era ei escribiente dei Mayoi Guillén quien acusaba ai mecanógrafo de desconocei las reglas de oitografía y ei mayoi se encajonaba para finalizai echandole 13 y 15 días en prisión. Cuando salió de cumplil las número 13 hizo lo qui habia jurado: matai al mayoi. Un grupito de la compañía a la que peitenecía Perdomo, voceábamos en plena Audiencia y ei Juez primero no nos jacía casos y nos dejaba repetíamos jasta ei cansancio — ¡Saigento Puello mata guaidia! ¡Saigento Puello mata guaidia!
Otro caso qui no me dija doimil señoi músico, es la mueite de don Eudoxio Piña, ai más, y Eufraxia sucedió ei día de San Miguel, ei 29 de Septiembre, ei mes más fatalista quiai la patrulla la dirigía ei soldado Miguei Zeuci López Díaz naturai de aquí de la jurisdicción de Cabía caminaban poi ei centro de la calle Duaite de la ciudad de Higuey en plena zona comeiciai sin más ni más Lopito oidenó disparai a los esposos Piña Salían de la iglesia Maitín Lutero, oidenó dejai los cadáveres tirados en ei pavimento, permanecieron cinco horas extraviados en la misma manzana donde ocurrió ei apestoso crimen según ei como si caminaran en círculos voivían ai punto de salida. La presencia de Fermín había alivianado las penas y la pesadez que embargaba a Dobleese. Continuó llorando y contaba. Bebió con tranquilidad quien sabiamente le entregó y lo dejó dormido. ---Con el triunfo del Partido Revolucionario Dominicano,--explicaba Arias—en Bajabonico de los Bonilla, los sueños y las esperanzas del pueblo humilde aglutinadas en la misma blancura del arcoíris político iniciaron una ferviente cacería de empleos. Muchos son los casos para mencionar, pero los de carencias de tactos dirigenciales, la repartición de recursos sin tomar en cuenta la situación individual que beneficia a los arribistas cuñados, primos y hermanos y hermanas de las nuevas concubinas de estos dirigentes que una vez fueron como ellos, ahora corchos crápulas horrorosas nenúfares furfurales individuos sin historial de partidos porque como toros mañosos brincan las alambradas para el verdor de los próximos cercados. Debemos señalar los casos de indolencias y faltas de tactos de una didáctica y Pedagogía dirigencial, que no toman en cuenta la vida individual del dirigente para desfavorecerlo o favorecerlo por este poseer en su libro de servicio posee una hoja transparente ajustada a los cañones ortodoxos de la organización lo apartan hasta lo empujan dándole una muerte moral y social pisoteando los organismos.
Los que correspondían a las ramas cercanas al cogollito del árbol adornado con el fruto del triunfo, se sintieron dueño de manjar y limpiaron las mesas y se llevaron las piezas de una vajilla popular como si hubiesen estado en una competencia en un campo abierto en batalla campal sólo elevando el individualismo aberrante y demencial.
Para ellos había siempre, para los oligarcas y burgueses siempre hay donde cortar. Conducta personalista corrupta contraviene los cimientos y la zapata la institución sana y honrada. Se creyeron ser oficiales que iban al asalto del “cuartel Moncada” estoy muy lejos de aceptar que el símil sea bueno por la diferencia ser oceánica. Y en verdad asaltaron el erario asaltaron las alacenas cuales mercenarios ímprobos deshonestos carente de la moral política que requiere el liderazgo. Terminan ciñéndose la correa de coroneles y las barras de generales sin tropas y sin batallas que los honren. Ostentan altos lauros sin esfuerzos, son Camaleones que al abrirse el puente de la transición—agregaba el maestro- compraron un boleto de peaje desde la verandilla y al verlo ladeado se enquistaron y cruzaron.Un militante semi analfabeto, se levantó emocionado del asiento y abrazado por los ojos de los otros participantes entre trémulas palabras preguntó--¿Dónde estaban el 14 de junio del 1959? ¿Dónde el primero de mayo del 66? Unos no habían nacido. ¿Dónde durmieron durante los doce años de relámpagos, truenos y tormentas coloradas? Hoy son altos funcionarios, generales, algunos se lo han ganados quizá todos. Quién le autorizó a romper el huevo de la esperanza, a la casa de los que quemaran la hojarasca dejada por las manos depredadora del 30 al 78? Antonio Mora, se sentó y al ser premiado con un fuerte aplauso sonrió mientras se quitó el sudor que cubría su frente. Arias completó la inquietud del secretario general Mora Silverio, en los rincones y recovecos de la privacidad quedan los aleteos de los remordimientos y amargores dando el placer apropiado con las virutas de la violencia que ofrece el poder haciéndose dueño de los recursos del procomún los bienes de la comunidad.
Allá en el ensanche los Mina en la capital de la república Emiliano acostado en una retahíla de sillas blancas deja circular por la rapidez de su memoria imágenes, ingratas vergonzosas para la prudencia y el decoro y para la honra veía un miembro de la comisión positiva medía y ordenaba las empalizadas los terrenos de Consejos Estatal del Azúcar (CEA) y un edil medía las cercas de los nuevos solares, dejando en la intemperie a los militantes y simpatizantes mientras miembros y dirigentes se mecen en las orgásmicas posición principesca. Masticó un poco de aire como lo hacía su padre don Valentino para preguntarse — ¿Por que iría huyendo un grupito de compañeros de Saballo gritando consignas ntiimperialistas y también la de los Llanos de Pérez y los de La Escalereta? Las lágrimas lavaban las palabras refrescaba las pasiones y desajuste de las madres y de otras mujeres obreras pobre pero corrieron por la siembra de costillas, de codos, de bocas y de tobillos en tonadas de peones en tardes metamórficas empuercadas por las botas de los incontrolables de los doce años como nuevos templarios de la democracia blanca.Se mueven en trullas en multitud de aguinaldo abriendo puertas y ventanas llevándose bidones y las Ubres rompiendo aldabones para golpear con ellos y atar las piernas como las manos con la corbata que quitaran del cuello del prisionero incinerado al lado del cuerpo de Narciso González considerándose Dioses legítimos hijos del poder montado en la silla de Atila y cortando el cuello con la espada de Alejandro y de Napoleón.
La militancia ahora aúlla como primates y lobos aulladores, no le entregaron la tierra, al militante hecho pueblo amando su derecho y mordiendo la esperanza para verla despertar en furias envistiendo la vecindad la del lado del Río.
La multitud entró a la casa del enemigo rompiendo la ley favorable a los imperialistas entra a las habitaciones donde celebran el congreso para apagar el pabilo y llegan los dispersos y bosteza como si recordara que era él el coordinador enlace en el período de preparación y apresto de la candidatura. –He sido seleccionado por la dirección del partido para enlazar esta comunidad política y a Sosua había dicho Emiliano en 1995 cuando el doctor Peña Gómez aspirase a la presidencia de la república. Quien sacó en primera vuelta el 47.84 por % de los votos emitidos. Es en el 1998 donde Angel Francisco es favorecido por los votos blancos acompañado de Ismael Cruz Bonilla como vice Síndico, pequeño burgués instalado en la urbe Neoyorquina desde su primera juventud, siendo fiel con ese compañero hay reconocer que no ha estado nunca alejado de su municipio en ninguno de los órdenes, hace vida desde la lejanía hasta en el calor de cualquier evento cultural. Ismael como la mayoría de la juventud Imbertolina no tuvo un padrino que lo empujara hacer siquiera un oficio técnico en el central Amistad o Montellano… fue de los pocos que estuvo un asiento en la universidad donde se estudió sociología Luego a pesar de tener idea antiimperialista se hace residente en las entrañas del imperio entrando a un círculo de contradicciones en su manera de pensar y de sentir. Era un ferviente luchador democrático, un luchador proletario en contra de la democracia burguesa. Ismael no fue nunca consultado en su rol de acompañante del ejecutivo edilicio, tampoco tomado en cuenta en las reparticiones de cargos o canonjías amarillas, no tuvo un lugar apropiado para ejercer las funciones que el pueblo imbertolino le había dado y optó por ausentarse dejando en su lugar al compañero Deodoro Ferreira, y a la secretaria Silverio el señor Cruz Bonilla repartía el cheque entre sus familiares en una minoría y la mayoría a los militantes del partido y a ciudadanos comunes hijo del pueblo. Fermín Hilario volvió al hospital, llevado por el grado de responsabilidad que le caracterizaba a individuo de su generación. Hizo intensos ejercicios mentales para no encontrarse con Dobleese allá en las habitaciones y al pasar por número 34, fue sorprendido al ser introducido con cierta violencia inusitada.
--¿Qué ocurre que no está en su habitación y por qué me hala de esa manera?--No es nada grave don Feimin Hilario, quítese usted la preocupación, pero deseo que sea el que escuche mi confesión poique yo no asisto a donde cura ni donde capellanes. --Comience por favor manifestó el señor Fermín Hilario sorprendido porque el lenguaje que hoy emplea Dobleese es menos arcaico. --¡Hoy me siento casi bien! Además usted es para mí como una cómoda estancia donde me tranquilizo. ¿Comprende don? Lo que le voy a contai yo no lo viví me lo contó ei soidado Joseito Torres Madera nacido y criado en la “Barranquita” allá en la comunidad de Esperanza. Primo heimano de Candito Torres jefe de la caicel La 40. Decía ei, -- que en esa caicel había un lugai llamado ei corrai y otros donde aplicaban las mas viejas y diabólicas toituras cuando eran mujeres muy jóvenes la desnudaban figúrese usted, y en las zanjas de los senos apagaban decenas y hasta cientos de cigarrillos maica Hollivows Según Pablito Torres heimano de Joseito a los machos llegaron a apagai 123 cigarrillos arroz negros en el cuello dei ano. Pero lo peoi era la “Perra enamora” de Candito Faustino Pérez, la llamaba “Perra en caloi”, ese animai la tenían en ei Corrai, y llevaban a muchachos fueites conspiradores, la perra cuando sentía un oloi a sangre, o yo no se, que cosa, le quitaba la correa ai prisionero toiturao, con los dientes amolados con limas eléctricas. Fermín Hilario Díaz se sentía atraído por las confesiones de Dobleese conocedor de millares de hechos criminales aun desconocidos por la ciudadanía nacional, por eso regresó cuando solucionó las averías en el servicio de mantenimiento del hospital, donde laboraba en la categoría de iguala. Sucedió don, que esto tampoco lo presencié yo, me lo contó Chiquito Madera, decía ei qui su mamá era de Laguna Salada de Mao qui estando muy pequiña su padre dijo –yo soy jijo de Panchilo Madera hombre dueño de la mejoi tierra de lo mejore cuitivo de lo mejore ganado de lo mejore postrero y de las mas bellas jijas y de la mas jeimosa gallinas de pelea. Ese Panchilo era un hombre honesto, honrado, noble y muy serio amistoso reseivado, pero era enemigo de lo mai jecho, ¡Si señoi! ¡Sí señoi! Tenía mas cuaito quei bancuo agrícola de la rigión y eso moitificaba a Trujillo. Un día Trujillo llamó a una reunión al Juez de Paz, al gobeinadoi, y ai Síndico municipai, que eran tres heimanos dueños de prestigio oficiai. Pasaron unos días señoi. Ei gobeinadoi dio una fiesta para ei generalísimo, invitaron todas las doncellas dei lugai. Y sólo no estuvieron las jijas dei terrateniente Madera. Ei jefe ai enteraise oidenó la mueite de Panchilo y autorizó a los heimanos Vaigas apropiaise de los bienes y hacienda dei difunto. Pero… Teniente, dijo Fermín poniéndose un puño en la boca como si fuera a bostezar, ¿Por qué el no envió las muchachas a la fiesta?--Poique ese día, era seis de enero, día de los Santos Reyes, y todos los Madera estaban en una fiesta, con los jijos de los trabajadores, en una finca en las afuera de Maitín Gaicía; ese mismo dia, ocurrían muchos jechos qui escalofriaron ai tirano y a la tirania, ligados ai qui luego seria jefe dei movimiento catoice de junio. Parece qui la familia dei señoi Madera estaba maicada, poiqui los caliese deteiminaron qui en las vacas, qui se comieron en la finca Guayubín estaban los siñores Manuei Aurelio Tavarez, Chailie Bougaert y el Dr. Manuei Tejada Tolentino.--¿Y qué tenía que ver eso teniente?
--¡Será posible, Feimin! Qué jun individuo como justed pregunte jeso? Es que no se enteró de la participación de jestos hombres en la revueita mejoi decío, gesta dei catoice de junio dei 59? Ese doitoi Tejada Florentino lo mataron en la silla eléctrica y lo de Manuei Aurelio, tuei mundo sabe qui si saivó de la tiranía. -Ya que estamos junto y como usted viene de esos afanes de los cuarteles me gustaría preguntarle Teniente, a quien era que llamaban “Tigres Gato”
--En veidad no se a quién llamaban Tigres Gato! Lo que está ligado a esos hechos que hemos menuzaos y en veidad creio qui vusted lo confunde es ei funesto “Tigre de Bonao” esa figura la peoi quizá se infiltró en ei movimiento 14 de junio. Llegó a sei uno de los veidugos de la 40, junto Candito Torres Tejada, con Clodoveo Oitíz y Tony Sánchez, jefe de la aviación dominicana Finaimente amigo yo estoi siguro qui cuando le jaga la historia de la mueite de Siriaquito Bonilla yo podré doimil tranquilo y quizá un poquitico más… me permite uste señoi qui si la cuenti, si o no, dígame. Sucedió una mañana, en Arroyo Capitán, en Bajabonico dei joyo de las Gatas. Ei Naipe era como se llamaba Agusto Naipe Bonilla, dejó la casa pateina y se encaminó para la casa dei profesoi Arias… pero en ei camino decidió ir mejoi a la dei síndico Angel Francisco, como no jalló a Angel Francisco se quedó mirando un Juego de sofboi que celebraban en ei pley de Bajabonico de la “Gaiza” Naipe Bonilla era un joven bueno, qui jablaba muy aito, de coloi moreno, de temperamento sanguíneo, con ei brio de un traitoi se podría dicil qui en téimino comparacionai era ei bueyito jijo dei buey que mas jala, con tuá la fueiza parei encaste. Ese vecindario a menos de seis casa saipicadas como son las viviendas dei campo, vivía Siriaquito Bonilla muchacho de dotes físicas como la de un marino de guerra. Tenía la piei morena, brazos fueites, había sío lanzadoi amateaur de 98 millas, poi segundo. En una palabra… a pesai de seis un hombre de 5 pies, y 7 púigadas. Siriaquito ei Chivero, era mecánico de calidad, en ei ingenio Amistad. Ei chivero, La Chiva, o como lo llamaron sus amigos de infancia, y Agusto Naipe, eran primitos heimanos, en ambos primos habia una garrocha distanciadora que lo empujaba a dianas diferentes. En cada uno, la eneigía diabólica, qui lo adoinaba era tan fueite, qui podríase comparai con un toinado interioi eran dos toinados. Ocurrieron dos cosas qui produjo cambios en la maneras di aictuai de estos vecinos primero La Chiva recibió como paga de prestaciones suma de dinero qui ni sus familiares asimiló, cuando cerraron los centrales azucareros qui di obrero de teicera. Siriaquito compró un carro y se creyó de la buiguesía aristocrática… Ei Naipe escuchó cuando Siriaquito dijera eufórico — ¡Y cómo vivirán los pobres! Segundo fue ei triunfo de Angel Francisco como Síndico municipai qui la vida de soidadoi dei Naipe dio un giro de 180 grados y a paitil de allí no le faitó 1000.00 en los boisillos. Ahí quedó sellada la desgracia de esa heimana familia con la privatización de los ingenios, quizá o con la entrega dei podei qui entendió, ei Naipe qui tenía, con sei miembros de los legionarios de Angel Francisco. Hai qui sei justo Ei Naipe no molestaba a naiden solo qui era pribón faifullante y echaba aguaje pero nada mas. Esas foimas Feinín… a Siriaquito lo peitúibaban de tai manera, qui su situación se fue oscureciendo… ai no tenei trabajo… como tenía antes de la privatización del central amistad. Agusto Naipe andaba cuadrado en un viejo motoi o a pie, pero sin preocupaciones mayores que no fuera la de su tragos moderados y la pequeña pensión que pasaba a su pequeña niña qui ese domingo teiminaba baustizai. Estaba muy contento y se fue a celebrai y a dai gloria… Habia juego de Sofboi, en ei pley la gaiza- se lo viá decío,-puso una mesa y cuatro sillas, en la sombra dei anon, donde Arias y Angel Francisco, jablaron de la reeleiccón, y de las aspiraciones a sei precandidatos diputacionai, y comenzó a bebei con amigos dei lugai Ese Naipe habla con tanta potencia cuando se emocionaba qui rompía los tímpano a los vecino Siriaquito qui estaba a medio kilómetro ai escuchailo fue pa los airrededores, buscando piquiñas, ya sabe usted, luego de de teiminai la cuaita botella y habei pasado palabras insuitantes con Siriaquito se maichó pa Bajabonico de joyo de la gata… Media hora dispués llegó Siriaquito buscando vainas habia mucha gente estaban su vecindario cualquiera que gritara era escuchado poi los hijos y poi los heimanos o poi los padres.
Fermín deseaba irse pero como conocía a El Naipe aguantaba en silencio la parsimonia con que estaba adoptando Dobleese al tratar este tema para el muy espinoso.
--Como le dicía señoi, cuando ei Naipe vio qui Siriaquito
no le dejaba escuchai la bachata qui habia mandado a montai en la consola amplificadora se molestó tanto qui li reclamo qui lo dejara en Paz, ricueido qui le dijo—tu mi tiene cansao… estamos jaito de tu faifulleria y di tua arrogancia ¿Poi qui no ti va mejoi a pasai ese jumo con tu mujei y con tus jijas? -Agusto Naipe Bonilla, algo nervioso fue a sentarse y cuando dio la espalda la brisa de una pedrada que sólo rozó la camisa lo asusto pero no dijo nada. Uno de los que andaban con El Naipe, le aconsejó dejar hasta ahí el enredo y se marchó, cuando naidie lo esperaba ya, aparició con mayoi diseo de brega y de pleito; traía tres piedras de media libras todas las que lanzó pegando una en ei hombro erecho dei Naipe… este recuperó el revoivel y le jizo un disparo qui lo dejo moitaimente herido en ei momento nadie jizo esfueizo poi socorrei ai herio. Habia mucha gente en la pequeña barrita bebían ai aire libre lo qui no se tuibaron salieron juyendo. Ei oficiai de la legión de Angel Francisco voivió y estando tirao en las úitimas le disparó de nuevo luego murió en los brazos de la soledad y el matadoi se entregó en ei cuaitei de Bajabonico de los Cañafístula. Fermín Hilario al retirarse a su residencia en la calle la gallera, pensó en Modesto que era como le decían al Síndico y entró a su oficina para decirle un recado que su esposa Cristina le enviaba. --¿Cómo esta Angel Francisco?—peguntó quedándose agarrando el manubrio de la puerta con la mano zurda. --¿Mejor a y usted cómo le fue con Dobleese? --Bastante bien porque aprendí muchas cosas de la vida suya, que tuvo en los finales de la tiranía cuando el era KJ. ¿Qué es eso llamado K J? --Pienso que en su jerga significa principiante en una de las instituciones militares sin pasar por academia. Es como Congó como dicen los haitianos a los picadores de caña que por primera vez llegan a los bateyes azucareros.--¡Hasta luego Fermín! Dijo Angel Francisco que levantó el teléfono y comenzó una larga conversación con Tomy Durán, gobernador provincial.
--Está bien nos juntamos donde el profesor Vittorio en Bajabonico de la “Garza” -- expresó el Gobernador.
--Okay nos encontramos donde Arias. Horas más tarde de la llamada del Gobernador a Angel Francisco y Arias se apersonaron en la habitación del teniente Apolinar Dobleese, en el hospital que desde días antes dirigía el doctor Florentino Flores. Haciendo cambio en el contenido social de los fines clínicos de la institución. En la cancha de los Llanos de Pérez, inauguradas semanas antes por las autoridades edilicias, el señor Pepe Cruz Henríquez y junto a otros dirigentes hacía entrega de útiles deportivos y escolares, a estudiantes y miembros del Club, José Francisco Peña Gómez, de la comunidad. Luego que la doctora Ortiz Bosch hubiese estado en reunión con dirigentes del municipio, en primer orden Jeralquilino Carvajal Cabrera quien en esos contornos provinciales era uno de sus leales. --¿Cómo está señor síndico?—saludó sonriente el enfermo despierto luego de haber dormido 29 horas ininterrumpidas.--¡Estoy bien!—respondió el incumbente municipal.--¿Usted no es, hijo de Pueito plata? El Alcalde sonrió y asintió pausadamente con un movimiento de cabeza Ese papá suyo es pariente dei mío sí, yo lo conocí cuando ei era, ei encaigado de la bodega dei centrai Amistad. La gente lo quería poique daba ñapas, es veidad que ¡enamorado si era! Pero era muy alegre, contento, bigote más moreno que su piel, que era como la noche… así parecido ai suyo. Tenía una tía llamada Victoria, sigún ella se pasmó y jacía muescas con la cara, los muchachos juyíamos de esa probecita buena mujei, heimana de Pancha, creio que era como se llamaba la mamá dei primo Tico, ¡veidad señoi! --¡Sí así es! ¡Nosotros nos vamos, vinimos a saludarlo…! --No, esperen un poco… tengo varias cosas qui diciles.-- No podemos dilatarnos más porque tenemos compromisos, pensamos volver a traerle un regalo qui a usted le agradará.--Siendo poi esas razones… ¡Aceipto pa qui vueivan! Dobleese al ver salir a los dos funcionarios municipales recibió ráfagas de energías Mnemotécnicas y empezó a vivenciar lo que al principio era un hilachero brumoso de un pasado no tan cercano que no pudo limpiar con facilidad. Se esforzaba por recordar la cara de Arias queriéndola asocial a los días de las temporadas de cosecha de frutas del mango del maní, del cajuil…pero en definitiva no pudo. Pero cuando un conserje le llevó la comida de medio día, recordó que Arias, era un hijo de Evaristo Cruz Medina, primo hermano de Virginidad su padre. En la mesa de los regidores, ocupó la silla correspondiente al señor Dileccio Peralta Calvo, regidor Peledeísta, miembro del Partido de la “Liberación Dominicana” y a pocos segundos no había asientos vacíos. A su derecha estaba Bobón Batista, quien se había
recuperado del infarto benigno recibido cuando supo que el cargo por el que había puesto todo su empeño para que el PRD, ganara las elecciones generales del año 2000, se lo otorgaban a un camaleón arribista enemigo de la dirigencia y militancia blanca. Las manos les temblaban hacía ejercicios terapéutico con una pelota de goma maciza y los movimientos faciales eran torpes algo anárquicos carente de armonía. Había llevado su poder vital y de auto estima a muy bajo nivel, el caso de este compañero era el número 113 en el territorio nacional. En la vivienda de la señora Arias, el Gobernador hablaba con Arias, con Dámaso y con el Alcalde Angel Francisco, de lo bonito que era cuando “--nos reuníamos bajo la mata de limoncillos en la ranchetica, donde hicimos el sancocho… y en ese mismo lugar fue donde nos reunimos cuando murió el secretario general del partido del comité de Altamira.--Esa tarde-- manifestó el profesor Cruz Arias,-- estuvo lo que los ingenuos creíamos era… lo más limpio y más puro de la organización, sin muchos apuros para desilusión específicamente mía, eran simplemente individuos comunes, de la misma fanguería salidos en apariencia, de los mismos muladares sociales, Camaleones con intensiones individualistas aberrantes y muchas veces burguesas e imperialistas --¿Qué día fue ese?—preguntó Angel Francisco, mientras ponía en el suelo el vaso de cristal, donde bebiera agua servida por Yumidla hija del profesor. ¿Y quiénes eran los que vinieron? --Ese día eran las tres de la tarde o las cuatro… al retornar del cementerio de enterrar al secretario general del partido en Altamira, vinimos a saludar al “Profe”: Mundito Brawun, Otto Gómez, Rafaelito Mena, Sacarías Ripoll… ocho acompañantes—manifestó fría y tiernamente Tomy Duran. ¿Recuerda el accidente del tanquero gasolinero en la pista donde murieron muchas personas del entorno del ingenio y los Llanos de Pérez? También recordaron el derrumbe de la verja, en la vivienda de la señora Bonilla Cruz, que por ser del PLD quiso servirnoslas amargas. Cuando reconstruíamos la moribunda carretera, uno de los camiones que movilizaban la tierra la destruyó. Y Arias y yo pagamos la mayor parte…--También el ayuntamiento manifestó el Síndico ---Dígame profesor Víctor. ¿Qué relaciones había entre usted y Milagros Esperanza Quiñones Silverio? --Entre Milagros y nosotros no existió nunca unas relaciones de parientes, como los éramos, por los cuatro costados, porque la prima Esperanza… a pesar de ser ascendiente de pura sangre mandingas, como era nuestra bisaabuela y nuestro tatarabuelo, era prejuiciosa y racista que yo no compartía. Fíjese era amiga suya más que tía Barvina su difunta madre.--Me di cuenta de eso el dia que ella ofreció para mi persona, el adobe de chivo picante. Nos dimos cuenta que no comió… esa tarde.
--Si porque esa era una “comida Llave” a la que yo no estaba invitado… Además en Bajabonico, en Imbert, un poco menos que en, San Felipe de puerto plata, a ese tipo de reunión para poder ser grato, hay que entrar con el sombrero en manos pero dejando la cabeza en la galería.
Luego de refunfuños y planificaciones hablaron de la Cancha para la comunidad, y de la construcción de las aceras y contenes para Bajabonico de las “Garzas” fueron entonces cada uno a su privacidad. En la biblioteca Municipal, Nicolasio de los relámpagos, estaba con Virgilio Rodríguez, con Franklyn Gómez, y con Mongo Cruz y Andrés Cabrera hablando, (mientras en el frontal esperaba un grupo de estudiantes de secundaria para que le facilitara información sobre el desembarco de las guerrillas del 14 de junio en 1959,) de la salud del pueblo luego del nombramiento de ellos como policía de ornato. Ya conocemos que el desembarco fue por Constanza, Maimón y por Estero Hondo. Como el resto de la entrada a territorio es conocido por todos hablemos de lo que sabemos de nuestro entorno. En las montañas de Maimón en la costa de Guzmancito… Nicolasio saludó a Bissón que se interesó por el tema y a Tony Naipe, que buscaba a Angel Francisco —parece que huían desde la costa llegando a la casa de mi vieja uno hondureño y el otro dominicano, morían de hambre, y de sed habían perdido la logística de los alimentos, cuando estuvieron sosegados y habiendo bebido un poco de agua y de llenar las cantimploras conversaron con Marcos Hurtado primo hermano de José Antonio Hurtado dirigente del PRD residente en la comunidad de Barrabas. Les dieron dinero para prepararles desayuno pero con la presencia de Albertina Severino que fingió buscar agua se sintieron inquietos entonces abandonaron el lugar. Además no podían permanecer por muchos tiempos en lugares desprovistos de entornos favorables, que les protegiera de su identidad ambos guerrilleros anduvieron por el suroeste de las “Canas” y de la “Escalereta” se encontraron con el señor Nicolás de Jesús miembro de cuerpo bomberil de Imbert de los Cañafístulas, caminaron y se internaron en cerro gordo frontera con Guananico. La duda con Albertina Severino era cierto, minutos después que se habían marchado de la casa de mi madre, llegaron a esta el teniente Firito y los cabos rurales Juan Silverio y Celesto Mena… cuando llegaron a las orilla del río Caonabo creyeron que se habían extraviado porque se sentaron en una roca y descansaron hasta mojaron su cuerpo con agua caída de el cielo de boca de Caonabo. Dobleese se creía ser el nuevo Sabelotodo, y escuchaba voces como:--¿Para dónde van ustedes? También veía los adornos de las calles del pueblo en las puertas y ventanas, ¡Van para las fiestas!.. ¡Para cuál fiesta? Para las elecciones (continuaban las voces,)… ¿Y las elecciones son unas fiestas? --¡Si señoi… asina es! --¡Unjú!... fiesta para quién?--¡O para quiénes?--Esa es, la mejor pregunta que he oído --¡Cuántos me alegra saberlo!--También a mí—respondió la voz Mientras ocurría el diálogo que deleitaba a Dobleese, Carmelo Despradel Medina Cruz, encargado de Coraplata en Imbert de los Cañafístolas, conversaba con Celia Dorki, El Men, Silverio Vásquez y con Antonino Espinal. de la mejoría del servicio operacional a la población consumidora. El men dejó la oficina al enterarse que el Teniente Dobleese estaba siendo perseguido por las custodias del hospital, este se había marchado diciendo que el gallo de Kuning cabalgaba de nuevo en el lomo de buey Cabo de vela. Una multitud de las calles aledañas al centro clínico se aglomero para conocer de los acontecimientos reales y efectivos. 24 horas después regresaba a la cama donde conversaba un poco sosegado con el teniente Jacinto Puente y Puente, (alia Doblepe.) Dobleese aun sollozaba por la muerte trágica de su hermano Celso Silvano y Silva, en las proximidades de la barranquita en el municipio Esperanza. Celso entró al ejército en 1942 y su fama de azote creció como crecía la tiranía, era un terror en la carretera hasta después de la vida civil, el era una banda. El era esbirro de acciones innobles. A mi hermano le agradaba engatusar hasta a sus jijos. Doblepe se dio cuenta que su amigo Dobleese mejoraba la entonación y las expresiones arcaicas la iba anulando de sus coloquios lingüísticos. Permanecía llorando a pesar que Doblepe, que habia llegado desde Higuey para darle sus sentimientos de pesares, y para acompañarle en sus dolores… lo stimulaba a sobrellevar la carga emocional. --Pues sí Jazo Celso era un Camaleón…pero era mi heimano. Era una vieja zorra… un zorro empedernido pero era mi heimano…era un pueico jociadoi, era ei segundo jijo de la familia. Para Puente Y puente las lágrimas de su amigo eran pajas para las garzas, el sabia que odiaba a su hermano, porque le cobró 150 pesos para llevarlo a la fila de un ejército de atracadores, y el pago de 36 cuotas de a 35 pesos… mas la cotorra que su padrino Floyciano Trejo le habia regalado el dia de su confirmación.--¡Está bien!, es así… ya no sufras más… Yo vuelvo, voy a la toma de Posesión de un hermano mío que ganó la sindicatura en la provincia de Higuey. Dobleese vio partir a su amigo mientras dejaba que dos largas lágrimas lavaran las toscas y muy desvalidas mejillas pálidas, miraba por las persianas buscando la figura de Angel Francisco, quien le habia prometido regresar con un presente y deseo que fuera galletitas de soda con queso GEO, aunque sea una cuarta… no es que tuviera hambre sino quería reponer energías luego creyó que a Jacinto lo habían reintegrado al ejército y sintió una ligera alegría, y sonrió. Esa presunción le hizo recordar con limpia claridad una retahíla de imágenes procedentes de un lejano archipiélago infantil y juvenil que lo alegraron entre paredes de melancolías y de nostalgias tiernas. Veía la lozanía de los labios de Patica de Chivo… copiaba las envoltura del vestido sobre sus senos y con la imaginación ya debilitada echaba hacia un lado para más que mirarlos contemplarlos. Puso en la nuca sus dos manos y con los codos produjo la sombra de Isabel Lengua Suave, y aunque también mujer suya fuera sólo. Vislumbró con dejo de reminiscencias el pelo y los vellos protectores de sus labios. Al cerrar los ojos se dio cuenta que veía con mayor y mejor calidad… los apretó y separó como de un cortinajes entre las islas de sus memoria la figura del Máximo el Borracho, regando gasolina al cuarto donde el y la mujer de este dormían luego de tres largas horas de complacidas caricias amorosas pero sonrió cuando los fósforos de Máximo no produjeron flamas. Del otro lado de las cortinas que eran de frágiles bordados plomizos estaba el rostro del Sargento Puello ahorcando a Plácido Perdomo. También corrieron por las escaleras flácidas, carcomidas de su imaginación…
Pero en la “Ginita” Angel Francisco agradecía al equipo de trabajo que le acompañó en la larga precampaña en la que no obtuvo la totalidad necesaria de los votos convencionales para calificar como candidato a concursar en las elecciones parciales del 2006.Hablaba sin sombra ni resquemores ni complicados prejuicios consecuentes de la derrota. Angel Francisco era un combatiente de mil batallas y conocía los altibajos de las luchas convencionales.--Estoy agradecido de los compañeros que anduvieron de las manos con mi candidatura y con mi persona los que subieron las resbaladizas peñas entre enjabonados caminos lindados de matojales muchas veces mal olientes en la campiña electorera donde dejamos carrera olímpica, impresas nuestras huellas de grupo pacífico combatiente que respeta las honras ajenas individuales o colectivas. El triunfo fue a otras manos quizá tan valiosas como las nuestras—manifestó desde una mecedora de ébano negro. El pequeño auditorio lo aplaudió como siempre mientras recibían un bocadillo de nuestro menú local.
Mientras los trabajadores de oficinas especialmente los de catastro del Ayuntamiento de Angel Francisco recogían sus pertenencias en la víspera a la toma de posición del nuevo Alcalde, Arias asistente de Angel Francisco y dirigente del partido desde 1969, cuando se inició en el comité municipal juramentado por el dirigente nacional del Partido, señor Marcos Antonio Veras en los predios de Altamira; era despojado del revólver que usaba. Esta actitud del nuevo incumbente era la primera señal y muestra del odio que sentía por Arias y por la dirigencia del Partido Blanco -- el profesor no merecía ese trato ultrajante y denigrante—dijo Antonio García alto dirigente de la misma organización, propio para ser aplicado a un delincuente al que no se llevaría a la cárcel por consideración pero del profesor Arias podían señalar que estaría opuesto al engaño al robo al mal trato a los empleados, a la malversación de fondo…nadie podía señalarlo con el “dedo de la desvergüenza” que por su categoría de empleado y la calidad de miembro de la organización sentía desprecio en su ausencia… y en su presencia hipocresía. ¿Acaso los enanos y camaleones se creen que los otros no se dan cuenta que el sapo no es pez, y que la anguila no es culebra? ¿Será sólo a la persona del señor Cruz Arias, o yace en el interior de los interiores de la vida del brioso y muy hedonístico y voluptuoso Alcalde la espina del odio por los Perredeistas ortodoxos o es por todos? ¿Quizá no sea él el único que desprecia al profesor, y a Esteban José Polanco, y a Ismael Cruz Bonilla?..¿Cuántos Camaleones, General Gregorio Luperón, viven en las orejas del buey que más hala? ¡Coronel Caamaño! ¿Qué hacemos con los timadores, con los camaleones asaltantes enquistados en las entretelas de los tejidos de nuestra sociedad?
En el mes de octubre recibía el señor Angel Francisco el nombramiento de director de la aduana de de la “Zona Franca” de Puerto Plata. Los del entorno de Angel Francisco hicieron individualmente los aprestos para ocupar asiento en esa dependencia pública. Especialmente Arias, quien había sido su ayudante fiel y leal quien no hizo la más mínima actividad que perjudicara la gestión de Angel Francisco y la del partido. Además… y como hay que ni pensar que Angel Francisco estuviera de acuerdo con el Síndico Rafael, para sacarlo del Ayuntamiento como a un delincuente, por no haberle apoyado con las pretensiones congresuales. ¡Hay que si suponerlo!... pero las alas de los débiles con el triunfo se humedecen y como zaramagullo zabullen en su alegría y olvidan a los fieles y leales, dejan de batir el aire y se contaminan… tanto Rafael como Angel sobre la nube de sus posibilidades creyeron haberla construido... olvidaron que era del Partido porque cosa como esas son del universo no de particulares. Fue el partido usando ese instrumento popular quien lo emplumó y los llenó de aire en sus fémures y los cúbitos y radios de sus brazos calzándoles de oxígenos e hidrógenos de la socialdemocracia. De esa ceguera, de esa nubilación, nace que el partido descrezca y se marchite y eso bien lo sabe todos los dirigentes que impidieron que Bobón ocupara el puesto solicitado a Educación negado para facilitárselo a un advenedizo y que Daniel Ventura saboreara el manjar entero, en manos de trepadores Camaleones.Todos ocuparon curules en el ayuntamiento y en aduana menos Arias impidiendo… ¿Qué? Buscando que treinta votos de la familia Cruz Arias, de los Indalecio Torres, Arias Peña, de los Torres Arias… ¡y los de sus cercanos… se ahuyentaran? Si era eso… ¡no lo consiguieron!
Nicolasio terminaba la jornada con los estudiantes del Liceo dándoles algunas estrofas del Himno del movimiento Antitrujillista e imperialista Catorce de junio, luego de dictarle que las embarcaciones en que entraron por las costas puertoplateñas fue La “Timina”, que entró a Estero Hondo el 20 de junio del 1959. El Avión-46 Curtís, llevó a los expedicionarios a Constanza el 14 de junio cuatro días antes. La embarcación que llegó a Maimón se llamaba Carmen Elsa. --El Himno- dijo Nicolasio- con alto sentir patriótico pedagógico como no es largo lo escribiremos ¡entero! ¿Qué creen?--¡Vamos dijeron entusiasmados!
“Llegaron llenos de patriotismoEnamorado de un puro ideal
Y con su sangre noble prendieron La llama augusta de la libertad. Su sacrificio, que Dios bendijoLa Patria entera glorificará Como homenaje a los valientes Que allí cayeron por la libertad Catorce de junio Gloriosa gesta nacional
Sus mártires están En el alma popular.Hermanas Mirabal -Heroínas sin igual Su grito vibrante…Es el grito de la Patria Inmortal”. Letras de Vinicio Echavarría, Leandro Germán
Semanas antes de Angel Francisco dejar la sindicatura Imbertolina estuvo en el hospital visitando a Dobleese, quien en presencia de Arias, al que reconoció y en más de una ocasión llamara con el apelativo de Negro, confesó haber sido un soldado harto conocido como agente del mal Trujillista y soldado de los doce años balaguerianos donde en ambas circunstancias un opositor a ambos regímenes valía menos que una saliva o una ralá de gallina. Era una crápula, una basura nociva a los tejidos del cuerpo social. --Fui un militai—dijo- asqueroso corrupto, innoble, indeseable, porque me presté para matai envenenai jóvenes o sencillamente…llevailos a las salas de toituras. Yo vi a los 39 muchachos, eran conocidos con el sobrenombre de panfleteros-- vi moril a muchos poi los atosigamientos de Clodoveo Oitíz y Candito Torres Tejada.
Angel Francisco sintió calofrío cuando escuchó decir—lo úitimo que Doblepe, mi compañero y yo hicimos, fue daile la comida revueita en mieida de pueico y miao de yegua acabaita de paril…eso no fue, lo úitimo si señoi, fue un locrio con placenta de vaca. Finaimente señoi, estuve en las toituras que recibiera el doitoi Valera Benítez, para que este, creio qui se llamaba Rafael, escribiera un libro titulado “Complot desvelado” Quiero antes de morilme, antes de conveitilme en ei metamoifico… infoimailes a ustedes dos, ¡qui fui miembro de un grupito de alicates y aicaguete, que atropellábamos a los jijos de revolucionarios y violábamos las jijitas de aigunos escogidos… y todo lo jacíamos poi traguitos, de romos y de cervezas; poi cajitas de cigarrillos y faidas. ¡Agora! señoi Síndico y heimano mio, puedo dicile qui Doblepe y yo…, hicimos acciones contra cura y seminaristas, qui estuvieron en ei movimiento catoice de junio conspirando contra la tirania –¡esos eran! entre más de tres docenas de nombres: Danielo Cruz Inoa, este era jefe del grupo ACC. “Acción cultura y clero” Ciprianito Gorostiaga, Vinicio Disla, Lantiguita, Múrrai, creo que Jiménez…pero no estoy seguro, aclaraba. Otros creo que hasta aprecio Doblepe, le jabia tomado eran William, Apolinai, Medina, Marito Cepeda, y Renito Parra. Finalmente cuando Arias le hizo entrega de dos fundas con regalos: preguntó si habían llevado un pedacito de GEO con galletita de soda, y cuando los vio en su mano, destapó con el colmillo en casquetado en oro, una de las…cervezas Lowen Brawn. Este ejercicio produjo un poderoso dolor de cabeza… con la mano zurda se la sostenía porque pensaba que se le caería al piso de cemento. Entonces dio las gracias con una palidez exagerada y una leve sonrisa.
Angel Francisco y Arias, dejaron el hospital, al darse cuenta que Dobleese fingía morir que en apariencia deseaba estar solo para degustar lo que en su mente era un de los mejores manjares de su vida civil. Al quedarse solo comió como un camaleón, cambiaba de oscuro a claro y de claro a verde y de verde a colorado masticaba, y recordó que no tuvo tiempo para manifestarles que había visto junto de Carela y de Guachupita aplicándoles los toltores a Fefé Benítez. También olvidó decirle que Isabel Lengua Suave, y Patica de Chivo fueron sus primeras mujeres…que el era víctima de la influencias sexuales con el mal de la época el V y H. tan mal como la corrupción.
Dobleese tenía el carácter sin planes ni objetivos firmes, y muchas menos metodologías, enjuiciaba a los otros partiendo de sus intereses que en el orden del enanismo que viajaba siempre con El acompañándole en todas sus actividades. Los impulsos de su energía, la de su vida interior durante su niñez eran para el juego de azar y para el hurto igual que su hermano Celso. Poseía condiciones para la traición para la vanidad, el engaño, anarquista y para el oportunismo, la envidia, la prepotencia, y mucho más para la intriga. Hablaba de sus andanzas alabándose, de todas las fechorías antes de ser agente de la tirania miembro del ejército de Trujillo. Terminó de comerse la libra de Queso Geo y cuando hizo tres tragos bien largos de la cerveza, que había destapado con los colmillos cayó de rodilla en la verandilla de la cama de hierro creyendo que iba a morirse se desplomó en el suelo quedando yerto y su cuerpo reducido a menos de pie y medio de estatura. Sin embargo llegó a pensar –“nunca en mi juventud, temí a corrientes de arroyos crecidos, ni a nubarrones morados o plomizos.
Amé la bajeza, viví en el fango, en las cloacas, no supe de las cosas hermosas que la vida… le ofrece a los humanos para en conjunto cosechar la felicidad.Hacía mucho calor, la brisa se había empeñado a compartir con los chóferes que desde hacía 24 horas estaban en quietud huelgaria. En la ciudad con la llegada de la lluvia había un intenso apagón el director del hospital llamó al señor Fermín Hilario para corregir averías que se habían presentados debido a los fuertes truenos y descargas eléctricas, cuando el señor Díaz entró para saludar a Dobleese lo encontró muerto con el cuerpo reducido como el metamórfico.

FIN DE LOS CAMALEONES DE junio de 2008.Bajabonico de las Garzas. Imbert de los Cañafístoles…Puerto Plata, R.

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